Retener al ídolo o hacer caja gracias a él: RDT hace revivir un dilema histórico al Espanyol
Chen Yansheng aceptaría negociar una cifra por debajo de la cláusula de rescisión, que es de 75 millones de euros
BarcelonaLa afición del Espanyol teme revivir este verano, con Raúl de Tomás, una pesadilla que le recuerda a las épocas de precariedad económica del club, cuando verano tras verano la entidad acababa vendiendo a sus mejores talentos. Durante muchos años, los ídolos blanco-y-azules han sido un lujo efímero que no se pudo disfrutar suficiente. La lista de goleadores que han acabado triunfante en otros clubes después de breves etapas en el Espanyol no es precisamente corta.
Desde 2016, Chen Yansheng ha intentado evitar que el Espanyol tuviera que malvender su talento. El empresario chino ha ido vaciando progresivamente la pesada mochila en forma de deuda que durante muchos años asfixió a un club que convirtió la austeridad en rutina. La entidad blanco-y-azul no ha dejado de vender, pero cada vez lo hace mejor, o cuando menos por un precio más de acuerdo con el mercado.
En 2005, el Atlético de Madrid se llevó a Maxi Rodríguez por 5 millones de euros después de que el delantero hubiera firmado 15 goles. En 2011, el Roma se llevó a Dani Osvaldo a cambio de 16 millones (13 goles había marcado el argentino durante la temporada 2010-11). En 2015, el Middlesbrough fichó a Cristhian Stuani por solo 3 millones (15 goles en 2014-15). En 2018, el Villareal repescó a Gerard Moreno por 20 millones (19 goles en 2017-18). El último precedente, Borja Iglesias: en 2020, el Betis pagó su cláusula de rescisión, de 28 millones, después de que el Panda marcara 20 goles como españolista.
La situación financiera actual del Espanyol difiere fuerza de la que tenía el club hace unos años, pero este verano RDT hará revivir un dilema histórico al club blanco-y-azul: ¿es posible retener al último ídolo de la afición o conviene hacer caja gracias a él? El madrileño, convertido en el jugador franquicia del club desde 2020, será el más goloso de la plantilla españolista en el próximo mercado de fichajes. La agencia que lo lleva, Stellar Group, está atenta al mercado a pesar de que es consciente de que tendrá que presentar una oferta con cara y ojos para conseguir que el Espanyol se siente a negociar. El último club que se interesó por el madrileño fue el Arsenal, este enero, pero no llegó a hacer ninguna oferta formal porque el entonces CEO españolista, José María Durán, se remitió a la cláusula, de casi 75 millones.
El escenario, sin embargo, podría cambiar este verano. El club tiene blindado al jugador, que tiene contrato hasta 2026, pero en los despachos nobles aceptarían negociar por una cantidad menor. "Chen ve el fútbol como un negocio de compraventa de jugadores. Si a final de temporada venden RDT, él estará contento, porque las acciones de Rastar Group subirán una vez se notifique la operación en la bolsa china”, explica al ARA una persona que ha tratado con el empresario chino dentro del Espanyol en los últimos años. Hay que tener presente que el Benfica se quedará un 20% de una posible plusvalía respecto de los 22,5 millones que pagó el Espanyol.
El vestuario quiere que RDT siga
Mientras que Chen podría aceptar negociar por un valor inferior al de la cláusula de rescisión de Raúl de Tomás, en la grada hay ciertas dudas sobre sí es conveniente o no venderlo. No se duda de su rendimiento (23 goles el curso pasado y 15 el actual), que lo ha llevado a ser una de las figuras más queridas por la afición, sino de cómo condiciona la forma de jugar del equipo. Donde no hay dudas, en cambio, es dentro del vestuario. RDT es una pieza indiscutible tanto para sus compañeros como para el cuerpo técnico. De puertas adentro se valora muy positivamente la ascendencia, el liderazgo que el madrileño tiene tanto dentro como fuera del campo, así como su aportación en el juego colectivo.
Aunque su carácter le ha generado más de un conflicto con rivales, compañeros e incluso con Vicente Moreno -el último ejemplo, en el Santiago Bernabéu, cuando el técnico le recriminó un gesto que no le gustó cogiéndolo por el cuello de la camiseta-, en el vestuario nadie discute que, si el Espanyol consiguió volver a Primera en el primer intento y este año tiene prácticamente sellada la permanencia, es gracias a sus goles.
RDT, por su parte, siempre ha afirmado públicamente que está cómodo y es feliz tanto en Barcelona, ciudad donde ha encajado a la perfección, como en el Espanyol, donde desde el primer día ha recuperado el protagonismo que perdió en el Benfica. “Estoy contento aquí. El próximo año pueden pasar mil cosas, pero tengo contrato y tendré que estar aquí”, dijo la semana pasada. El madrileño, que dejó claro que quiere "jugar con los mejores soldados", no es el único que pide un proyecto ambicioso: Darder y Pedrosa, que ahora mismo negocian la renovación, también piden conocer el proyecto deportivo antes de dar el visto bueno al alargamiento de su contrato. El Espanyol necesita definir su futuro.
