El curioso destino de la granja de 'Memorias de África'

Barcelona"Yo tenía una granja en África". La famosa frase con la que comienza el filme de Sidney Pollack Memorias de África ha provocado que miles de personas tuvieran el sueño de vivir como Meryl Streep y Robert Redford. Como siempre, Hollywood maquilla la realidad un poco, aunque no deja de ser un filme precioso. Leyendo Memorias de África, el libro que inspiró el filme, puedes hacerte a la idea de cómo le costaría a la danesa Karen Blixen sacar adelante la granja casi sola. Y entender esa trágica historia de amor con el aventurero inglés Denys Finch-Hatton. Y si tienes la fortuna de visitar Nairobi, aún puedes aterrizar más en la realidad visitando la famosa granja.

Quizás te lleves una desilusión si esperabas una granja rodeada de plantaciones. El área a la que la danesa llegó con su primo lejano, el barón Bror von Blixen-Finecke con el que se había casado, ahora ya forma parte del área metropolitana de Nairobi. De hecho, el barrio se llama Karen en honor a la escritora, ya que la población local empezó a utilizar su nombre cuando era una de las pocas habitantes de la zona. Antes era una zona de granjas de blancos, mayoritariamente ingleses. Hoy es un área de mansiones, escuelas privadas y restaurantes caros. Un barrio donde ves a mucha gente blanca. Kenia ya es independiente hace décadas, pero en Karen podrías pensar que los británicos todavía mandan. Aquí tienen las escuelas, cafés de moda y mansiones como la granja de Blixen. Viven separados de la población local. Como ocurría cuando Karen Blixen vivía allí, son sociedades bastante segregadas. Los locales llegan a Karen para trabajar, pero pocos viven allí.

Mientras que el centro de Nairobi ha quedado un poco sucio y caótico, en Karen se respira calma. La casa-museo de la escritora sigue siendo visitada por muchos turistas. Muchos vecinos acuden para sentarse en el idílico café que han abierto. El café siempre ha sido bueno aquí. De hecho, era el producto estrella de la granja de Blixen, que funcionó hasta 1931. Ese año se rindió por la caída de los precios, el mismo año que su amante Denys Finch Hatton perdió la vida en un accidente de avión y ella regresó a Dinamarca. La granja del África de Blixen ya no existe, sólo queda su preciosa casa. Alrededor tampoco encuentras animales en libertad como entonces. Los puedes ver, pero de forma diferente: a diez minutos hay un centro que adopta elefantes huérfanos y una especie de parque privado donde puedes dar de comer a jirafas mientras te haces una selfie. La delicia de los turistas más jóvenes. ¿Qué pensaría Karen de todo esto?

Recomendación para viajar a Nairobi.

Libro: Memorias de África

Autor: Karen Blixen

Editorial: Labrador editores.