"Nuestros hijos en sexto no saben las tablas de multiplicar y en segundo empiezan a leer": continúa la revuelta en una escuela de Sabadell

SabadellLa revuelta de las familias contra la dirección de la Escola Andreu Castells, de Sabadell, no afloja. "No queremos la baja, reclamamos la dimisión", exclama Mireia, portavoz de la asociación de familias de alumnos (AFI) del centro. Esta escuela pública acapara la atención mediática desde el martes, cuando el equipo directivo cogió la baja médica en bloque en un clima de críticas reiteradas. Según las familias, detrás del “bajo nivel educativo” de sus hijos está la mala praxis de estos profesionales. Este viernes, tras el horario de clase, un centenar de padres y madres con silbidos, pancartas y camisetas reivindicativas protestaron a las puertas de la escuela para exigir la dimisión o el cese del equipo directivo. Aunque Educació nombró el jueves a tres sustitutos interinos, las familias aseguran que es una medida “insuficiente”: "[El equipo directivo] Puede volver cuando quiera", dicen.

Esta es la primera de las movilizaciones que buena parte de los padres que llevan sus hijos a Andreu Castells tienen previsto convocar hasta que Educació les dé la respuesta que quieren: se manifestarán cada viernes hasta que los tres miembros del equipo directivo dejen su cargo. Las quejas empezaron en 2021, coincidiendo con la renovación del órgano de gestión de la escuela, y han ido subiendo de tono hasta esta semana, cuando la mayoría de las 300 familias con hijos matriculados ha pedido formalmente la dimisión de la dirección con la presentación de 600 firmas. “Hemos ido protestando en las reuniones, pero hemos recibido malas contestaciones, desprecio, despotismo y malas formas por parte del equipo directivo”, denuncia Isabel, quien explica que este curso ha cambiado de escuela a su hija, de 10 años , después de seis años en Andreu Castells. Ha ido a la concentración por solidaridad con el resto de familias.

La dirección de la Escuela Andreu Castells apuesta por una metodología por proyectos y prácticas de innovación pedagógica que no han satisfecho a las familias. “No nos quejamos de la metodología, sino de cómo se aplica: hay alumnos que en sexto de primaria no se saben todas las tablas de multiplicar o que, en segundo, apenas empiezan a aprender a leer”, critica Andrés , un padre, que pone el foco en la dirección y no en el profesorado. Según explican desde la AFI, este mismo equipo directivo estuvo al frente de la escuela pública Marta Mata de Barberá del Vallés entre los años 2009 y 2013 y las familias de exalumnos de esos cursos se han puesto en contacto con ellos para corroborar las quejas y apoyarles.

El caso más evidente es el de los alumnos de sexto de primaria que deben ir al instituto, según las familias. “Ven que no tienen el mismo nivel que los compañeros de otros centros; no saben defenderse en matemáticas y comprensión lectora y lo pasan muy mal. Hemos tenido que hacer refuerzo en casa”, dice Agustín, padre de un alumno de ciclo medio. Los padres aseguran que los propios alumnos se dan cuenta de las carencias educativas. "Nos dicen que se aburren, que siempre hacen lo mismo y que no están motivados", añade Mireia.

A la concentración de este viernes también han asistido exalumnos del centro que ahora hacen educación secundaria y que confirman al ARA que les costó estar a la altura en los primeros meses de cambio de ciclo. Varios antiguos docentes del centro, que se marcharon por discrepancias con la dirección, también se sumaron a las críticas y en un comunicado conjunto señalaron la "poca profesionalidad" del equipo de gobierno. Los extrabajadores denuncian que los cambios metodológicos "no obedecen a un proyecto educativo claro y explícito". "Nos ordenaban llegar a un objetivo muy global pero sin especificar cómo o cómo hacerlo, ya que el proyecto estaba en obras [...] y, hoy, todavía no se ha presentado ningún proyecto educativo", afirman.

La directora se defiende

La directora del centro salió al paso y quiso hacer público su malestar, afirmando que vive un linchamiento sin justificación. Raquel Pérez dice que la baja ha sido "prescrita" por los médicos a consecuencia del "acoso público y mediático liderado por la AFI del centro desde el momento en que se ha erigido en portavoz de las reclamaciones de algunas familias del escola", aunque Educació les ha aprobado "curso tras curso" las programaciones. "En ningún momento nos ha mostrado dudas en relación a nuestra gestión", afirma en un comunicado publicado por Ràdio Sabadell.

De momento, la Inspección del departamento de Educación, que seguía el caso desde antes de las vacaciones de Navidad, ha asumido la dirección de forma interina, mientras dentro del mismo claustro del profesorado se organiza un nuevo equipo de gobierno , con el objetivo de que los alumnos puedan mantener la dinámica escolar. El sindicato UGT, aunque no tiene ningún profesor afiliado en el centro, se ha puesto en contacto con los maestros que se han quedado en la escuela para asesorarles y ayudar a enderezar la situación. El relevo está encaminado, pero todavía no es oficial. “Queremos conocer los nombres de la nueva dirección, esta situación de stand-by no soluciona nada, debemos asegurarnos de que han plegado y que la nueva dirección quiere construir otro proyecto”, concluye la portavoz de la AFI.