Vallcarca se organiza y detiene el primer macrodesahucio de 40 familias con 13 menores
El Ayuntamiento reitera que pedirá una orden judicial y derribará los edificios mientras busca soluciones habitacionales para los afectados
BarcelonaMás de 500 personas se han reunido desde las 7 de la mañana de este miércoles en la avenida Vallcarca de Barcelona, a la altura de la calle Farigola, para impedir el primer intento de desahucio de dos bloques de pisos y una nave propiedad del Ayuntamiento de Barcelona. Y de momento lo han logrado.
Las 40 familias que viven, entre ellas 13 menores escolarizados en el barrio, han decidido hacer resistencia pacífica y –junto a los movimientos sociales y los sindicatos de vivienda del barrio– han organizado una serie de actos para frenar la llegada de la comitiva de este primer desahucio administrativo voluntario. Se trata de una organización muy similar a la que ya se vivió en la Casa Orsola, en el barrio del Eixample de la capital catalana, en enero.
Hoy el objetivo también era evitar que la comitiva echara de casa a las personas que viven ocupando estos blogs desde hace años. El Ayuntamiento les envió las notificaciones de desahucio hace algunas semanas y les recordaba que los blogs acabarían derribados, para poder continuar con el plan de remodelación urbanística preparado para el barrio de Vallcarca. Fuentes municipales aseguran que estas familias viven en situación de "infravivienda" y que el consistorio no puede garantizar la seguridad ni el mantenimiento de las fincas. "La única alternativa respecto a estas fincas era y es derribarlas", reiteran desde el Ayuntamiento.
Las familias afectadas, en cambio, mantienen que los pisos no tienen ninguna deficiencia, de acuerdo con las cédulas de habitabilidad y los informes técnicos independientes que han pedido. Por eso reclaman poder quedarse en los bloques, al menos hasta que el consistorio haya expropiado todo el resto de terrenos afectados por el plan urbanístico, un paso necesario para poder empezar a construir, pero que todavía se puede alargar años.
El primer momento tenso de la mañana llegó poco después de las 7. Según explicaron los organizadores, la comitiva municipal se presentó, escoltada por la Guardia Urbana de Barcelona, en la puerta trasera de dos de los edificios (que también tienen una entrada y salida por la calle Bolívar 48 y Bolívar 54). "Cuando se les pidió la identificación y se les cerró el paso se marcharon, diciendo que iban a los juzgados a pedir la autorización", detallaron los organizadores del acto.
Los portavoces del Ayuntamiento matizan que los técnicos municipales sólo se han personado en las fincas para "constatar" que siguen ocupadas, como parte del procedimiento de desahucio administrativo voluntario. Una vez comprobado que todavía vive gente, explican, el próximo paso será pedir autorización judicial para realizar "la ejecución forzosa". "En todo caso, el Ayuntamiento de Barcelona ha trabajado y seguirá trabajando para atender las situaciones de vulnerabilidad y ofrecer los recursos y soluciones sociales y habitacionales adecuadas a las necesidades de las personas, con especial atención a la infancia", remarcan desde el consistorio, al tiempo que admiten que por el momento todavía no se ha ofrecido ninguna alternativa a las familias afectadas.
"Quieren cargar todo el problema estructural de la vivienda en los Servicios Sociales. ¿Y qué nos dicen los trabajadores que están al pie del cañón en los servicios sociales? Que ellos no pueden asumir un problema estructural como es el de la vivienda", ha dicho Iru Moner, uno de los vecinos de los bloques afectados y miembro del movimiento vecinal Som Barri. Moner ha señalado al PSC, al que acusa de "volver a la política del ladrillo y la burbuja inmobiliaria": "Nos están echando de la ciudad, nos privan de vivir en nuestros barrios. Esto es el inicio de un conflicto de ciudad y ahora mismo Vallcarca es la barricada contra la gentrificación en Barcelona".
Soporte vecinal al estilo Orsola
Y mientras el desahucio se debatía en la puerta trasera de los edificios, en la calle la jornada reivindicativa se vivió de forma tranquila y la retirada de la comitiva se anunció desde un balcón y se celebró como una victoria social. Los actos callejeros, que se han podido seguir en directo a través de la plataforma YouTube, han contado con el apoyo y la presencia de diversas personalidades, sobre todo del mundo de la cultura y los movimientos sociales.
Los parlamentos se han sucedido durante toda la mañana. Han participado organizaciones del movimiento por la vivienda, como el Sindicato de Alquiladoras y la COSHAC, y también el tejido asociativo del sector de la educación, con Docents080 y el sindicato de estudiantes SEPC, y otras plataformas de trabajadores públicos, como Cabecera, del ámbito de la salud, los Bomberos Contra los Desahucios y A Cobert, una nueva plataforma.
También han intervenido asociaciones vecinales; vecinos que han sido protagonistas de otros desahucios multitudinarios, como Josep Torrent, de Casa Orsola, y se han realizado lecturas de poemas y actuaciones musicales. Con la ola de calor encima, los organizadores celebraron la retirada de la comitiva municipal con un final de fiesta pasado por agua, con una fiesta de la espuma.