Escapadas

Ocho destinos para vivir una Navidad especial

Los países con grandes mercados navideños o desde donde se pueden ver las auroras boreales son los preferidos entre los catalanes para realizar una escapada durante las fiestas

BarcelonaDespués de dos inviernos marcados por la pandemia, todo apunta a que esta Navidad será para hacer todo lo que no hemos podido hacer por el cóvido: reuniones familiares, comidas en grupo (con permiso de la inflación) y, de nuevo, viajes. Una encuesta de Deloitte constata que los consumidores tienen ganas de salir y disfrutar de estas fiestas, aunque se han vuelto más eficientes a la hora de comprar, buscando los mejores precios y planificando sus compras. Así, el 40% de los encuestados afirma que este año gastará más en las compras navideñas, ya que todavía disponen del ahorro que generaron durante la pandemia. Cada hogar español estima gastarse una media de 634 €, con las categorías de ocio y restauración (+29%) y de regalos (+12,4%) alcanzando un mayor incremento en la intención de gasto. Se estima también que destinarán una media de 60€ a los viajes, ya que la caída en la preocupación sobre una nueva ola de cóvid-19 anima a gastar más fuera de casa.

Ambiente navideño

En relación a los viajes, Ignasi Canals, responsable de producto de la agencia Tourist Forum, alerta: "Es una época muy popular para viajar, por lo que recomendamos reservar con la máxima antelación posible para encontrar precios razonables y, sobre todo, no quedar sin plazas en los destinos más demandados". En este sentido, apunta que la mayoría de gente busca, sobre todo, "destinos donde se viva el ambiente navideño y donde se puedan aprovechar las características específicas de la época, como la nieve; también hay quien busca escapar a lugares más cálidos huyendo del frío, pero es una tendencia a la baja ahora que el frío llega más tarde por el cambio climático”. Según apuntan desde Tourist Forum, los destinos más tradicionales durante las fiestas son aquellos "donde se celebran mercados navideños, los relacionados con poder ver a Papá Noel y los destinos donde se pueden ver auroras boreales". Concretamente, para este 2022, Ignasi Canals explica que los países para los que hay mayor demanda son "Austria y Suiza, por sus mercados de Navidad, así como los viajes a Islandia, Suecia, Noruega o Finlandia, para ver las espectaculares auroras boreales". Es remarcable el caso de Islandia, ya que "los precios son más razonables que en verano, hay vuelos directos y se pueden realizar excursiones muy interesantes para ver las auroras boreales. Además, desde hace un par de años , la Laponia sueca comienza a destacar como destino más sostenible para el invierno", concluye Canals.

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Si tiene pensado hacer una escapada coincidiendo con las fiestas de Navidad o Fin de Año, aquí tiene algunas propuestas.

1.
Alsacia

Una Navidad de cuento

Esta región del noreste de Francia es todo un clásico navideño. La ciudad principal de la zona, Estrasburgo, ha sido nombrada como la capital de la Navidad, ya que acoge el mercado navideño más antiguo y mayor de Francia. Se inauguró en 1570 y cuenta con más de 300 tenderetes. Pero hay otras dos localidades que merece la pena visitar. La primera es Colmar, donde los mercados navideños dan vida a la ciudad. Son muy turísticos y algo pequeños, pero están muy bien cuidados e iluminados. La segunda, Kaysersberg, posiblemente el pueblo más bonito de Alsacia.

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2.
Rovaniemi

La casa de Papá Noel

Esta localidad finlandesa es un destino obligado para las familias con hijos, puesto que es la ciudad natal de Santa Claus y un lugar para vivir una experiencia de Navidad única. De hecho, el hogar original de Santa Claus se encuentra en la misteriosa localidad de Korvatunturi, en la Laponia finlandesa, pero dado que su ubicación exacta es un secreto que conoce muy poca gente, se decidió establecer una oficina en Rovaniemi en 1985. En Laponia finlandesa, además, es posible ver auroras boreales hasta 200 noches al año. En Rovaniemi, se puede presenciar desde la ciudad y sus alrededores desde finales de agosto hasta principios de abril.

