El 86,6% de los catalanes ya tienen algún tipo de inmunidad contra el covid

Salud dejará de hacer test de antígenos el próximo lunes a los alumnos que sean contactos de positivos

BarcelonaEl 86,6% de los catalanes han estado en contacto con el covid, sea porque se han infectado en algún momento o porque se han vacunado, según ha informado este miércoles la secretaria de Salud Pública, Carmen Cabezas. Esto significa que cuatro de cada cinco personas en Catalunya, unos 6,7 millones de habitantes, tienen algún tipo de inmunidad contra el coronavirus. El 77% de la población está vacunada (el 43% ya ha recibido la tercera dosis) pero, además, solo en la sexta ola ha habido más de dos millones de infecciones, una transmisión tan elevada que ha disparado las cifras de inmunidad natural.

Una parte importante de los casos detectados (7%) desde diciembre, sin embargo, son reinfecciones, que han aumentado respecto a otras oleadas por tres motivos. En primer lugar, porque el virus hace dos años que circula y hay personas que han ido perdiendo la protección que habían adquirido. Además, la variante ómicron es más transmisible y contagiosa y tiene más capacidad para infectar a alguien que ha superado una infección previa causada por variantes anteriores. Y, por último, porque la mutación se escapa parcialmente de la pauta de vacunación con dos dosis.

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Ahora, sin embargo, Salud afirma que la sexta ola va a la baja de forma “rápida y clara” y que todos los indicadores demuestran que va “por el buen camino”. “Pero todavía tenemos unas incidencias muy altas”, ha dicho. Hoy por hoy se detectan 2.263 casos por cada 100.000 habitantes. Y precisamente porque la situación epidemiológica ha mejorado en todos los grupos edades, también en los más jóvenes, Cabezas ha anunciado que a partir del próximo lunes dejarán de hacer test de antígenos a los escolares cuando haya un positivo en el aula. Solo se mantendrán los cribajes entre los profesores y en los centros de educación especial.

Además, la conselleria ha confirmado el tercer caso de la variante sigilosa, una subvariante de la ómicron, en Catalunya. “Pero la aparición es muy esporádica”, ha dicho Cabezas. Esta mutación haría el virus más contagioso y más difícil de detectar, pero, en cambio, igual de leve que la ómicron original.