Cierra Imaginarium, las emblemáticas jugueterías de dos puertas
La cadena, nacida en Zaragoza en 1992, llevaba años reduciendo personal y establecimientos
BarcelonaLa emblemática cadena de jugueterías Imaginarium, conocida en todas partes por su fachada con dos puertas, una grande y otra pequeña, cierra para siempre. Lo ha anunciado la misma empresa a través de las redes sociales, después de que en 2021 ya hicieran un ERE de 119 trabajadores del total de 144 (el 86% de la plantilla) y cerraran todas sus tiendas a excepción de las dos que tenían en Zaragoza y en Málaga.
Ahora, sin embargo, Imaginarium baja persianas del todo. "Hemos aguantado hasta el último momento, hasta el último suspiro para pulsar el botón y decir adiós", dice la empresa en las redes, que añade: "Con el corazón lleno de emociones nos entristece deciros que Imaginarium llega a su fin".
La empresa de juguetes ha mostrado su "más sincero agradecimiento" a los clientes por su "lealtad, fidelidad y apoyo a lo largo de los años". "Ha sido un honor y un privilegio ser parte de su vida y de la vida de sus hijos, proporcionando momentos de alegría y diversión a través de nuestros juguetes", ha señalado a través de Facebook e Instagram.
Auge y caída
Imaginarium nació en 1992 en Zaragoza, hace 32 años, donde abrió la primera tienda. Esta tienda es, de hecho, una de las pocas que había sobrevivido al cierre masivo de 2021. Su fundador fue el emprendedor Félix Tena, y por su equipo pasaron personas reconocidas en Zaragoza, como la actual alcaldesa de la ciudad, Natalia Chueca, como directora de marketing.
Pocos años más tarde, la cadena comenzó una expansión que le llevó a tener más de 40 tiendas en toda España, de las cuales cuatro en Catalunya. Llegó a cotizar en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) hasta que fue excluida el 2 de febrero de 2022, y en los tiempos álgidos llegó a contar a lo largo de su historia con cerca de 800 trabajadores y más de 420 tiendas repartidas por 20 países.
Pero lo que parecía un sueño plácido en los inicios de los 2000, se convirtió en una pesadilla años más tarde. Los problemas empezaron en 2008 con la crisis financiera, y en 2017, estando al límite de la quiebra, logró llegar a un acuerdo con un grupo de inversores liderado por el mexicano Xavier López Ancona, fundador del grupo Kidzania, así como con Gevork Sarkisyan y Federico Carrillo, por obtener una inyección de 8,5 millones de euros de capital. Pese a esta segunda oportunidad, las cuentas de la empresa no mejoraron.
"La internacionalización fue el principio del fin", avisaban desde los sindicatos en el 2021, con el cierre masivo de las tiendas en España. Además, el estallido de la pandemia, seguido del aumento de precios por las tensiones geopolíticas acabaron de desestabilizar a la compañía. La deuda, que en el 2021 superaba los 14 millones de euros, solo hacía que engordar. Por último, este abril Imaginarium pone fin a sus 32 años de vida.