Barça

Luz verde del CSD para las inscripciones de Olmo y Pau Víctor

El organismo da la razón al club azulgrana y permite que los dos futbolistas estén inscritos en la competición, al menos de forma temporal

BarcelonaEl Barça daba por sentado que Dani Olmo y Pau Víctor recibirían la cautelar y este miércoles, una hora antes de jugar la semifinal de la Supercopa en Yida contra el Athletic Club, el club ha obtenido la confirmación oficial por parte del Consejo Superior de Deportes (CSD). El organismo acepta el recurso presentado por el conjunto azulgrana y autoriza que los dos jugadores, que se habían quedado sin ficha el pasado 1 de enero, vuelvan a estar inscritos en la competición provisionalmente. Eso sí: no podrán jugar la semifinal, puesto que su licencia no estará dada de alta hasta mañana, jueves 9, explican fuentes azulgranas. Ahora le tocará hablarle al presidente Joan Laporta, que se había comprometido a dar explicaciones una vez conocida la resolución. Probablemente hablará este jueves desde Arabia Saudita.

El club confiaba en que recibiría una respuesta antes de empezar la competición que se disputa en el país saudí. Y así ha sido, pese a que la ministra de Deportes había dado alargos este mismo miércoles por la mañana. En declaraciones a RNE, Pilar Alegría desmentía que el CSD ya hubiera tomado una decisión y que fuese favorable a los intereses azulgranas. De hecho, decía que debían estudiarse alegaciones de las diferentes partes. Pero las informaciones que habían aparecido publicadas en algunos medios iban encaminadas. Por último la resolución ha llegado y ha sido positiva para los intereses del club. Joan Laporta, que se la jugaba en ese conflicto, puede respirar tranquilo. Al menos por el momento. Según fuentes gubernamentales, esta medida puede alargarse hasta seis meses, lo que garantizaría que los jugadores pudieran disputar todo lo que queda de temporada con el Barça. El 8 de julio, cuando expirara el plazo, los futbolistas podrían estar inscritos de forma normal, porque entonces ya habrá comenzado la temporada 2025/26.

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La cautelar ha llegado poco antes de las siete de la tarde y Laporta la ha celebrado al más puro estilo Laporta: un grito que le ha salido del alma y una butifarra lanzada en el aire. En la argumentación, el CSD destaca que si no da la cautelar –mientras se estudia de fondo el recurso– el Barça podría sufrir un perjuicio deportivo muy importante, puesto que los futbolistas se quedarían sin disputar el primer título de la temporada. También observa que esto podría ir en perjuicio de la selección española, porque sin licencia Dani Olmo no podría ir convocado con la roja.

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El texto del CSD ha sido el último suceso en materia institucional de un miércoles larguísimo en clave azulgrana. Por primera vez hablaba un portavoz del club –en este caso la vicepresidenta Institucional, Elena Fort, entrevistada en Rac1– hablaba sobre el caso. El mismo día Jordi Farré, dos veces precandidato a la presidencia, daba explicaciones sobre la moción de censura que debía presentar esta semana pero que finalmente pospuso a la espera de que se añadan otros grupos opositores. Y todo ello, en medio de la denuncia de una veintena de socios, que se han dirigido a las oficinas del club para hacer una denuncia en la comisión de Disciplina del Barça solicitando la inhabilitación de Joan Laporta por la gestión del caso Olmo -Víctor.

El relato de la crisis

Conocida la resolución favorable, el Barça quizás lo tenga un poco más fácil para imponer su relato. A la espera de oír al presidente, es justo lo que intentaba hacer Elena Fort en la entrevista, en la que defendía la gestión de la directiva, negaba improvisación en la búsqueda de ingresos para conseguir fair play financiero y señalaba los estamentos federativos –la Federación Española y la Liga– como principales responsables de la situación en la que se encuentra actualmente el Barça. Una entrevista realizada sólo tres horas antes de que Jordi Farré, acompañado del socio Marc Cornet (Seguimiento FCB), hubiera enviado reproches hacia Laporta, a quien acusaba de "corrupción" conjuntamente con el resto de los miembros de la junta. La moción de censura no tiene fecha pero asegura que "es cuestión de días". "Da igual quien lo haga, nosotros apoyaremos. El enemigo es fuerte, pero la situación es insostenible y el daño reputacional, irreparable", añadía Cornet.

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"La moción de censura es inminente y mi objetivo es sacar a esta junta directiva de Laporta del Barça", decía Farré antes de saber qué diría el CSD. La duda es saber si la resolución frenará por completo esta moción o se mantendrá. Sea como fuere, él lo tiene claro: "Todos los miembros de la junta deben dimitir. Unos por corrupción y otros para permitirla", añadía, a la vez que criticaba a Font de hacer "tacticismo electoral". "Conozco al personaje y quiere ser el rey de la oposición, pero después le falta valentía y se esconde detrás de los grupos". Farré cargaba contra todo el mundo, y basaba su crítica en Laporta, más allá de la gestión de las inscripciones, en la venta de los asientos vip del futuro Camp Nou en el fondo de inversión de Dubai y en el contrato con Nike. Y, sobre este último, la comisión de Darren Dein. “Se ha llevado casi 60 millones. 25 años cobrando del club?"

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Las palabras de Elena Fort

Algunas de las respuestas que exigía Jordi Farré las daba Elena Fort. La vicepresidenta cree no se puede acusar a la directiva de improvisación: "No se ha ido al límite, eso no es cierto. Se nos ha hecho un juicio sumarísimo sin tener información de lo que ha pasado". Según su versión, la propuesta de la venta de los asientos vip llegó a mediados de noviembre. Y entonces estaban seguros de que el acuerdo con Nike permitiría ya llegar a la norma 1:1. "Eso nos dijeron [refiriéndose a la Liga], pero ha habido cambios y hemos tenido que acelerar una operación paralela. La negligencia no fue culpa del Barça".

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La vicepresidenta y portavoz daba algunos detalles de los asientos vip vendidos, aunque no podía precisar a quienes se habían vendido. Decía que son 470 localidades, un 5% del total dehospitality de que dispondrá el Camp Nou una vez terminado. Y que les han vendido al precio de mercado que constaba en el fondo de titularización firmado con Goldman Sachs en su día. Es decir que, a su juicio, dan "estabilidad" porque garantizan unos ingresos que hasta ahora sólo tenían presupuestados. También admitía las "contradicciones" para hacer pactos con Dubai ahora, cuando en el 2010 criticaba las relaciones del Barça, entonces presidido por Sandro Rosell, con gobiernos de Oriente Medio. Por último, relativizaba la comisión con Darren Dein por el contrato con Nike y aseguraba que la operación había recibido el visto bueno del compliance del Barça, Sergi Atienza.