El gobierno español abre la puerta a limitar los contratos temporales a 3 meses

La negociación de la reforma laboral encara semanas decisivas. En la última reunión, este miércoles, el gobierno español ha recopilado todos los puntos de la futura normativa en un texto y los ha trasladado a los agentes sociales, sindicatos mayoritarios y patronales. Si bien en términos generales no hay grandes cambios, el ejecutivo central sí que ha matizado algunos elementos de sus últimas propuestas.

En cuanto a los contratos, el gobierno español abre la puerta a limitar los contratos temporales, en concreto los ocasionales y previsibles por "circunstancias de producción o por sustitución de la persona trabajadora", a un máximo de tres meses, explican fuentes de la negociación. Estos, sin embargo, irían de la mano con unos topes máximos, es decir, de un uso máximo de esta forma contractual, en función de la medida de la empresa. "Estarían permitidos en aquellas situaciones previsibles muy justificadas y de muy escasa duración", ejemplifica una fuente de la negociación al ARA. Por ejemplo, se acogerían a él los trabajadores de la época de rebajas. Esta modalidad contractual, sin embargo, todavía estaría más ajustada en el caso de sectores como la agricultura, matizan las mismas fuentes.

También en términos contractuales, el ejecutivo central ha puesto encima de la mesa que los contratos formativos que combinan formación y retribución, denominados de alternancia, puedan tener una duración de entre tres meses y dos años, mientras que los contratos formativos para adquirir práctica profesional durarían entre seis meses y un año. Además, se ha propuesto unificar el periodo de prueba a un mes. Aun así, agentes sociales y gobierno español todavía tienen que discutir la edad permitida para estos contratos y la posibilidad de subscribir contratos formativos a tiempo parcial.

En cuanto a la última propuesta planteada sobre los ERTE permanentes, sindicatos y patronales habrían conseguido que se revisara, de forma que el ejecutivo presentará una nueva propuesta en la próxima reunión, que será este viernes. Los dos agentes sociales mostraron la semana pasada su rechazo al planteamiento del gobierno español. Del último texto también ha caído la opción de limitar en un 15 % la temporalidad, medida que no gustaba nada a la patronal. Desde el ministerio de Trabajo reclaman vincular la limitación de la temporalidad a elementos causales y adaptarla a la medida de la empresa.

Con todo, fuentes de la negociación explican que no se han modificado las redacciones del último texto negociado en verano sobre la prevalencia del convenio del sector sobre el empresarial, ni tampoco la de recuperar la ultraactividad, limitada a un año. Agentes sociales y gobierno español se reunirán de nuevo este viernes con el objetivo de acelerar la negociación para cerrar todos los flequillos pendientes. Todas las partes implicadas han transmitido este miércoles la intención de buscar, con la reforma laboral, un acuerdo tripartito. Incluso la patronal, a pesar de su "no" a aumentar las cotizaciones para sufragar las pensiones. "No vamos con líneas rojas", ha enfatizado el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi.