Los auténticos fetuccinios Alfredo (sin nata) se comen en el restaurante Casa Tejada de Barcelona

BarcelonaLos fetuccinios Alfredo son como los espaguetis en la carbonara: todo el mundo los prepara, pero pocos como marca la normativa italiana. En Casa Tejada (calle de Tenor Viñas, 3), el restaurante que el cocinero Romain Fornell inauguró el pasado septiembre, los fetuccinios Alfredo los cocinan como Roma, es decir con queso parmesano y mantequilla. No hay natas ni cremas de leche, como en ocasiones se ha dicho tanto de esta salsa como de la carbonara. "Montamos la mantequilla, que es francesa, con el agua de cocción de los fetuccinios, y añadimos a continuación el queso parmesano, que debe ser fresco, es decir, que no utilizamos los secos, porque entonces la receta no queda igual", explica Romain Fornell, cuyo socio es "el amigo del alma".

Casa Tejada ha abierto puertas este otoño, pero en realidad el restaurante fue comprado a los familiares de Just Tejada, el ex jugador del FC Barcelona, ​​hace cinco años. Por varios motivos relacionados con el acondicionamiento del local hasta ahora ha permanecido cerrado. "Buscábamos el momento idóneo, y ahora lo es", dice Fornell.

Sophia Loren, comiendo pasta

Y ahora vamos a la teca. En Casa Tejada los platos de pasta son muy importantes, y se dará cuenta también por las fotografías colgadas en la pared, en blanco y negro, que retratan a las actrices y los actores más importantes del imaginario, a menudo comiendo pasta. Verá, en fotografías en blanco y negro, Alain Delon, Claudia Cardinale, Sophia Loren, Marcello Mastroianni o Federico Fellini. Todos comen espaguetis y en Casa Tejada tienen, pero también podrá probar lasañas, raviolis deossobuco, ñoquis con tomate y albahaca o linguini alle vongola. Que el restaurante es un buen anfitrión de la cocina italiana lo notará también en cuanto se sienta a la mesa. Le llevarán al momento aceitunas, focaccias (deliciosas) y palitos de pan. Y aceite de oliva. Es la forma en que te dicen que sois bienvenidos.

Retomamos el hilo de los fetuccinios Alfredo, porque la forma en que les servirán los camareros, vestidos elegantemente de blanco con ribetes rojos (el trato es exquisito), es ceremonioso. Primero llevan una fuente, en la que mezclan los fetuccinios con la salsa. A continuación los sirven en el plato y rayan sobre trufa (ahora es temporada de la trufa blanca). El plato tanto se puede comer con trufa como sin ella.

Y como no sólo de pasta vive la humanidad, en la carta encontrará muchas otras propuestas. Atención al vitello tonnato. ¡Uno de los buenos! Algún día se podría hacer un ranking de los mejores vitello tonnato catalanes. Tome nota también de los platos de pescados y carnes, que el cocinero, Romain Fornell, cuida porque, como comenta, siempre tienen sugerencias fuera de carta, que cocina eligiendo alguna de las cocinas que conoce: la catalana, la española, la vasca y la francesa. Hablando de culturas, los platos donde le servirán las recetas tienen escrita la palabra cocina en tres idiomas: catalán, en primer lugar; francés, en segundo lugar, y castellano, en tercer lugar. Toda una declaración de principios para un restaurante que apenas comienza, junto al Turó Park de Barcelona.