Termina el conflicto por la Escuela Sant Felip Neri: un alquiler durante 20 años frena la expropiación

BarcelonaFinalmente, el Ayuntamiento de Barcelona no expropiará los edificios de la Escuela Sant Felip Neri. Después de que el pasado marzo el consistorio y el departamento de Educación anunciaran que iniciaban un proceso de expropiación de varios espacios de la plaza porque no se había logrado llegar a un acuerdo con la Congregación del Oratorio de Sant Felip Neri, ahora el caso da un giro de 180 grados: el Consorcio de Educación ha firmado un contrato de alquiler de 20 años para que la escuela pueda continuar utilizando los espacios en su nueva etapa como instituto escuela público.

El nuevo acuerdo prevé un alquiler de 20 años con la posibilidad de prorrogarlo otros 10 años y también incluye una ampliación de los espacios que hasta ahora había ocupado la escuela. Concretamente, se incorpora dentro del acuerdo el alquiler de la Casa del Gremio de los Zapateros (el edificio justo al lado de la escuela actual) y la planta baja del convento. Una ampliación de espacios que supondrá tener más de 1.000 m2 nuevos a disposición del centro escolar. Esta ampliación ya está firmada, pero no será hasta finales del curso 2023-2024 cuando estos dos espacios podrán ser utilizados por la escuela, ya que la Congregación necesita un tiempo para retirar los materiales de la actividad que realizaba hasta ahora y adecuarlos para el uso escolar.

El nuevo pacto también resuelve el problema con la cesión del oratorio, el espacio que hasta ahora la escuela siempre había utilizado como comedor, pero que la congregación religiosa había reiterado que no podía seguir cediendo porque era un espacio que también utilizaban miembros de la comunidad religiosa. El contrato firmado –del que todavía no se conocen los detalles ni el precio que pagará el Consorcio de Educación por el alquiler– incluye esta parte del oratorio, algo que la primera teniente de alcaldía del área de Urbanismo, Transición Ecológica, Servicios Urbanos y Vivienda, Laia Bonet, ha calificado de "muy positivo" porque era necesario poder garantizar no sólo la actividad lectiva, sino también que los espacios de comedor fueran los idóneos para poder seguir desarrollándose.

Una inversión de 4 millones

Los 359 alumnos de la Escuela Sant Felip Neri empezarán el curso en los mismos equipamientos que han tenido hasta ahora, pero a partir de mañana mismo se empezarán unas obras para adaptarlos a la normativa de centros públicos. Entre las intervenciones que se harán en el espacio durante el mes de agosto se encuentra la sectorización de la primera y la segunda plantas de la escuela, la instalación de rociadores de agua para que se activen en caso de incendio y un nuevo cableado para hacer llegar la conexión a internet a varios puntos tanto del edificio de la plaza Sant Felip Neri (donde se encuentran los cursos de educación infantil y primaria) como en el de la calle de la Palla (donde están los de ESO).

Por otra parte, pronto también se iniciará una licitación para encargar el proyecto para rediseñar la escuela teniendo en cuenta todos los espacios de los que dispondrá a raíz del nuevo acuerdo. Un diseño y una adecuación de equipamientos que tendrán un coste de 4 millones de euros que serán financiados por el Ayuntamiento de Barcelona y para los que todavía no existe una fecha de ejecución.

Con este nuevo pacto, se acaba el periplo que comenzó en mayo del 2021 cuando la Fundació Torras i Bages –propietaria de la titularidad de la escuela, pero no de los espacios que utiliza–, junto con la comunidad educativa y el Consorcio de Educación, decidió incorporar el centro a la red pública porque era inviable seguir funcionando como una escuela concertada. Según la consellera de Educación, Anna Simó, el motivo de la complejidad de las negociaciones ha sido precisamente el gran número de actores que forman parte de este croquis escolar y el hecho de que la titularidad del centro escolar no coincidiera con la propietaria de el espacio de la escuela, junto con la situación poco habitual que fuera el consejo escolar de la Escuela Sant Felip Neri (formado por padres y madres y miembros del claustro de la escuela) quien hiciera la primera demanda de incorporar escuela en la red pública.

Con la incorporación de la Escuela Sant Felip Neri, ya son 8 los centros concertados de la ciudad de Barcelona que han pasado a formar parte de la red pública. Un proceso que también ha supuesto un incremento de 2.718 plazas en el sistema educativo público.