Campaña 'diésel ' y 20.000 votos pedidos a un mes de las elecciones del Barça

BarcelonaEl Barça tendrá por fin presidente dentro de exactamente un mes. Joan Laporta, Víctor Font o Toni Freixa, uno de los tres, cogerá las riendas del club 133 días después de la dimisión de Josep Maria Bartomeu. La carrear hasta la votación y el escrutinio habrá sido larga y agotadora para los socios culés, que el día de los comicios cumplirán justo un año sin ocupar su silla en el Camp Nou (el último partido con público en el estadio fue el 7 de marzo del 2020 contra la Real Sociedad) y solo se han podido expresar firmando apoyos al voto de censura o a su precandidato favorito. La espera será larga también para los periodistas, comunicadores y analistas que comentan la actualidad azulgrana desde el absoluto desgobierno en las oficinas de Arístides Maillol. Pero la pugna sobre todo se hará extenuante para los tres aspirantes, que han tenido que revisar estrategias y redoblar esfuerzos físicos y económicos después de que los comicios se aplazaran del 24 de enero al 7 de marzo por el covid y por la inacción de la gestora de Carles Tusquets para adaptar el proceso electoral a las restricciones de movilidad.

Yoga y 'mindfulness ' para los trabajadores del club

A cuatro semanas de que se coloquen las urnas en Barcelona, Girona, Lleida, Tarragona, Tortosa y Andorra, el candidato Laporta, que confirmó su papel de favorito cuando presentó más de 10.000 firmas de apoyo, es el único que todavía tiene patas importantes de su programa pendientes de presentar. En los próximos días hará un monográfico sobre el Espai Barça, un proyecto que ve con buenos ojos excepto por la financiación, y otro para hablar de las secciones. La carta más jugosa para los socios, la del área de fútbol, se la guardará (después de dos aplazamientos) hasta el 25 de febrero, el día antes del cierre del voto por correo. Mientras tanto sonarán rumores sobre Mateu Alemany, a quien ha alabado en entrevistas, o Marc Overmars, que no renovará como director deportivo del Ajax. Los dos figuran en las quinielas para liderar la planificación deportiva en caso de triunfo electoral del expresidente, que por ahora se ha limitado a reiterar su apoyo a Ronald Koeman y se ha mostrado muy confiado en relación con la continuidad de Leo Messi en la entidad. Es reticente a desestabilizar al equipo con nombres a las puertas del tramo decisivo de la temporada.

De los tres candidatos, Laporta fue el último en presentarse y el único que todavía tiene hilos de los que tirar. En cambio, ha sido el primero en reunirse con los trabajadores no deportivos del Barça, más de 600 empleados de los cuales más de la mitad ya estaban en la institución en su etapa de mandatario (2003-2010). La vista fue el lunes por la mañana por vía telemática y duró más de una hora y media entre las preguntas de los asistentes, algunos de ellos en ERTE, y las intervenciones del presidenciable, que anunció que, en caso de ganar las elecciones, planteará la externalització de los activos que gestiona Barça Licensing & Merchandising (BLM), la empresa que Bartomeu fundó para controlar las tiendas. También dejó caer la posibilidad de tercerizar Barça Studios, el ente que centraliza toda la producción audiovisual del club, y avanzó cambios para eliminar burocracia interna en la toma de determinadas decisiones. Como nota curiosa, explicó que programará sesiones de yoga y mindfulness para todos los empleados que las quieran hacer.

"Es ahora cuando he conseguido formar este equipazo"

Mientras Laporta se veía las caras con los trabajadores del Barça, Víctor Font atendía los micrófonos de RAC1. El empresario, que recogió 4.710 firmas en precampaña, ya ha presentado todos los puntos fuertes de su programa, con Xavi Hernández y Jordi Cruyff como claves del área deportiva, el periodista Antoni Bassas como mano derecha y una serie de empresarios del sector start-up catalán para afrontar la búsqueda de nuevas vías de ingreso, entre otros anuncios. Los últimos días ha escenificado un compromiso ante notario para no convertir el club en sociedad anónima y tiene previsto seguir aportando detalles del "fuego nuevo" que quiere implantar en el club. Incluso no descarta que Xavi y Jordi den un paso adelante en público para decir que van en su candidatura. Ahora bien, lo que tiene claro es que quiere "confrontar proyectos". "Hará un mes que somos candidatos y todavía no hemos hecho ningún debate", dijo Font, que dejó entrever que no volvería al ruedo electoral en caso de derrota el 7 de marzo: "A priori no volveré. Es ahora cuando he conseguido formar este equipazo para servir al club en este momento tan importante de su historia".

Mientras tanto, Toni Freixa, convencido de su impacto entre los socios no independentistas y los nostálgicos de Núñez y Rosell, basa su estrategia en charlas telemáticas con posibles votantes, grupos de animación y el apoyo de caras de su candidatura como Lluís Carreras o Ramon Artigas. También protagoniza rifirrafes en las redes con ilustres simpatizantes de Laporta, como por ejemplo Xavier Sala-i-Martín, que insinuó que había comprado firmas para ser candidato, o Pilar Rahola, que lo critica por sentirse español. "Mientras esta gente siga provocando, vamos bien", tuiteó hace dos días en relación con estos comentarios. Así mismo, el ex portavoz del Barça fue acusado de manipular los resultados de una encuesta de Twitter del canal Esport3 en el que venció por goleada a los otros dos aspirantes.

Sea como sea, con Messi pendiente de decidir su futuro y el equipo en plena competición, la carrera electoral avanzará a ritmo de diésel hasta las urnas. Un proceso marcado por la pandemia y por la novedad del voto por correo, que este martes puede alcanzar los 20.000 solicitantes, una cifra que puede dar pistas sobre una participación que puede ser histórica. ¿Conseguirá Laporta "devolver la ilusión al barcelonismo"? ¿Encenderá Font su particular "fuego nuevo"? ¿Qué impacto real tendrá el outsider Freixa en número de votos? El día 7 de marzo, después de muchos días de larga espera, los socios y el entorno tendrán las respuestas.