EEUU se aleja del BCE y mantiene sin cambios los tipos de interés
Los niveles todavía elevados de inflación obligan a la Reserva Federal a dejar inalterado el precio del dinero
BarcelonaLa Reserva Federal (Fed, el banco central de Estados Unidos) ha mantenido inalterados los tipos de interés. De esta forma, la institución monetaria estadounidense se aleja del cambio de política introducido la semana pasada por el Banco Central Europeo (BCE), que aprobó la primera rebaja del precio del dinero en la zona euro desde 2016.
Por tanto, la Fed mantiene en la franja del 5,25% y del 5,5% los tipos básicos. La decisión es la esperada en los mercados y por los ciudadanos estadounidenses, ya que la tasa anual de inflación en EEUU lleva hace meses por encima del 3%, lejos del 2% que se marca el organismo como objetivo en largo plazo. Sin embargo, este mismo jueves el departamento del Trabajo del gobierno federal ha anunciado que los precios de bienes y servicios de consumo se mantuvieron planes en mayo, aunque en comparación con el mismo mes de 2023 habían crecido un 3,3%. "La inflación ha aflojado, pero todavía es demasiado alta", ha dicho en rueda de prensa el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, para justificar la decisión.
Los tipos de interés básicos son lo que los bancos centrales cobran a los bancos comerciales por prestarles dinero. Cuando la inflación es alta, los bancos centrales aprueban incrementos de los tipos con el objetivo de que los bancos compensen el mayor coste de pedir dinero subiendo también los intereses que cobran a sus clientes por los créditos que les dan, como hipotecas o préstamos al consumo . Este encarecimiento general del crédito hace que a las familias y empresas les resulte más caro endeudarse, por lo que tienen menos dinero que consumir e invertir. Así, se reduce la demanda a la economía y, por extensión, los precios caen.
La inflación se enquista más de lo previsto
Pese a la moderación de los precios en el pasado mes –ocasionada principalmente por un abaratamiento de los combustibles–, esta última cifra del 3,3% anual es la que dificulta a la institución presidida por Jerome Powell reducir los tipos en la reunión de esta semana y , incluso, en la del 31 de julio. De hecho, los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, en sus siglas en inglés, el órgano interno que decide la política de tipos) confiesan que los precios están disminuyendo a un ritmo más bajo de lo esperado, por lo que la mayoría espera aprobar únicamente una bajada de tipos antes de acabar este año, mientras el pasado marzo se hablaba de, al menos, tres reducciones, según el comunicado emitido tras la reunión de este miércoles.
El hecho de que la economía estadounidense se mantenga robusta permite a la Fed contener las rebajas de tipos para mantener a raya la inflación, ya que el objetivo de la Fed es la estabilidad de precios, pero también la plena empleo. En este sentido, los tipos altos no han afectado ni al mercado laboral –la tasa de paro es del 4%, un mínimo histórico– ni a la actividad económica. "Si el mercado de trabajo se debilitara o la inflación cayera más de lo previsto, estamos preparados para responder rápidamente", ha asegurado Powell.