La gran manzana podrida del deporte
Deportistas como Ryan Bowman (fútbol) o Jontay Porter (NBA), pillados para hacer apuestas de sus propios partidos
Los apuestas ilegales se han convertido en la gran manzana podrida del deporte. Ryan Bowman, un futbolista inglés de 33 años que recibió una suspensión de 42 meses por hacer 6.397 apuestas deportivas. 2021, cuando jugaba en el Exeter, y 3.100 apuestas entre agosto del 2021 y julio del 2023, cuando jugaba en el Shrewsbury. goleador. Además, hizo cientos de apuestas en competiciones en las que participaban sus clubes.
Las apuestas ilegales no solo salpican al fútbol. En el baloncesto, el último escándalo lo protagonizó Jontay Porter. El ex jugador de los Toronto Raptors se declaró culpable por irregularidades en su juego vinculadas a una trama de apuestas y la NBA le suspendió de por vida. Su actuación en dos partidos, disputados el 26 de enero y el 20 de marzo, hizo saltar las alarmas. Durante el primer encuentro jugado contra Los Angeles Clippers, la predicción con la que se ganaron más dinero en la NBA fue la que hacía referencia a sus triples. A diferencia de lo habitual, no lanzó ninguna. La situación se repitió contra los Sacramento Kings, cuando tan sólo intentó un disparo antes de pedir el cambio por un supuesto problema de visión en un ojo.
Algunas casas de apuestas registraron una ganancia extraordinaria en estos dos partidos para apostar que Porter no llegaría a sus registros habituales, una estrategia conocida comounder. ESPN asegura que hubo "múltiples" intentos de apostar más de 10.000 y 20.000 dólares en el partido contra los Clippers, cuando las restricciones para estas apuestas de rendimiento individual suelen estar entre los 1.000 y los 2.000 dólares. El ex jugador de los Raptors tenía un salario de tan sólo 380.000 euros.
Aunque la preocupación es evidente y las restricciones crecen, las ligas más importantes de Estados Unidos hace tiempo que acentúan su relación con el mercado de las apuestas deportivas, un negocio multimillonario al que es difícil renunciar. La NBA League Pass, la plataforma destreaming de la NBA, incluye opciones para apostar en directo mientras se miran a los partidos. El último convenio colectivo de la NBA permite a los jugadores invertir en compañías de apuestas y promocionar a empresas del sector.