El cava pierde un 13% de las ventas en el 2024, antes de los aranceles de Trump

BarcelonaLas bodegas de la denominación de origen (DO) Cava redujeron sus ventas un 13,4% en 2024, hasta los 218 millones de botellas, mientras esperan con preocupación el impacto que puedan tener los futuros aranceles del 200% en el vino europeo anunciados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Así, el conjunto de la DO Cava vendió el pasado año casi 20 millones de botellas menos que en el 2023, aunque la caída en facturación es inferior, del 4,2%, hasta los 2.270 millones de euros. El presidente del consejo regulador de la DO, Javier Pagés, ha destacado este martes en la presentación anual de los resultados la revalorización del cava, con menos producto vendido pero a mayor precio. En este sentido, Pagés ha resaltado la venta de 22,4 millones de botellas de cavas de guarda superior, los de mayor calidad.

Por mercados, España sigue siendo el más destacado, con 78 millones de botellas vendidas, un 13,4% del total y un 3,5% menos que en el ejercicio anterior, aunque en valor subió un 3,7%. De estas ventas, el mercado catalán representa aproximadamente un tercio del español, aunque por población Cataluña es el 16% de la población del Estado y una quinta parte de la economía española.

A nivel internacional, las ventas por botellas cayeron un 7,8% respecto a un año atrás, hasta los 140 millones. Bélgica representó al mercado más destacado, con 20,3 millones de botellas vendidas, seguido por Estados Unidos, con 17,8 millones. Reino Unido, Suecia y Alemania son los otros mercados más destacados.

Justamente el descenso de las ventas se debe a dos factores, tal y como ya había avanzado la DO el pasado diciembre. Uno es la sequía que se arrastra desde hace tres años, que ha reducido drásticamente la producción, sobre todo en la zona del Penedès, donde se concentra la mayor parte de los viñedos que producen uvas para el cava. En este sentido, Pagés ha dicho que buena parte de la disminución de las ventas "tiene que ver con las existencias en las bodegas", que han caído después de años de vendimias reducidas.

El otro es la caída de las ventas del mercado alemán, que se explican principalmente por el cambio de modelo de negocio de Freixenet (el mayor productor de cava) en el país, donde ha dejado de vender cava y exporta un vino espumoso alternativo. "Alemania es un país que tiene mucho peso en el cava", indicó Pagés.

Temor por los aranceles en EE.UU.

Las bodegas están a la espera de la confirmación de los aranceles anunciados por Donald Trump. "¿Tendrán efecto? Evidentemente", ha dicho Pagés. Sin embargo, el presidente de la DO ha asegurado que el sector todavía no tiene unos cálculos exactos de cómo les impactarán porque la administración estadounidense no ha anunciado nada más allá de unas declaraciones del presidente.

Trump amenaza a la UE con aranceles del 200% en el vino, el champán y otras bebidas alcohólicas

Pagés lamentó que el cava, que calificó de "producto de ocio", entre en la guerra comercial iniciada por la Casa Blanca. "El cava no debería tener ningún tipo de arancel. Somos exportadores por naturaleza y queremos libre comercio", añadió.