"Creemos que ni en el Barça saben cuándo podrán volver al Camp Nou"

BarcelonaNo es ningún secreto que las obras del Camp Nou van con retraso. Los imprevistos derivados de un proyecto de esta magnitud, sumados a los problemas que ha tenido el club con el Ayuntamiento por el horario de trabajo, han sido dos factores clave que han retrasado las labores de remodelación. Desde el Barça hace semanas que admiten que no podrán volver en noviembre y calculan que la nueva fecha será a finales de diciembre oa principios del 2025. Esto, de por sí, no sería un problema, si no fuera porque el regreso se producirá a media temporada y condiciona la disponibilidad del Estadio Olímpico Lluís Companys.

Desde Barcelona de Servicios Municipales (BSM), la empresa que gestiona los equipamientos del anillo olímpico, llevan semanas intentando saber más detalles del calendario de los trabajos en Aristides Maillol, pero sólo obtienen el silencio por respuesta. "Parece que ni ellos mismos lo tienen claro, hemos llegado a esa conclusión, porque si no, no se entiende", explica una de las fuentes consultadas. Lo único que sabían hasta la semana pasada era que el primer partido oficial de la nueva temporada sería el sábado 24 de agosto. Y no por boca del Barça, sino porque así consta en el calendario de la Liga. Pero antes había otro enfrentamiento previsto. "Nos dijeron que sí, que harían el Gamper como cada verano. Pero costó mucho que nos concretaran la fecha. Lo único que nos habían dicho era que sería como máximo el día 12, que es lo que finalmente fue" , afirma la misma fuente, que hace hincapié en los problemas que esto supone para BSM, ya que debe tener habilitado el estadio a todos los niveles, incluido el personal que trabaja los días de partido. "Y esto no se planifica de un día para otro".

Del fútbol a los conciertos y de los conciertos al fútbol

En Lluís Companys ya han terminado los conciertos programados para este verano y los operarios ya trabajan para volver a convertir el estadio en un campo de fútbol. Unas tareas que culminarán con el cambio de césped, totalmente estropeado. "Tratamos de protegerla con unas plataformas, pero vimos que habría costado un ojo de la cara y que se habría estropeado igualmente", explican los operarios de Montjuïc. Cuando se vuelva a jugar, el lunes 12 de agosto, todo volverá a ser igual que cuando acabó la temporada, a finales de mayo.

La gran incógnita, sin embargo, se mantiene abierta. Y BSM presiona porque necesita saber con antelación cuándo se irá el Barça. Por un lado, para contratar a las empresas que desmontarán la parte estrictamente futbolística; y por otra, para desbloquear el estadio y volver a programar conciertos. De momento solo ha firmado un contrato hasta noviembre del 2024. "Más allá, sólo está apalabrado, pero no escrito", sostienen desde el club y de BSM. Exactamente, el mismo escenario que existía en enero, cuando ya se sabía que las obras de remodelación del Camp Nou iban con retraso. Desde el Ayuntamiento admiten que no es una buena noticia, que el Barça alargue su estancia, pero garantizan que el club podrá jugar todo el tiempo que necesite. Pagando, claro.

El Barça habla de "finales de año" pero no puede concretar todavía la fecha del regreso

Elena Fort, vicepresidenta del Barça y máxima responsable del Espai Barça, comparece este miércoles acompañada de Joan Sentelles, director de operaciones del club, para valorar cómo avanza la remodelación del Camp Nou. Antes, Fort concedía una entrevista a EFE en la que admitía que el regreso a casa no podrá ser en noviembre. Aseguraba que la remodelación está cumpliendo con los "plazos previstos", pero que no se llegará a tiempo para la "fecha icónica del 29 de noviembre", cuando el club cumplirá 125 años de vida. Sin concretar la fecha, la vicepresidenta se limitaba a decir que iba a ser "a finales de año". También hablaba de las penalizaciones que debería pagar Limak si había retrasos, pero consideraba que finalmente no deberían reclamarse.

Mientras en BSM lamentan que sepan más cosas a través de la prensa que del Barça, desde el entorno del Espai Barça se pone en duda la afirmación de Elena Fort. "Parece que quieran correr para quedar bien, para decir que han cumplido con lo que prometieron, cuando lo importante es volver en condiciones", lamenta una de las fuentes consultadas, vinculadas a la remodelación. Limak, a través de los equipos de ingeniería que trabajan en el Camp Nou, había solicitado al Barça tener toda la temporada 24/25 de margen, y no solo unos meses, pero la junta se negó en redondo, en parte porque jugar en Montjuïc supone dejar escapar muchos ingresos.

"El Barça es un club privado y puede hacer y deshacer como quiera. Nosotros, no. Y algunas contrataciones, como la que servirá para desmontar el estadio, pueden alargarse hasta seis meses. Si les pedimos la fecha que se marcharán, no es para hacer el mirón, es porque necesitamos organizarnos", se quejan desde BSM, donde incluso están preparados por si, al final, el Barça quisiera disputar toda la temporada entera.