Confirmados los cambios en bachillerato: las ciencias se fusionan y el trabajo de investigación valdrá la mitad

BarcelonaEl departamento de Educación ha confirmado este miércoles los cambios en el bachillerato que llevaban meses sobre la mesa, tras recibir un requerimiento del gobierno español para que Cataluña se adapte a la normativa estatal en esta etapa de la educación postobligatoria. Todas las modificaciones empezarán a aplicarse en los estudios de los alumnos que empiecen primero de bachillerato el 1 de septiembre de 2026. rasgos, el principal cambio, que ya se había ido explicando, es que en 1º de bachillerato –el curso en el que se concentran la mayoría de las modificaciones curriculares– las materias científicas se fusionarán. geología y ciencias ambientales (3 h), que pasarán a formar parte de una sola asignatura de 4 horas. Sin embargo, todo se podrá complementar con cuatro nuevas optativas anuales de dos horas por semana que serán física+, química+, geología+ y biología+ Ahora bien, que estas optativas se apliquen o no depende de lo que decide.

A parte de los cambios en la rama científica, una de las novedades más destacadas de esta nueva adaptación curricular será que el trabajo de investigación (TR) perderá peso en la nota final de bachillerato. Si hasta ahora este trabajo muy característico del bachillerato catalán suponía un 10% de la nota final de esta etapa bachillerato; esto significa alrededor de un 4% o un 5% de la nota final en función de cuántas asignaturas optativas tenga cada centro y de si éstas son trimestrales o anuales Menos horas de optativas y literaturas blindadas

Aunque la modificación del currículo de bachillerato ha generado muchas críticas, este miércoles la secretaria de Mejora Educativa, Pepín Beltran, ha defendido que con los cambios no se van a perder horas de formación de cada modalidad y que "incluso en algunos casos se incrementarán". De esta forma, en el nuevo bachillerato los alumnos de primero realizarán 12 horas semanales de materias de modalidad –las características de cada rama (científico, humanístico, tecnológico, social, etc.)–, cuando hasta ahora hacían 9 h. Este cambio afectará a todos los alumnos, ya que se aplicará en todos los bachilleratos y no sólo al científico. Sin embargo, para conseguirlo se reducirán las horas de materias optativas –las que puede escoger cada alumno en función de lo que desee hacer en la selectividad–, que pasarán de ocupar 9 horas semanales a tener 6.

Una de las preocupaciones que hicieron poner el grito en el cielo a los docentes fue que inicialmente el requerimiento que envió el gobierno español preveía que las literaturas catalana y castellana dejaran de ser materias de modalidad (obligatorias en el bachillerato humanístico) y pasaran a ser asignaturas optativas. Tal y como ya anunció desde un primer momento la consellera de Educación, Esther Niubó, el Gobierno ha pactado con el ministerio "blindar" las literaturas y, por tanto, seguirán siendo materias de modalidad como hasta ahora. Según Educació, la decisión se ha tomado porque así "se reconoce la singularidad cultural e histórica de estas materias".

Disconformidad de los docentes

El hecho de que el Govern haya confirmado que mantendrá la idea de fusionar las materias científicas de primero de bachillerato ha indignado una parte importante de los docentes de ciencias que llevan tiempo advirtiendo que el cambio puede ser perjudicial para la formación de los alumnos. En este sentido, desde la plataforma Ciencias en Peligro, la profesora de física y química Sandra Rodríguez ha insistido en que es "inaceptable que un gobierno destrose la educación científica de todo un país" y ha asegurado que el departamento ha tenido margen para negociar con Madrid los cambios, pero que finalmente "les ha acatado sin ningún criterio pedagógico". También criticaron que, pese a reunirse con ellos, Niubó no "se ha movido ni un milímetro" de su posición.

Por todo ello, desde Ciencias en Peligro han anunciado que inician una campaña para llamar a los docentes que como forma de protesta se nieguen a corregir las pruebas de selectividad. Ante este escenario, la secretaria de Mejora Educativa ha insistido en que "la corrección de estas pruebas por parte de los docentes es voluntaria" y ha asegurado que en estos momentos no están preocupados, ya que hay profesionales suficientes para cubrir esta tarea que pueden realizar tanto docentes de instituto como profesores de universidad.