Vox rectifica y dice ahora que no facilitaría una investidura de Salvador Illa

Rocío Monasterio contradice a Ortega Smith y asegura que "nunca" serán "socios indirectos de los enemigos de España"

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Cuatro días después de que Vox intentara marcar la agenda política asegurando que apoyaría una investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat, el partido ultra ha rectificado. Lo ha hecho este martes por la mañana la portavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, Rocío Monasterio, que ha negado el apoyo de su formación a una supuesta investidura del candidato del PSC el 14-F. "En ningún momento favoreceremos una investidura de quien es socio del golpismo", ha afirmado en una entrevista a TVE. Monasterio hacía una enmienda de arriba abajo a las palabras que el secretario general de la formación, Javier Ortega Smith, pronunció el viernes en una entrevista a Ok Diario, donde aseguró que Vox facilitaría la investidura de Illa "para que no gobiernen los golpistas".

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"Que pierdan toda la ilusión", ha dicho Monasterio dirigiéndose al PSC. "Nunca seremos socios indirectos de los enemigos de España", ha insistido. La dirigente del partido de extrema derecha ha negado que estuviera rectificando al secretario general del partido y ha recordado que el propio Ortega Smith ya hizo un tuit el viernes al atardecer asegurando que Vox nunca facilitaría la investidura de Illa porque "PSC y ERC son socios en el Frente Popular". A pesar del intento de rectificación del secretario general del partido, lo cierto es que sus palabras fueron claras en la entrevista del viernes: "Si depende de nosotros que no gobiernen los separatistas y golpistas, haremos todo lo que podamos, incluso apoyando algún candidato a la investidura".

El PSC, sin embargo, este lunes rechazó el apoyo de Vox a una eventual investidura de Illa. "No, nunca y nada. No queremos saber nada de la ultraderecha", afirmó la viceprimera secretaria de los socialistas, Eva Granados, en rueda de prensa al ser preguntada por esta cuestión. Este fin de semana los partidos independentistas, y también los comunes, aprovecharon las palabras de Ortega Smith para preguntar precisamente a los socialistas si estarían dispuestos a aceptar los votos de la extrema derecha y cargar contra este eventual apoyo en el Parlament.