¿Qué literatura catalana se lee en el mundo y en qué lenguas?
La celebración de la 39ª Feria del Libro de Guadalajara, donde Barcelona es la ciudad invitada de honor, es un buen momento para constatar que el castellano sigue siendo la lengua a la que se traducen más libros escritos en catalán, seguida a mucha distancia del italiano, francés e inglés
BarcelonaDecenas de escritores, editores, agentes y libreros catalanes están desembarcando en México, donde del 29 de noviembre al 7 de diciembre se celebrará la 39 edición de la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, la segunda feria del sector editorial más importante del mundo, sólo superada por la de Frankfurt. La presencia de Barcelona como ciudad invitada de honor –con un 80% de autores que escriben en catalán y un 20% en castellano– es un buen momento para analizar qué literatura catalana se lee en el mundo y en qué lenguas, cuáles son los puntos fuertes del sector y qué asignaturas pendientes existen de cara al futuro.
Si se examina con atención la base de datos TRAC del Institut Ramon Llull, que recoge casi 8.000 traducciones publicadas en 74 lenguas, se llega a tres conclusiones vistosas. La primera es que la literatura catalana que el mundo quiere leer no tiene mucho que ver con las listas de libros más vendidos. La segunda, que el castellano sigue siendo, a mucha distancia, la lengua a la que se traducen más libros escritos en catalán. La tercera, que uno de los géneros con una demanda creciente innegable por parte de editores de todas partes es la literatura infantil y juvenil.
El reto de llegar a Latinoamérica
Es difícil saber qué porcentaje de las traducciones actuales se puede encontrar en las librerías
Según el TRAC, en el período 2014-2024 ha habido 1.121 traducciones al castellano de literatura catalana. La segunda lengua con más traducciones de obras catalanas en la última década es la italiana (289), seguida de la francesa (277), la inglesa (236) y la alemana (124). "Que existan tantas traducciones al castellano tiene varios significados. Significa, por ejemplo, que esta lengua sigue siendo la gran puerta de entrada al Estado, aunque no podamos precisar cuál es el porcentaje de ventas en los territorios de habla catalana y el porcentaje de ventas en el resto del país –adelanta Izaskun Arretxe, directora del Área de Mercado con el Área de Literatura del Instituto-. pueden llegar de dos formas: o bien distribuidas por las editoriales que las han publicado en el Estado, o bien en ediciones hechas por editoriales latinoamericanas". De los autores que estarán en la FIL de Guadalajara en representación de Barcelona como cultura invitada, algunos ya se podían leer en ediciones publicadas en España (la gran mayoría: Marta Orriols, Xavier Bosch, Silvia Soler, Regina Rodríguez Sirvent...) y otros que presentarán novedad en México, como es el caso de Xavier Mas Craviotto, de quien la editorial de la Universidad Veracruzana ha apostado por la novela La piel del mundo.
"Es muy difícil saber qué implantación y repercusión tienen los libros que llegan a Latinoamérica –advierte Arretxe–. Es un mercado fragmentado en varios países, que además son muy diversos entre ellos. Hay editores que se interesan por publicar algún autor y se encuentran con que los derechos de traducción están vendidos por lengua y no por territorio. Este detalle impide que los detalles impidan". En caso contrario, cuando un libro está libre y quiere publicarlo una editorial mexicana, colombiana o argentina, el traductor a menudo quiere mantener los rasgos lingüísticos de ese territorio. "Calculamos que alrededor del 7% de los libros de literatura catalana que pueden leerse en el mercado latinoamericano está traducido expresamente para alguno de sus territorios", continúa la directora del Área de Literatura del Institut Ramon Llull. Las traducciones al castellano han crecido notablemente durante la última década: si en 2014 eran 60, la cifra subía hasta 97 en 2019 y aún aumentaba más en 2024, hasta 133. Los datos provisionales de 2025, cuando todavía queda todo diciembre para contabilizar, suben hasta novelas de Ferran Torrent y Mònica Batet, ensayos de Marina Garcés y Josep Ramoneda y el teatro reunido de Josep Maria Miró.
