Dieciocho migrantes muertos y 76 heridos en un intento de salto masivo a la valla de Melilla

MadridDieciocho personas han muerto esta mañana durante un alud humano en la frontera entre Marruecos y Melilla, en la provincia de Nador. Centenares de subsaharianos han intentado saltar la valla y 133 han conseguido poner pie en la ciudad autónoma española, después de enfrentamientos con las fuerzas policiales marroquíes. Según la agencia Efe, ha habido 76 heridos entre los migrantes, trece de los cuales de gravedad, y 140 entre los agentes, cinco de los cuales graves. Es la entrada de inmigrantes en Melilla más masiva desde marzo y la primera que se produce después de la nueva etapa de relaciones entre España y Marruecos.

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha elogiado desde Bruselas la coordinación entre las fuerzas policiales de Rabat y los cuerpos de seguridad del Estado. "La gendarmería marroquí se ha obstinado al impedir un asalto violento que pone en cuestión nuestra integridad territorial, bien organizado, bien perpetrado y bien resuelto por los cuerpos de seguridad, tanto de Marruecos como de España", ha subrayado el jefe del ejecutivo. Casi 2.000 personas se han acercado a la zona fronteriza del barrio chino y buena parte han sido contenidas por las fuerzas marroquíes. "Marruecos también sufre un problema de presión migratoria, en particular de una zona inestable como Sahel", ha remarcado Sánchez.

Según explican las autoridades marroquíes a Efe, la mayoría de los migrantes son sudaneses que los últimos días se habían ido congregando en bosques y montañas a pocas decenas de kilómetros melillenses. Es por eso que las fuerzas policiales ya estaban preparadas para los hechos que han acabado pasando esta mañana. De hecho, los servicios de seguridad marroquíes hicieron dos intervenciones este jueves y el pasado sábado para abortar los preparativos de los asaltantes. Los migrantes disponían de cuchillos de fabricación artesanal, ácido, martillos, piedras y palos, y el enfrentamiento ha implicado una cifra considerable de heridos.

Ante este nuevo episodio de tensión en la frontera melillense con Marruecos, el PP ha cargado contra el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, lo ha instado a comparecer de manera urgente en el Congreso y a dimitir de su cargo. "Es inadmisible la dejadez del gobierno y el abandono de las fuerzas y cuerpos de seguridad que defienden nuestras fronteras", ha manifestado la portavoz de Interior del PP, Ana Vázquez, a través de Twitter. Además, ha señalado Rabat: "¿De qué ha servido cambiar la postura sobre el Sáhara Occidental?", se ha preguntado.

Se trata de la primera entrada en Melilla desde la normalización de las relaciones entre España y Marruecos en abril de 2022, después del giro del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, sobre el Sáhara Occidental. Por primera vez, España se puso junto a Marruecos y apoyó a su propuesta de autonomía para el Sáhara Occidental, enterrando su neutralidad ante el conflicto. Sánchez mandó una carta al rey Mohammed –difundida por la casa real marroquí–, en la que aceptaba la fórmula de autonomía que propone Marruecos porque, argumentó, es la "base más seria, realista y creíble para la resolución" del conflicto. En un comunicado posterior, la Moncloa aseguró que España inicia una "nueva etapa de la relación" con Marruecos que se basa en el "respeto mutuo, el cumplimiento de los acuerdos, la ausencia de acciones unilaterales y la transparencia y comunicación permanente". El salto masivo en Melilla coincide, también, con la cumbre de la OTAN que se tiene que celebrar en Madrid los días 29 y 30 de junio, un motivo por el cual se han extremado las medidas de seguridad.