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3.
Lanzarote

Ruta de los belenes

La tercera isla canaria más poblada ofrece tres belenes muy representativos que se exhiben públicamente en diferentes partes de la isla. El de Yaiza tiene la peculiaridad de recrear, a pequeña escala, los sitios más emblemáticos de la isla: es como viajar a un Lanzarote en miniatura. El pesebre de Faria, ubicado en el pueblo de Faria, en medio del Valle de las Mil Palmeras, representa un Nacimiento con figuras llenas de detalles. Y, finalmente, en Tinajo, frente a la iglesia de San Roque, al oeste de la Isla, se ofrece un pesebre viviente, a cargo de los propios vecinos de la localidad.

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4.
Sofía

El destino inesperado

Cada Navidad en el City Garden de la capital búlgara colocan el Weihnachtsmarkt, un mercadillo navideño al más puro estilo alemán. Además de degustar delicias búlgaras, también encontrará obras de teatro y representaciones musicales. Un destino poco habitual pero muy interesante también en Navidad. Aproveche para visitar la impresionante catedral de Alexander Nevski, construida entre 1892 y 1912 en memoria de los miles de soldados rusos que murieron luchando por la independencia de Bulgaria contra los turcos. O el antiguo Palacio Real, que acoge dos museos que merece la pena visitar: la Galería Nacional de Arte y el Museo Etnográfico.

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5
Mallorca

Canto de la Sibila

El 24 de diciembre un canto enmudece a los asistentes a las tradicionalesMatines (Misa del Gallo) mallorquinas. Se trata del Canto de la Sibila, un canto de origen medieval introducido en la isla después de la conquista de Jaime I que profetiza la llegada del Redentor y del Juicio Final. Se entona sin acompañamiento instrumental, exceptuando los preludios entre estrofa y estrofa. Aunque inicialmente se cantaba en latín, desde finales del s. XIV ya están documentadas las primeras versiones en lengua catalana.

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6.
Valonia

La región de los mercados

En cada ciudad de esta región de Bélgica se pueden descubrir mercados con una variedad de productos artesanos, iluminaciones, animaciones y delicias gastronómicas. En Mons hay un mercado de Navidad muy especial en la Grand-Place y sus alrededores, con una gran mezcla de casitas, animaciones y actividades. Abierto durante todo diciembre, puede descubrir una gran variedad de espectáculos diferentes cada día o conciertos de big band. En los terrenos del castillo de Chimay encontrará 70 casitas con los productos de los mejores artesanos. Finalmente, muy cerca de la frontera francesa, Binche presenta uno de los mercados de Navidad más auténticos en la región con 46 casitas de productos artesanos, mientras que en Tournai encontrará el mercado navideño más antiguo de Valonia, en Halle aux Draps.

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7.
Londres

Un clásico que no falla

Siempre es una buena idea ir a Londres, y en Navidad también. Podrá disfrutar de la iluminación de sus calles, de sus mercados de Navidad en Leicester Square y Southbank, de las pistas de patinaje sobre hielo o de los increíbles escaparates y los fuegos artificiales de Fin de Año junto al Big Ben y el London Eye. Y si visita la ciudad en familia, no se olvide de pasar por el parque de atracciones Winter Wonderland en Hyde Park o ver el espectacular árbol de Navidad en Trafalgar Square.

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8.
Nueva York

El mejor sitio para recibir un nuevo año

Y terminamos con el clásico entre los clásicos. Encontrará mil y una excusas para hacer este viaje, aunque sea una vez en la vida, cómo tomar una sidra caliente en el Winter Village de Bryant Park; admirar el árbol de origami del Museo de Historia Natural; patinar sobre hielo en el Wollman Rink, en Central Park; pasear por una Nueva York en miniatura en el Jardín Botánico; maravillarse con el árbol iluminado del Rockefeller Center; navegar con los cruceros de Navidad de Classic Harbor Line, o recibir en 2023 en Times Square.

El éxito de Vigo en tiempos de crisis energética

En los últimos años la ciudad gallega de Vigo ha logrado convertirse en destino turístico de Navidad de primer orden, tras su apuesta por una iluminación tan espectacular como controvertida en sus calles. Once millones de luces led, un mercadillo navideño, atracciones de feria y escenarios ideales para selfies son los argumentos de una propuesta que trae mucho turismo a la ciudad, pero que también abre muchos interrogantes sobre su oportunidad en un contexto de crisis energética como lo que vivimos. El eje de este festival de luces son 4 calles: Policarpo Sanz, Alameda, Areal y Porta do Sol. La previsión municipal es que por la ciudad pasen más de 3 millones de personas durante los casi dos meses en los que están encendidas las luces y generen un retorno económico de entre 500 y 1.000 millones de euros.