Germaine Dulac, la cineasta menospreciada por los surrealistas
El Museu Tàpies dedica una exposición a la pionera que reveló las mentiras de Hitler
BarcelonaLa revolución que proclamaban los surrealistas se quedó en sus obras. A menudo se comportaron como unos señoritos de pies a cabeza. La cineasta Germaine Dulac (1882-1942) estrenó la primera película surrealista, La cáscara te le clergyman, en 1928, un año antes que la icónica Un chien andalou, de Luis Buñuel y Salvador Dalí. Pero en vez de felicitaciones, recibió insultos y tuvo que aguantar que Louis Aragon y André Breton le dijeran que era una "vaca". Y el autor del guión, Antonin Artaud, se quejó de que la obra de Dulac, a quien el Museo Tàpies dedica una exposición pionera hasta el 22 de febrero, había desvirtuado su texto. De hecho, antes del estreno del filme, la revista Nouvelle Revue Françaisele había ignorado y había publicado que el director de la película era Artaud. Ella les escribió una carta pidiéndoles que rectificaran.
Las dificultades de Dulac no terminaron aquí: "En los años 50, el crítico Ado Kyrou aún lamentaba que Dulac hubiera dirigido el guión de Artaud y criticaba el resultado por «demasiado femenino»", afirma Imma Prieto, la directora del Museo Tàpies y comisaria de la muestra junto a la crítica cinematográfica Imma Merino. "Los surrealistas la menospreciaron totalmente, nunca aceptaron su cine", dice Prieto. En este sentido, es muy explícita una fotografía en la que Dulac es la única mujer entre una multitud de hombres de la industria cinematográfica vestidos de frac.
La exposición del Museu Tàpies lleva por título Germaine Dulac. Je en plus rien, y entre las piezas que muestra se encuentra el cortometraje antihitleriano realizado con material de archivo Ce que il a dedo: Ce que il a fait (1939), revelador de cómo Hitler hizo todo lo contrario de lo que había dicho en cuestiones como respetar el Tratado de Versalles y no anexionarse a Austria y Checoslovaquia. Se trata de un trabajo poco conocido que se pudo ver en ela gran retrospectiva que la Cinemateca francesa dedicó a Dulac en 2022. "La propia Dulac lo definió como antinacionalista y antihitleriano. Con el auge de la ultraderecha que también tenemos nosotros, no puede ser más actual", dice la directora del Museu Tàpies.
Ce que il a dedo: Ce que il a fait pertenece a un tercer momento en la trayectoria de Dulac en el que dio un giro y se planteó el cine como "una herramienta de conciencia social, o como una forma de documentar la historia", tal y como dice Prieto. "Como una herramienta para transformar también a la sociedad", subraya. Antes de ese cortometraje terminó la película Le cinéma au service del historial con el interrogante "¿Qué camino tomará Europa?" Curiosamente, en una de las cronologías incluidas en una de las versiones del guión, Dulac recogió la Revolución de Asturias de 1934. Pero como puede verse en algunos de los documentos expuestos, tampoco lo tuvo fácil, porque la censura la persiguió desde La cáscara te le clergyman, donde había mostrado el deseo sexual de un cura.
Una cineasta feminista pionera
Hija de una familia acomodada, Dulac fue transgresora también en su vida personal. Tras divorciarse del ingeniero Louis-Albert Dulac, inició una relación con Marie-Anne Colson-Malleville. "En la obra de Dulac siempre es muy importante la reivindicación de la libertad de la mujer", subraya Prieto. Así, en su primer cortometraje, Los soeurs ennemies (1915), una hermana reprocha a la otra que se deje vencer por las convenciones. Además, la protagonista de La fête espagnole (1919) se muestra completamente ajena a dos hombres que se la disputan y que mueren en duelo. Y La souriante Señora Beudet (1923), la película por la que recibió los primeros reconocimientos, es considerada una película feminista pionera porque denuncia la opresión de la protagonista.
A lo largo de su trayectoria, Dulac dirigió una veintena de películas, que podrán verse en una retrospectiva en la Filmoteca de Catalunya. También desarrolló una intensa trayectoria como productora, guionista, crítica y teórica. Así, coincidiendo con la exposición, la editorial Wunderkammer publica sus escritos en catalán y castellano. "Su obra se puede dividir en tres grandes blogs, aunque son transitables, porque hay una manera de entender el movimiento y el ritmo que aparece en todo su cine, sobre todo en los dos primeros blogs", dice Prieto. Estos dos primeros bloques, que fueron simultáneos, corresponden a cierto impresionismo ya la experimentación. En este último se puede ver cómo Dulac jugaba con el collage y la sobreimpresión de imágenes. "Si miramos cómo trataba los exteriores y el movimiento, se puede observar no diría que una belleza, sino la fragilidad con la que capta la atmósfera, el ambiente. Y dentro de eso, da algunos giros surrealistas, como la aparición y desaparición de objetos, o la captura del objeto en el que quiere que te fijes", dice Prieto.