La diferencia entre Eric Garcia y De Jong más allá de lo que cobran: los apuntes en caliente del Barça-Osasuna
Trabajada victoria azulgrana contra un rival muy defensivo en el Camp Nou
BarcelonaEl Barça derrotó a Osasuna en un partido muy trabajado (2-0). Raphinha, en dos ocasiones, quebró la resistencia navarra en la segunda parte. A continuación, unos apuntes en caliente.
No se puede ser mejor futbolista. El Barça tuvo que masticar y mascar para echar al suelo el muro de Osasuna. Estos partidos sin espacios, tan habituales en tiempos de Guardiola en el banquillo, ponen nerviosos a los atacantes a medida que pasan los minutos, los desmarques no fructifican, los dribblings no salen y la pelotita no entra. Lamine Yamal lo intentó de todos los modos, pero da la sensación de que los oponentes comienzan a saberse sus trucos. Por suerte, el líder de la Liga tiene otros genios con la paciencia que reclaman escenarios tan embadurnados. Por suerte, Pedri hará carrera en el Camp Nou y siempre será la mejor arma para escapar de cualquier trampa.
Las buenas costumbres. Flick se acuesta temprano, sin importarle si el Madrid juega a las 21 puede perder algún punto. También es amante de no tocar nada cuando las cosas funcionan. En este sentido, ha consolidado el invento de Gerard Martín en el eje de la defensa –ya van seis titularidades seguidas en esta posición desde el paro de noviembre– y también el de Eric Garcia en medio del campo. Detengámonos un segundo en la lectura de juego del de Martorell como pívot. Nunca será tan exuberante como De Jong, pero siempre superará al neerlandés en el arte de parar la bola y pasarla sin tener que dar tres o cuatro toques entre una cosa y otra. Tan fácil y al mismo tiempo tan difícil. Y mucho más barato.
Si pudieran votar a Laporta... Hay dos jugadores muy vinculados a la continuidad del actual presidente culé en el cargo. Hablamos de Lewandowski y Rashford. El polaco, suplente por segunda jornada consecutiva en la Liga, termina contrato este verano y estaría encantado de alargar su experiencia en Catalunya aunque fuera a la baja. Por su parte, el inglés está cedido y ficharlo en propiedad cuesta entre 30 y 35 millones, aparte de un sueldo de primer orden. Ambos van aportando números al colectivo, pero ninguno es indiscutible. Por eso renovarles la confianza será como mínimo discutible. Ahora bien, el debate será más ligero si su veterano agente, Pini Zahavi, íntimo de Laporta, puede seguir haciendo negocios en el Barça.
Era del Barça y acabó en el Madrid. La única opción de Osasuna para inquietar al rival fue un joven delantero barcelonés que pasó unos añitos en La Masia. De hecho, coincidió con Balde o Casadó, hoy consolidados en el Camp Nou, en un viaje a África Occidental que cambió la vida de muchos cachorros de la cantera azulgrana. Pero la historia de Víctor Muñoz, una bala pelirroja con nombre y apellido de ilustre culé de los 80, tiene incluso más gracia. Porque tras ser descartado en el 2017 por el Barça, acabó en el Madrid, donde hace unos meses tuvo en sus botas el empate en un clásico en Montjuïc. Ahora, convertido en el jugador más rápido de la Liga, se gana las algarrobas en Pamplona. Las cosas del fútbol.