Tucker Carlson: la estrella de la Fox caída en desgracia que ahora se manifiesta con Abascal

BarcelonaTucker Carlson (San Francisco, 1969) era una de las caras más conocidas de la cadena americana Fox hasta el pasado abril, cuando fue fulminantemente despedido por dar alas a la conspiración sobre el fraude en las elecciones que dieron la victoria a Joe Biden por encima de Donald Trump. El pasado lunes, Carlson apareció junto a Santiago Abascal en las protestas ante la sede del PSOE contra la amnistía en Madrid. Pasearon por la capital mientras hablaban de la familia y cenaron juntos. "Es un hombre que piensa a lo grande y esta es la gente que cambia la historia", dijo sobre el dirigente de Vox.

Gurú mediático de la extrema derecha, Carlson es antifeminista, negacionista del cambio climático y un defensor de la teoría del "gran reemplazo", una conspiración que sostiene que existe un plan oculto para sustituir a las personas blancas en Occidente. Su encuentro con Abascal en Madrid agranda la lista de líderes de la extrema derecha con los que se ha reunido y a los que ha entrevistado, como el brasileño Jair Bolsonaro, el húngaro Viktor Orbán y el argentino Javier Milei.

Los acercamientos del expresentador con regímenes autoritarios encuentran la máxima expresión en la posición que mantiene sobre la guerra de Ucrania. Carlson ha expresado su apoyo público a Rusia e incluso ha tratado de entrevistar a Vladímir Putin en el programa autoproducido en X (antes Twitter) Tucker on X, con el que intenta reflotar su carrera mediática. Cuando Estados Unidos frenó la entrevista a Putin, Carlson acusó a los servicios secretos de haberse enterado pinchándole las comunicaciones.

Otro capítulo en la vida profesional de este comunicador es la relación de amor-odio que mantiene con Donald Trump. El expresentador pasaba por ser una de las voces mediáticas más fieles al expresidente republicano, una relación que Bloomberg llegó a calificar de bromance. Sin embargo, unos correos filtrados de 2020 en los que Carlson hablaba de Trump tras las elecciones dejaron estupefactos a sus seguidores más fieles: "Lo odio apasionadamente. No puedo soportarlo más".