Barcelona ya tiene diecisiete bachilleratos: ¿cómo se decide cuáles hace cada instituto?
El próximo curso se estrenarán dos y ya se puede optar a la preinscripción, que se alargará hasta el 10 de abril

BarcelonaA casi cualquier adolescente que está a punto de terminar la ESO la pregunta "¿qué vas a hacer?" le persigue durante meses. Hasta hace poco, a los que contestaban con un "quiero hacer bachillerato" recibían una pregunta instantánea: "Humanístico, científico o artístico –algunos también incluían el tecnológico–?" Ahora bien, si hoy alguien quiere aprovechar una comida familiar para sacarle este tema a un sobrino, un nieto o un hijo y hablar de todas las opciones que tiene, probablemente la conversación debería alargarse más allá de la sobremesa, porque sólo en Barcelona el próximo curso habrá hasta diecisiete bachilleratos para elegir.
"Muchas veces pensamos que el bachillerato nos sirve sobre todo para preparar la selectividad, pero esta es una idea que debemos empezar a dar la vuelta porque evidentemente es la puerta de acceso a las PAU, pero también a los grados superiores que tienen una oferta amplísima", explica la directora de estudios postobligatorio del Consorcio de Consorcio. Con esta idea, desde el Consorci llevan varios años trabajando para ampliar los detalles de las titulaciones que pueden obtener los alumnos de bachillerato sin superar los límites del currículo que marca el departamento de Educación.
De esta forma, en la preinscripción en el bachillerato que ha comenzado este viernes en Cataluña y que se alargará hasta el 10 de abril, en el caso de la capital catalana se podrá optar a dos nuevos bachilleratos. Por un lado, en el instituto Miquel Taradell se estrenará el Bachpro socioeducativo que tendrá optativas relacionadas con los ámbitos de la educación y la intervención social como mediación comunitaria, economía social o primeros auxilios. Por otra parte, en el instituto Verdaguer y el instituto Hospital del Mar FP Sanitaria también se pondrá en marcha un nuevo bachillerato que durará tres años y que tendrá la particularidad que combina la titulación de bachillerato con el grado medio de técnico en farmacia.
"Es cierto que con estos bachilleratos no obtendrán el título del ciclo formativo, pero les permitirá acceder al grado superior que quieren mucho más preparados y siendo más conscientes de las particularidades de esta rama de formación concreta", detalla Vallduriola, quien advierte de que, a veces, cuando alumnos de un bachillerato genérico.
Más allá de estas dos novedades, Barcelona tiene otros bachilleratos no tan habituales. Por ejemplo, bachilleratos singulares como el digital, que ofrece materias específicas relacionadas con el mundo digital; el lingüístico, donde se cursan materias específicas de idiomas en la Escuela Oficial de Idiomas (EOI), de forma que los alumnos obtienen el certificado A2 de una lengua, o el bachillerato internacional, que da acceso a cualquier universidad del mundo y se obtiene mientras se cursa, en paralelo, el bachillerato catalán.
¿Quién y cómo decide la oferta de tu instituto?
Ahora bien, si en Barcelona hay unas setenta institutos, ¿cómo se decide qué centro hace cada una de las diecisiete modalidades que se ofrecen en la ciudad? "Nosotros cada año hacemos un sondeo en todos los centros de Barcelona pidiendo cuál es el objetivo que tienen de cara al año siguiente y lo combinamos con cuál es la orientación que nosotros hacemos", describe la directora de estudios postobligatorios. De esta forma, el hecho de que se abra o no una nueva modalidad de bachillerato en un centro depende de si el Consorcio detecta una necesidad y hace una propuesta a ciertos institutos, si bien también puede darse que un instituto pida abrir una porque ha visto que tiene mucha demanda.
A partir de aquí también se tienen en cuenta factores evidentes como el tamaño del centro –espacio, número de grupos, de docentes, etc.– o el hecho de que no haya unos estudios similares o idénticos muy cerca. Pero después también hay situaciones en las que se propone a un instituto que está quedando un poco más "en horas bajas" que abra un nuevo bachillerato que se sabe que es atractivo y tiene una alta demanda para reavivarlo y ganar alumnos. Además, también se intenta crear sinergias entre institutos, bien por estar cerca uno del otro, bien por tener unas líneas pedagógicas similares.
Con toda esta información y teniendo en cuenta también los flujos de alumnos en esta etapa educativa y las necesidades empresariales del país, los técnicos del Consorcio hacen un plan de despliegue del bachillerato y, en coordinación con el departamento de Educación, acaban creando los currículos de estas nuevas modalidades. Sin embargo, Vallduriola es clara: "La voluntad del centro tiene un papel destacado porque si nosotros hacemos una propuesta, pero desde el instituto no se ponen, no tiene ningún sentido".
¿Hasta cuándo se deben estar creando nuevas modalidades?
Aunque desde el Consorcio defienden la idea de intentar hacer un bachillerato "más amplio, orientador y que no sea tan generalista", en estos momentos este objetivo no necesariamente implica crear más modalidades. De hecho, Vallduriola reflexiona que quizás deben revisarse los que se están haciendo y abre la puerta a la opción de que, entre estas diecisiete líneas, en el futuro, algunas se unan de tal modo que sobre el papel haya menos opciones de bachillerato en la ciudad. "El mundo, los estudiantes y las familias cada vez piden perfiles más multidisciplinares y debemos encontrar el sistema para dar respuesta a esta necesidad", concluye.