El Barça, a un paso de cancelar el primer Gamper en el nuevo Camp Nou

BarcelonaEl Barça anunció hace unas tres semanas que "volvía a casa" el 10 de agosto para disputar el Trofeo Joan Gamper. Sin embargo, la realidad es que la reapertura del Camp Nou tendrá que esperar. Según ha avanzado el diario Sport y ha podido confirmar el ARA, el estadio todavía no estará operativo porque no tendrá los permisos necesarios. El retraso en las obras ha hecho que no puedan cumplirse los plazos y que no haya tiempo material de conseguir que el Ayuntamiento de Barcelona y los Bomberos lo autoricen. Así pues, el regreso deberá esperar.

La intención inicial del Barça era esperar hasta el viernes, fecha en la que debía recibir el visto bueno de las instituciones. A partir de ahí, hacer oficial la disputa del duelo –de momento sólo había anunciado el día 10 de agosto, pero no el rival ni la hora– y poner a la venta las entradas. En condiciones normales, este proceso se habría hecho antes, pero el Barça, consciente de toda la incertidumbre, decidía esperar hasta el último momento en busca de un milagro que finalmente no se ha producido.

La burocracia necesaria impide que se cumplan los plazos

"No creo que lleguemos, piden muchas cosas: documentos, ensayos requeridos…", se aseguraba desde Limak, la constructora encargada de la obra. Este mismo diario también se ha puesto en contacto con fuentes cercanas al Espai Barça, que iban en la misma dirección: manifestaban que las obras de las gradas primera y segunda podían estar listas a tiempo, pero que a partir de aquí había que hacer toda una serie de procesos burocráticos que lo ralentizaban: "La gente habla del Ayuntamiento como si fuera una decisión política, pero que hay una decisión política, pero nada de firmar el documento. Estamos hablando de un estadio de 60.000 personas. Es una gran responsabilidad y aquí nadie puede jugarla si no está convencido al 100%”.

Cuando el Barça proyectó el regreso al Camp Nou, lo hizo con un aforo de 62.000 personas, que son los asientos instalados en el estadio. El compromiso de Limak, que incluso tiene instalado un marcador electrónico en las oficinas donde se descuentan los días para entregar las llaves del estadio, era terminar las obras el 31 de julio. Fuentes cercanas a la constructora sostienen que se podía cumplir con los plazos en el interior, pero había más dudas en el exterior, donde se iba con más retraso. Así, el Barça pensó en un plan B, que era el de reabrir el estadio, pero con una capacidad de 30.000 espectadores, quienes caben en la tribuna y en uno de los goles. Lo demás habría sido sin ocupar. Pero finalmente esa opción tampoco es viable.

El Gamper tiene muchos números de jugarse finalmente en Johan Cruyff

A partir de ahí, el Barça tenía tres opciones. Una es cancelar el Gamper. La otra, cambiarlo de fecha. La posibilidad de aplazar al Gamper se ha descartado por la complejidad del calendario, porque no hay fechas disponibles. Por otra parte, resulta difícil suspenderlo porque los derechos audiovisuales ya están vendidos. localidades que tiene el estadio donde habitualmente juegan el primer equipo femenino y el filial

El siguiente paso, garantizar que se pueda volver al Camp Nou por la Liga, en septiembre

Una vez que se confirme oficialmente que el regreso deberá esperar, el siguiente reto es reabrir definitivamente el estadio el fin de semana del 14 de septiembre, que es cuando, según el calendario, hay que disputar el primer partido de Liga contra el Valencia. Además, la semana siguiente, del 16 al 18 de septiembre, se disputa la primera jornada de Champions, que también podría jugarse en Barcelona en función del sorteo. Por tanto, el club coloca todos los huevos en la cesta a terminar los accesos y obtener los permisos necesarios para mediados de septiembre. Sobre todo es perentorio llegar a tiempo para la máxima competición europea, que sólo permite inscribir un estadio para disputar toda la primera fase hasta principios del próximo año.