La internacionalización creciente de las escritoras
De los cinco autores más traducidos en los últimos cinco años, cuatro son mujeres
"Si miráramos el histórico de traducciones, Mercè Rodoreda saldría en lo alto de la lista, y habría autoras bastante traducidas, como Carme Riera y Maria Barbal, pero la mayoría de nombres serían de hombre", continúa Arretxe. Entre los autores más traducidos se encuentran clásicos contemporáneos como Salvador Espriu (con 159 traducciones) y Josep Pla (108), También autores todavía en activo y Quim Monzó (98). Rodoreda los supera a todos, con 226 traducciones a una cuarentena larga de lenguas. Sin embargo, hay un caso menos conocido que aún acumula más traducciones que la autora de La plaza del diamante, y es la escritora e ilustradora badalonesa Rocío Bonilla, sobre todo gracias a la serie de libros infantiles protagonizados por la Minimoni.
"Bonilla ha logrado 248 traducciones, una cifra espectacular, y sólo en los últimos 5 años ha logrado 151 traducciones –comenta Arretxe–. Entre los autores más traducidos entre 2021 y 2025 hay muchos que se dedican a la literatura infantil y juvenil". Jaume Copons, autor de series de éxito como elAgus y los monstruos y Bitmax & co, suma 82 traducciones; Elisenda Roca, 40, y Meritxell Martí, 38.La participación de la cultura catalana en la feria de Bolonia en 2017, especializada en libro infantil y juvenil, fue un punto de inflexión importante en este sentido –añade la directora del Área de Literatura del Institut Ramon Llull–. Un detalle que hace crecer notablemente las traducciones de literatura infantil y juvenil es que muchos de los autores escriben series de libros y que, por tanto, su obra contiene más títulos que los autores de literatura para adultos". En este último apartado llama la atención que buena parte de los autores más traducidos (Irene Solà, Eva Baltasar, Jaume Cabré, las listas de libros más vendidos. En la recepción de un libro influye la obra en sí, pero también el autor y su capacidad de llegar a los lectores a través de redes sociales, medios de comunicación y clubes de lectura. Lo que conecta con los lectores de otros países quizás no es lo que más vende en los lugares de origen, y las sensibilidades literarias también varían de un lugar a otro".
Otro dato destacable es la presencia mayoritaria de escritoras en la lista de los autores más traducidos desde 2021. Rocío Bonilla ocupa la primera 1; –la única escritora de novelas para adultos–; la cuarta es para Elisenda Roca (40) y, en quinto lugar, está Meritxell Martí (38). El segundo puesto es para Jaume Copons, con 82 traducciones. internacionales hay cada vez más editoras que no tienen tantos prejuicios a la hora de publicar mujeres", explica Arretxe, quien también señala otras dos buenas noticias: "En esta última década se ha casi doblado el número de traducciones de títulos de no ficción" (se ha pasado de los 27 del 2014 a los 53 del 2024) dialoguen con nuestro presente", asegura, antes de citar el boom reciente de traducciones de Montserrat Roig y casos como los de Blai Bonet y Vicent Andrés Estellés.
¿Y después de Guadalajara?
Tres territorios hacia donde podría expandirse la literatura catalana
Hace poco más de una década, el entonces director adjunto del Institut Ramon Llull, Álex Susanna, hacía énfasis en la "importancia estratégica de aumentar el número de traducciones del catalán al inglés". Desde 2014 la cifra anual de traducciones al inglés no ha descendido de las 20 traducciones y ha llegado a un total de 236; en la década anterior, la cifra total era de 108. “Debemos persistir en los lugares y con las lenguas en las que nos hemos ido consolidando, pero todavía quedan muchos espacios para dar a conocer la literatura catalana –adelanta Izaskun Arretxe–. ponerlo en práctica necesitamos más recursos y gente". Durante la última década se han realizado treinta traducciones del catalán al chino, 26 al árabe, 20 al coreano, 7 al vietnamita y sólo 2 al japonés. "También necesitamos aplicar estrategias para hacer crecer las traducciones de no ficción, de cómic, de clásicos y de obras de teatro –continúa–. Catalunya es una potencia en cuanto a la internacionalización de espectáculos, pero nos queda camino por correr en cuanto a la traducción".
El trabajo que editores, agentes e instituciones hagan desde la FIL, en Guadalajara, se verá reflejado a medio plazo en los catálogos editoriales mexicanos y otros países latinoamericanos. "Los autores de quienes ya han traducido una obra pensando en la feria, con suerte tendrán continuidad en el mismo catálogo o encontrarán otro editor –opina Arretxe–. Habrá 119 editores catalanes, una cifra muy superior a la de ediciones anteriores, dispuestos a hacer contactos y tejer relaciones. Entre ellos hay proyectos que publican como, Periscopio e Ángulo, que pueden conectar con los intereses de editoriales latinoamericanas de dimensiones e intereses similares".