Agüero entra con mal pie en el Barça, entre una lesión de larga duración y la despedida de Messi
El ex delantero del City no podrá volver a jugar hasta noviembre después de su primera lesión en el Camp Nou
BarcelonaLa noche antes del Gamper, cuando todo el barcelonismo se marchaba a dormir confiando en que la noticia de la despedida de Messi fuera una pesadilla que hubiera desaparecido al despertar, Sergio Agüero estaba en la casa de su buen amigo, despidiéndolo. Hace años que los dos se conocen, desde que compartieron habitación en la convocatoria de la selección argentina sub-21, o cuando ganaron el oro olímpico juntos en 2008. Agüero era feliz de poder jugar por primera vez en el mismo club que Messi. Y en sus círculos íntimos, se ha mostrado medio triste, medio enfadado, al ver cómo el capitán del Barça se marcha llorando. Esa noche, sin embargo, entendió que había que despedir a su amigo y fue uno de los reyes de la fiesta, llevando por sorpresa al streamer Ibai Llanos, por ejemplo. Todo el mundo que conoce a Agüero lo define como una persona positiva con ganas de risa.
Menos de 24 horas después, Agüero no estaba en el Johan Cruyff para la presentación del equipo. En el club informaron rápidamente de que el ex jugador del Independiente de Avellaneda estaba lesionado y, por esta razón, los médicos le habían aconsejado no moverse de casa. El Kun, uno de los fichajes de esta temporada, se ha convertido en el primer incendio que tendrá que gestionar un hombre que sabe cómo encarar estos temas, Koeman. En pocas horas, se ha desmentido que el delantero quiera rescindir su contrato y marcharse, ahora que sabe que Messi se marcha. Y la ausencia de Agüero en el Gamper ha puesto más presión sobre el jugador, hasta que el Barça le ha hecho unas segundas pruebas médicas para explicar que tendrá que estar de baja unas diez semanas. Es decir, hasta mediados de noviembre, debido a una lesión tendinosa en el gemelo interno de la pierna derecha que ahora mismo no le permite apoyar el pie en el suelo. Una lesión que se habría hecho en una sesión de entrenamiento el domingo por la mañana, justo antes de ir a la rueda de prensa de despedida de Messi. Para Koeman, que de cara al debut en la Liga contra la Real Sociedad no dispondrá tampoco de Ousmane Dembélé, Ansu Fati y Marc-André ter Stegen, uno de los retos será encontrar quién hace los goles que antes hacían Luis Suárez y Lionel Messi. Sin Agüero, de hecho, quien gana opciones de seguir es el danés Martin Braithwaite, inicialmente destinado a marcharse. Y Memphis Depay sale ganador, gracias a sus goles y la confianza de Koeman, que todavía no ha podido hacer jugar ni un minuto, ni en amistosos, a Agüero, que estuvo en Brasil ganando la Copa América con Argentina, pero jugando poco. Esa Copa América acabó con Messi llorando de alegría junto al Kun. Ahora llora de rabia, separándose de un jugador que, a los 33 años, no deja de sufrir problemas físicos. La suerte no lo acompaña, de hecho. Este año 2021 será baja por cuarta vez. La primera fue por positivo de covid-19. Después, por molestias en la cadera y por un fuerte golpe recibido en un partido de la Premier League.
En el Manchester City, el club en el que de 2011 a 2021 se convirtió en uno de los jugadores más idolatrados de todos los tiempos, llegó a estar un año sin marcar en liga de finales de 2019 a finales de 2020, cuando las lesiones lo martirizaron. Especialmente en 2019 y 2020, Agüero dejó de ser ese jugador que solía jugar más de 30 partidos de liga por temporada a pasar más horas solo en el gimnasio recuperándose de lesiones. Una lesión en la rodilla lo dejó 17 partidos fuera de combate la temporada 2019/20, un curso en el que sufriría dos lesiones musculares más. La temporada pasada solo pudo jugar 12 partidos, ocho de los cuales de titular con cuatro goles marcados en todas las competiciones. Entonces ya estaba hablando con la directiva presidida por Josep Maria Bartomeu, que quería intentar cuidar a Messi, con el que no se hablaba, fichándolo. Esa operación, sin embargo, la cerraría Joan Laporta, mientras intentaba imaginar también cómo renovar a Messi. No ha podido ser. Y uno se marchará a París y el otro todavía no ha debutado en un club en el que más de uno sospecha que lleguen más lesiones de Agüero.