El homenaje de Xavi a Guardiola para despejar una carencia no resuelta

BarcelonaMientras su Barça caminaba con paso firme para ganar la Liga 2022-2023, Xavi Hernández Creus trataba de adelantarse a futuras vicisitudes. El egarense cuenta ahora las semanas para dedicar más tiempo a la familia y disfrutar del fútbol de otra manera, pero hace un año se sentía sólido como entrenador azulgrana, luchaba por ganarse una renovación que acabaría firmando en septiembre y planificaba la plantilla con una prioridad número uno: el pívot defensivo. Sospechaba que Sergio Busquets, dueño y señor de esta posición desde el 2010, querría poner punto y final a su etapa azulgrana, por lo que puso a disposición del club un catálogo de posibles relevos de un perfil similar al del vallesano, en el que incluso intentó convencer para que hiciera un año más en Europa antes de bajar revoluciones.

Xavi tenía claro que Martín Zubimendi, mediocentro titular indiscutible de la Real Sociedad, encajaba con la necesidad del Barça, pero entre que el futbolista no estaba seguro de dar el salto y que Joan Laporta le consideraba demasiado caro (60 millones de cláusula de rescisión), el entrenador sugirió primero la alternativa imposible de Joshua Kimmich y otras opciones menos glamurosas como Guido Rodríguez. Finalmente el club, maniatado y pies con el fair play financiero, tuvo que golpear más bajo y compensó la salida de Busquets con Oriol Romeu, fichado por 3,4 millones de euros en el Girona. El de Ulldecona empezó bien la temporada, pero su rendimiento empezó a descender a partir de finales de septiembre y no se ha recuperado. De resultas de esta tendencia, Xavi ha tenido que improvisar con otros jugadores menos dotados para cumplir las tan añoradas funciones del excapitán.

Sin Romeu al nivel que se esperaba ni ninguna alternativa suficientemente desarrollada en la cantera, el entrenador ha combinado a Ilkay Gündoğan, Frenkie de Jong y Pedri en la base —no sin interferencias provocadas por las lesiones— para intentar que el equipo tuviera una salida ordenada desde atrás, organizara una buena presión en campo contrario y no se rompiera con las transiciones, pero la realidad ha ofrecido demasiados goles en contra y dos títulos menos por los que luchar. Es en este contexto donde se enmarca que Andreas Christensen, un central con muy buen trato de pelota, se estrenara el sábado como pívot desde que juega en el Barça. El danés, que en las últimas semanas ha sufrido problemas físicos y este año está ofreciendo un rendimiento por lo general menos sólido que el que exhibió el pasado curso, completó una actuación muy notable por delante de la línea defensiva y se erige en un recurso que Xavi valoraba desde hacía tiempo. "Nos va a dar disciplina y tiene capacidad técnica para jugar por dentro", dijo el entrenador, que repetirá el experimento en próximos partidos.

Desde Koeman y Navidad hasta Márquez y Edmílson

La solución que plantea Christensen para la carencia del pívot defensivo es una visita al pasado reciente del Barça. Por ejemplo, el célebre Dream Team de Johan Cruyff salía de vez en cuando con un defensa natural como Ronald Koeman en la posición de pívot defensivo. Y, a la inversa, el entrenador neerlandés también fue de los primeros en reconvertir a un centrocampista como Miquel Ángel Nadal en marcador central. Más adelante en la historia culé, Frank Rijkaard (2003-2008) casi siempre optó por un defensa con buen trato de balón para ocupar la base del centro del campo. Los escogidos para hacer la función de stopper fueron Rafa Márquez, hoy entrenador del Barça Atlètic, y José Edmílson, titular en la final de la Champions que el Barça levantó en París en el 2006. La reunión de los tres pequeños (Xavi, Iniesta y Deco) no era precisamente la opción favorita de Rijkaard para la medular.

Cuando era entrenador del Barça, Pep Guardiola tuvo la suerte de encontrarse primero con Touré Yayá y después con Busquets, dos jugadores específicos, para cubrir el pívot defensivo. Sin embargo, en su etapa en el Manchester City sí ha probado con éxito la solución de adelantar a un central. Sin ir más lejos, el curso pasado les citizens levantaron nada menos que un triplete con John Stones, que es marcador, ocupando un puesto en medio del campo. Puede considerarse, por tanto, que Xavi también ha hecho un homenaje a Guardiola con un matiz táctico que quizás ha llegado para quedarse.