Biden declara la guerra a la reduflación

BarcelonaEl domingo de la Superbowl, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, publicó un vídeo en sus redes sociales en el que cargaba contra las empresas que reducen el tamaño de las porciones de los alimentos sin bajar su precio. Esta práctica se llama reduflación y, según explica un artículo del New York Times, se ha convertido en el nuevo enemigo económico del dirigente demócrata. "Ya he tenido suficiente, de eso que llaman reduflación", decía Biden en el vídeo, donde mostraba productos como las galletas Oreo o los aperitivos Wheat Thins.

Aunque la inflación también se ha empezado a moderar en Estados Unidos, los consumidores siguen notando los elevados precios de los alimentos, y el presidente estadounidense ha encontrado un nuevo mensaje para señalar a otros culpables en plena campaña para la reelección, como recuerda el artículo del rotativo, Biden ha acusado a las empresas de "estafar" a los estadounidenses con esta táctica y, de hecho, ya está estudiando implementar medidas ejecutivas para frenarla.

Según funcionarios gubernamentales citados por el diario, el senador demócrata de Pensilvania Bob Casey fue quien convenció al presidente de la importancia de este tema. El año pasado la oficina de Casey publicó un informe contundente sobre la reduflación, en el que calculaba que una décima parte de los recientes incrementos de los precios en los aperitivos y el papel higiénico se explicaban porque las empresas ponen menos galletas en cada bolsa o menos cantidad de papel en cada rollo.

Argumento económico

A principios del mandato de Biden algunos senadores y centros de investigación progresistas presionaron al ejecutivo demócrata para que culpara a las corporaciones, por su ambición desmedida, del mayor alza de precios en cuatro décadas. El artículo del New York Times recuerda que entonces el presidente sólo aceptó ese argumento a medias, ya que sus acusaciones se centraron principalmente en las compañías que empaquetan la carne y las petroleras.

Pero desde entonces las encuestas han mostrado que los estadounidenses están enfadados con las empresas por el incremento de precios y el discurso de Biden ha dado un giro. La información del diario también cita a economistas del gobierno estadounidense, sorprendidos por los elevados márgenes de ganancias de las compañías incluso en un contexto de inflación moderada.