El pulso digital: por una red de comunicaciones robusta y segura

El continuo flujo de información requiere redes de comunicación e infraestructuras robustas. Sólo en Europa, más de 520 millones de personas están conectadas a través de redes móviles. Cada línea transmite más de 50 gigabytes de datos al mes, y sólo el 5G representa ya más de 200 millones de conexiones activas. Todo esto requiere energía: unos 0,12 kilovatios hora por cada gigabyte transferido. Pero, ¿qué ocurre si todo esto se detiene?

Mantener el suministro eléctrico es vital porque de éste dependen nuestras comunicaciones y nuestra presencia en el mundo. Si falla la electricidad, no sólo se apaga la tecnología: se detiene el pulso digital de la sociedad. Durante el apagón del 28 de abril de 2025 se evidenció la dependencia absoluta de la sociedad moderna en las redes de energía y comunicaciones. Cellnex, que jugó un papel clave manteniendo operativas las redes de radiodifusión y emergencias, demostró que la inversión en robustas infraestructuras es esencial para garantizar la continuidad del servicio en situaciones críticas.

En el contexto de caos y desinformación durante el apagón, la radio y la televisión se convirtieron en canales vitales, gracias a la preparación y resiliencia de las infraestructuras. Cellnex garantizó la continuidad del servicio en una situación crítica. Acciones como las de RTVE que activó protocolos de emergencia para garantizar la información pública, reduciendo canales, optimizando el consumo de combustible y asegurando la emisión gracias a generadores y reservas energéticas, pusieron sobre la mesa la importancia de contar con unas redes sólidas.

"Cuando todo falla, la comunicación no puede fallar", dice Alfonso Álvarez, CEO de Cellnex España. El apagón puso a prueba la resiliencia de las redes y su planificación. "Todo lo que funcionó durante el apagón es fruto de años de preparación previa. Invertir en infraestructuras es invertir en seguridad colectiva. En Cellnex no sólo operamos infraestructuras: sostenemos servicios esenciales para la vida cotidiana" porque "la conectividad es hoy un servicio público de facto".

El uso de baterías y generadores durante el apagón demostró que no son un extra sino también una parte crítica. Velar por la autonomía de las redes y un sólido futuro de las telecomunicaciones es, pues, irrenunciable.

La conectividad urbana y rural: small cells y torres compartidas

La conectividad, sobre todo en zonas urbanas, exigen también mucha planificación y tecnología y es en este sentido que Cellnex trabaja por igual para mejorar el flujo constante de información en entornos densos. En las ciudades estamos siempre conectados, queremos información en tiempo real, hacemos videollamadas, queremos comer a domicilio y esperamos estar conectados a tiendas, restaurantes o grandes almacenes, incluso detrás de gruesos muros de hormigón o cristales metálicos.

La inversión es igualmente necesaria. También el ingenio Los kioscos, símbolos tradicionales del espacio urbano, se convierten ahora en puntos wifi, pantallas interactivas o terminales de pago. Farolas, paradas de autobuses o mobiliario urbano son también nuevos puntos de cobertura. Luis Sancho, CEO de Urban Service Point, explica cómo estos espacios alojan small cillos, pequeñas celdas 4G y 5G casi invisibles, desplegadas por Cellnex y "muchas veces estamos conectados sin darnos cuenta a la antena que está justo a nuestro lado".

En el ámbito rural compartir infraestructuras es esencial para garantizar la conectividad. La despoblación rural ha sido una constante histórica pero la tecnología está abriendo nuevas oportunidades. Como la que impulsa Elio López, un ganadero gallego que ha desarrollado un collar inteligente para vacas que monitoriza el comportamiento animal en tiempo real, gracias a redes de baja potencia y al soporte de la infraestructura de Cellnex. "La conectividad nos permite seguir trabajando en el campo sin quedarnos atrás" y la viabilidad de proyectos como su paso por compartir torres y antenas, reduciendo costes, impacto ambiental y el acceso a internet en zonas con baja densidad de población.

Movilidad conectada: la revolución digital del transporte

Lo que antes era un handicap se convierte también en nuevas oportunidades como convertir desplazamientos en espacios de conectividad. Cada día, millones de personas pasan más de hora y media desplazándose y lo que hasta ahora era tiempo perdido se convierte en tiempo invertido gracias a la tecnología.

El 5G está transformando trenes y metros en espacios digitales donde trabajar, comunicarse y consumir contenidos. Con soluciones como el DAS, Cellnex hace posible una cobertura estable y de calidad en entornos ferroviarios complejos, impulsando una transformación social que redefine el valor del tiempo en movilidad como en proyectos de éxito en Catania y Nápoles.

Cuando la experiencia en directo también se vive en digital

Los grandes eventos son ahora experiencias únicas, gracias a la tecnología. Un concierto, un partido o un gran evento ya no se vive sólo en el lugar donde ocurre. La conectividad hace que millones de personas disfruten de la experiencia en tiempo real sin necesidad de estar físicamente.

El sistema de antenas distribuidas (DAS) desplegadas por Cellnex en estadios para garantizar cobertura 4G y 5G de alta calidad permiten que decenas de miles de usuarios se puedan conectar simultáneamente mientras dura el evento. Las plataformas deedge streaming, las experiencias inmersivas con múltiples cámaras, estadísticas y contenidos personalizados, convierten al aficionado en protagonista, ampliando la experiencia física con una dimensión digital.