El Espanyol se contagia al sufrimiento para jugar la final del 'play-off'

BarcelonaEl Espanyol sufre, pero jugará la final de los play-off frente al Oviedo. El conjunto blanquiazul resistió duro en la vuelta de la semifinal ante el Sporting (0-0), en el que hizo bueno el gol marcado en el Molinón. No fue una noche dulce hasta el pitido final, cuando se desvanecieron todos los temores de que un gol de los asturianos forzara una prórroga indeseada. Los blanquiazules alargan una imbatibilidad que ya se extiende a 18 partidos en el momento más importante de la temporada. Quedan dos finales, ahora sí, para certificar el ansiado regreso a Primera.

El Espanyol podría haberse ahorrado buena parte del sufrimiento si Puado hubiera marcado la clarísima ocasión que tuvo 22 segundos después del inicio del partido. Incomprensiblemente, envió a las nubes un pase de la muerte de Jofre. Las ganas de marcar un gol que diera la tranquilidad y la incapacidad para frenar un partido acelerado propiciaron que el Sporting se quedara pocos centímetros de enviar el partido a una prórroga indeseada por la parroquia españolista.

Manolo González, que repitió la alineación y el planteamiento del partido de ida, se hartó de pedir calma a sus hombres. El técnico espanyolista intentó sin éxito que el partido se descontrolara demasiado pronto. La precipitación con la que afrontó buena parte de sus ataques estuvo a punto de costarle cara a un Espanyol sin calma. El Sporting que fue creciendo a lo largo del partido. Otero y Manolo González tuvieron a tocar el 0-1 en dos remates que salieron cruzados por poco.

Hassan volvió a convertirse en la principal amenaza de los asturianos, pero el Espanyol le contuvo de nuevo con ayudas constantes. Si Joan Garcia se hizo fuerte por arriba en el primer tiempo y bajo palos en el segundo, Calero y Cabrera se mostraron impermeables por abajo. Cuando no funciona el ataque, es necesaria una defensa capaz de sacar agua de la cueva y defender con el cuchillo entre los dientes. Sacrificio defensivo no le faltó al Espanyol, y gracias, porque la segunda parte se convirtió en un auténtico quebradero de cabeza.

Los blanquiazules se mostraron incapaces de resolver el partido, ya que todas sus llegadas se fueron desviadas o acababan mansas en los guantes de Yáñez. La más clara después de la reanudación, un palo de Braithwaite. Inoperante en ataque, el equipo perico cedió la iniciativa al Sporting, que en el tramo final amenazó con insistencia al área de Joan Garcia. El Espanyol acabó necesitando una dosis de heroicidad para acabar defendiendo el empate después de que Omar viera la roja en el minuto 90, justo cuando el Sporting más apretaba.

Con diez y sufriendo muchos nervios, el Espanyol supo sobrevivir gracias, en buena parte, al empuje de un Stage Front Stadium que aguantó al equipo cuando más lo necesitaba, después de firmar la mejor entrada ( 30.605 espectadores) de los últimos cuatro años, desde el derbi contra el Barça en Liga de enero de 2020, cuando se superaron los 33.000 asistentes. La afición ha cambiado el chip. Ahora hay que rematar el trabajo ante el Oviedo.

La otra victoria del Espanyol en los despachos

Aparte de la eliminación al play-off, el Espanyol también ha conseguido una victoria ante el Sporting, esta vez en los despachos. El club asturiano tendrá que pagar 2 millones de euros a la entidad blanquiazul por no respetar el derecho de tanteo sobre Pedro Díaz, después de que un arbitraje de la Liga haya dado la razón al Espanyol. Es menos de la mitad de los 5 millones contemplados inicialmente entre ambos clubs en caso de incumplimiento del acuerdo firmado en paralelo a la salida de Víctor Campuzano en el conjunto asturiano. El club espanyolista podría habérselo llevado si igualaba la propuesta, pero el Sporting no informó de la oferta del Girondins de Burdeos, que compró el 51% de sus derechos económicos por cerca de 2,2 millones de euros. euros. El Sporting, que estudiará acudir a la justicia ordinaria, deberá hacer efectivo el pago en las próximas semanas.