El rincón donde disfrutas pese a pasar unas vacaciones horribles

BarcelonaSeguro que todos tenemos el recuerdo de unas vacaciones que no fueron del todo bien. Un guía turístico que era un desastre, un hotelito que parecía precioso pero que resulta que caía a pedazos, un tren perdido, un avión cancelado, un dolor de estómago para comprar comida donde no tocaba. Y, años más tarde, cuando recuerdas ese verano... Muchas veces no sabes cómo ha pasado, pero lo recuerdas con una carcajada. Si eres una persona con sentido del humor, tienes más opciones para sobrevivir a unas malas vacaciones.

En 1953, los franceses se rieron con unas vacaciones nefastas, las de Monsieur Hulot, el personaje creado por el director Jacques Tati. En las salas de cine se estrenó la película Las vacaciones del sr. Hulot, el primer filme en el que Tati creaba su alter ego, este personaje alto, poco elegante, torpe, con un sombrero y una pipa. En la película, el Hulot llega a una población de la costa bretona para pasar el verano en un hotel frente al mar y provoca una revolución con sus numerosas pifias. La película fue un éxito y, de hecho, Tati interpretaría en más filmes al entrañable Monsieur Hulot, con quien ganaría la Palma de Oro en Cannes y el Oscar en 1958 gracias a Mi tío.

La población donde se grabaron las vacaciones de Hulot se llama Saint-Marc-sur-Mer. Era una zona de pescadores a seis kilómetros de Saint-Nazaire, al sur de la costa bretona, no lejos de Nantes. Oficialmente esta zona ya no forma parte de Bretaña, puesto que los políticos de París decidieron que formaría parte de la región del País del Loira. Pero cultural e históricamente siempre ha sido una zona bretona. Un lugar tranquilo castigado por la guerra: en Saint-Nazaire aún se pueden visitar las bases de submarinos de los nazis.

Una vez llegó la paz, empezó a llegar gente para veranear. Era un lugar tranquilo y tenía un hotel de madera de tres plantas, el Hotel de la Plage. No hacía falta más: llegabas en coche, aparcabas y pasabas unas semanas en el hotel, medio dormido en la playa, sin demasiado calor ni demasiado frío, al ser la costa atlántica. Comías buen pescado y marisco y, cuando tocaba, volvías a casa. Tati descubrió este rincón en 1951 y entendió que era el lugar ideal para su filme, donde con el humor hacía un poco de burla de cómo la gente se comporta cuando se va de vacaciones, sobreactuando por parecer interesante. Los hoteles son lugares ideales para realizar experimentos sociológicos: te encuentras con personas que intentan parecer más ricas de lo que son y que actúan como si los otros clientes las estuvieran mirando.

El Hotel de la Plage todavía existe. Una gran cadena internacional la ha comprado pero, por suerte, más allá de un cartel en la entrada han respetado la estructura de antes y se han limitado a modernizar las instalaciones. Además, justo al lado del hotel se colocó una estatua de bronce de Monsieur Hulot, puesto que durante décadas la gente iba gracias al filme. Los jóvenes franceses ya no van: buscan aventuras más lejos y quizás no conocen a Tati. Grave error, siempre hay que volver a Tati. Y entender que con el humor puedes entender mejor lo que te envuelve y puedes sobrevivir mejor a los problemas.

Recomendación para viajar a Bretaña

Film: Las vacaciones del sr. Hulot

Director: Jacques Tati

Año: 1953