Trànsit pide reducir la velocidad en la AP-7 en una operación retorno con 295.000 vehículos
Se prevé que esta autopista y la C-32 sean las vías más afectadas
BarcelonaEl director del Servei Català de Trànsit, Ramon Lamiel, ha vuelto a insistir en la necesidad de reducir la velocidad en la AP-7 y ha pedido “mucha prudencia al volante” este lunes en una operación retorno que se prevé especialmente complicada, puesto que se calcula que unos 295.000 vehículos volverán al área metropolitana de Barcelona.
En entrevistas a Catalunya Ràdio y RAC1, Lamiel ha afirmado que “la movilidad se prevé altísima” y ha pedido que los conductores se informen del estado de las carreteras antes de iniciar su trayecto. Las vías más afectadas serán, como durante la operación salida, la AP-7 en sentido norte y sur y la C-32 en la zona del Maresme. Este fin de semana largo han salido 495.000 vehículos de la zona de Barcelona, un 3% más de los previstos. Algunos ya han vuelto, pero la mayoría lo harán este lunes.
Por esta razón el director del Servei Català de Trànsit ha pedido que se modere la velocidad, especialmente “en las autopistas sin peaje y, en concreto, en la AP-7, donde se ha constatado que el 55% de los accidentes se producen por impactos por detrás”. De hecho, Lamiel pretende solicitar esta semana a la Dirección General de Tráfico (DGT), que es la titular de esta vía, reducir la velocidad máxima permitida en la AP-7 a 110 km/h con el objetivo también de reducir el número de colisiones. Según ha dicho, esta propuesta se basa en un estudio previo que han realizado en la autopista que demuestra que bajando la velocidad se ganan hasta 25 metros de distancia de seguridad.
Retenciones el sábado
En cuanto a las importantes retenciones que se registraron el sábado, Lamiel ha declarado que hay que relativizarlas porque no fueron consecuencia solo de la operación salida, sino también del hecho de que este fin de semana se celebraba el Gran Premio de Motociclismo en el Circuito de Catalunya, y esto también movilizó a unos 100.000 seguidores. Además, el sábado se produjo un accidente en la AP-7 a la altura de Gelida (Alt Penedès) que acabó de complicarlo todo.
Este lunes el Servei Català de Trànsit prevé hacer más controles de velocidad con radares, tanto estáticos como dinámicos, y reforzar la inspección aérea desde helicópteros para detectar posibles infracciones.