Seguridad

El Govern modificará el último decreto sobre los Mossos para reescribir puntos polémicos

Incluirá la figura del mayor y reformará el redactado del apartado de las escuchas telefónicas "para evitar malentendidos"

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El consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, en rueda de prensa este martes.

BarcelonaEl decreto de reestructuración de los Mossos d'Esquadra, una de las normas más importantes que ha aprobado el Govern en los últimos tiempos sobre la policía catalana, será modificado por el propio ejecutivo para reescribir algunos puntos que el día de su aprobación, en marzo de este año, generaron polémica entre los sindicatos y los grupos parlamentarios. El departamento de Interior y los Mossos llevaban un año trabajando en este decreto, que crea un nuevo organigrama que debe guiar al cuerpo catalán la próxima década. La polémica, sobre todo, se centró en un punto: pasar la competencia de las escuchas telefónicas ordenadas por un juez durante una investigación criminal en una nueva comisaría general de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Dicho de otra forma, las escuchas pasan a no depender de los propios investigadores, sino de otra unidad del cuerpo. "Eso es meter la nariz en las investigaciones criminales", denunciaba entonces el diputado del grupo parlamentario Socialistas y Unidos por Avanzar a Ramon Espadaler.

Pues bien, según fuentes consultadas por el ARA, el departamento de Interior se ha abierto a modificar ese punto. Según una carta del director de la policía, Pere Ferrer, a la que tuvo acceso este diario, se reescribirá para "evitar malentendidos y perjuicios posteriores". Sin embargo, la reforma no será para devolver esta competencia a Investigación Criminal, sino que se quedará en la nueva comisaría general TIC. Ahora bien, se incorporará una frase que explicite que estos agentes actuarán también "como policía judicial". Con este añadido se quiere blindar que aunque estos agentes no sean de la unidad de policía judicial que está investigando el caso sí actuarán como tal. Fuentes cercanas a la elaboración del decreto apuntan a que el cambio de competencias es un movimiento únicamente organizativo y que no cambiarán los técnicos que hacen las escuchas. Simplemente, apuntan las mismas fuentes, pasarán a depender de una comisaría que está pensada para reunir a todas las telecomunicaciones de la policía.

Este movimiento del Gobierno se hará efectivo en los próximos días y viene dado por una proposición de reforma del texto que hecha desde el grupo parlamentario Socialistas y Unidos por Avanzar. Pese a tratarse de un decreto (una prerrogativa exclusiva del Govern), el departamento de Interior abrió un proceso participativo con los sindicatos y los partidos políticos tras la aprobación del decreto para que propusieran las reformas que ellos consideraran convenientes. Todo ante el recibimiento polémico que tuvo la norma. En verano ya se celebró una reunión y este lunes hubo otra. El ejecutivo, tal y como ha ocurrido en el caso de las escuchas telefónicas, ha aceptado algunas de las mejoras propuestas por los partidos y sindicatos. Cuando termine este proceso, será necesario aprobar una modificación del decreto del Gobierno.

Reconocimiento de la figura del mayor

Otro de los aspectos que generó polémica es que la figura del mayor de los Mossos, máximo rango del cuerpo, no estaba recogida en el decreto. Sí es en la ley que regula el cuerpo de la policía catalana, por lo que en su día los redactores del decreto no lo consideraron imprescindible. Sea como fuere, esto generó polémica, más aún teniendo en cuenta que veníamos del cese del mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, como jefe de la policía. Un movimiento que varios sectores de los Mossos vieron como un intento de la cúpula política de tener mayor capacidad de influencia en el cuerpo. Pues bien, ahora, según ha podido saber el ARA, el Govern también ha aceptado, de nuevo a instancias del grupo de Espadaler, incorporar la figura del mayor en el nuevo decreto de reestructuración.

Éstos son los dos principales movimientos que el ejecutivo catalán ha aceptado. En todos los casos, se trata de medidas quirúrgicas y no grandes modificaciones del propio decreto. Por ejemplo, también han aceptado unir las áreas de Mediación y Diálogo que en un inicio el decreto separaba y finalmente crear una única Oficina de Comunicación. También está previsto que Interior admita algunas propuestas que en los últimos días han hecho los sindicatos policiales y otros partidos políticos.

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