Foment propone medidas para acabar con el "infierno fiscal" en Catalunya

BarcelonaLa patronal Foment del Treball, presidida por Josep Sánchez Llibre, quiere influir en la política fiscal de la Generalitat, en el marco de las elecciones del 12 de mayo. Así, este martes ha presentado las conclusiones de su Libro verde de la fiscalidad, que incluye unas 80 propuestas planteadas por una cincuentena de expertos y que la institución prevé hacer llegar a los grupos políticos. Entre las principales conclusiones, Foment apunta a que Catalunya es un "infierno fiscal" para las empresas y para la ciudadanía.

En este sentido, Sánchez Llibre ha advertido de que la reforma de la financiación autonómica no puede servir de excusa para no abordar la fiscalidad en Catalunya: "Queremos ser los primeros de la clase. Queremos que Catalunya sea la locomotora que polarice la inversión y la política en España", ha dicho, y ha añadido que la fiscalidad debe acompañar a la modernización de la economía.

El ITP, ¿un freno a la vivienda?

El consejero de la presidencia de la patronal, Manel Silva, ha destacado que el impuesto sobre las transmisiones patrimoniales (ITP, que es de titularidad estatal) "perjudica y agrava" al mercado de la vivienda y dificulta el acceso. Así pues, ha tildado de "absolutamente exorbitantes" los niveles del gravamen en estos momentos: su propuesta pasa por reducir el tipo máximo al 7% y que, en caso de que sea la vivienda habitual, llegue al 4% , y ha abierto la puerta a que las comunidades autónomas puedan modificarlo a la baja.

Asimismo, como ya es un reclamo habitual para la institución, Sánchez Llibre insistió en la supresión del impuesto de patrimonio al considerarlo absolutamente confiscatorio: "Lo pediremos por lo civil o por lo penal", advirtió. También ha instado a reducir los tramos del IRPF y deflactarlos "para que no se convierta en un impuesto sobre la inflación, si ya de por sí la inflación genera pobreza", en palabras de Silva.

También han reclamado eliminar el impuesto sobre las emisiones del CO₂ de los vehículos de tracción mecánica porque, según Silva, al grabar la titularidad del vehículo y no el uso, "se penaliza a las empresas de alquiler establecidas en Cataluña, y no los vehículos que circulan por Cataluña" con origen y destino fuera.

Inversión

Fomento basa parte de sus reclamos en que la fiscalidad catalana supone una "barrera" a la inversión, tanto local como extranjera. De hecho, la patronal ha recordado que "la competitividad del sistema fiscal de Catalunya es extremadamente reducida" –incluye 11 impuestos propios– y que existe una desproporción entre las aportaciones de la ciudadanía y las prestaciones y los servicios públicos que reciben.

Este sistema, según Fomento, genera "una barrera importante y muy anticipada" de las inversiones en Catalunya y el establecimiento de nuevas empresas, y también ha criticado la imagen de inseguridad jurídica que a su juicio provoca, más allá del su impacto recaudatorio. En este sentido, reclamó reformar los impuestos, mejorar la gestión tributaria e impulsar un plan estratégico contra la economía sumergida.

El Gobierno niega el "infierno"

"Negamos categóricamente que Catalunya sea un 'infierno fiscal' como dice Foment del Treball y no hay ningún dato que sustente esta afirmación", han dicho este mismo martes fuentes del Govern, que además han indicado que el debate de la fiscalidad no se puede desatar del déficit fiscal.

Las mismas fuentes indican que en el informe de Fomento falta rigor, porque se dice que Cataluña tiene los tipos marginales más elevados del conjunto de las comunidades autónomas españolas tanto para las rentas altas (52%) como para las bajas (21,5%), cuando en realidad es un tipo mínimo del 20% y un máximo del 50%. Además, estas fuentes destacan que el proyecto de presupuesto para 2024, que no salió adelante, se descendía el tipo mínimo al 19%.