La guerra entre los herederos de Michael Jackson no se detiene: lucha interna en la familia por su parte del enorme botín
La madre, de 94 años, y los tres hijos del artista batallan en los tribunales contra el fisco, contra los albaceas e, incluso, entre ellos para hacerse con una parte del goloso legado del Rey del Pop
BarcelonaParece casi un castigo divino que la figura de Michael Jackson no pueda descansar en paz ni después de su muerte, que fue hace tantos años que en estos momentos tocaría recordarlo sólo por los actos que protagonizó en vida y nada más . Pero su gran impacto en la cultura pop y su polémica existencia hacen que 15 años después de su desaparición –este 25 de junio se cumplirán ya 15 años– seguimos hablando de ello. Ahora, después de los contundentes documentales que han retratado la estrella como un depredador sexual o que han dado detalles de su autopsia, se habla de Jackson por su abundante herencia, que continúa sin llegar a sus tres malogrados hijos porque tanto ellos como la madre del cantante se encuentran en una lucha encarnizada por hacerse con parte del botín del difunto, que al morir rondaba en neto entre los 100 y los 300 millones de dólares. De hecho, justamente en esa disparidad de criterio sobre la cifra final es donde radica el problema de la guerra familiar.
Según unos informes judiciales divulgados recientemente por la revista People, la sucesión del Rey del Pop se encuentra suspendida sine die mientras continúen las disputas legales en torno al valor de su patrimonio. Es decir, que sus herederos no cobrarán nada más de lo que falta hasta que exista un acuerdo sobre el valor exacto de lo que todavía no han heredado del legado del artista, que –muy sabiamente conociendo su estirpe– decidió que fueran heredando poco a poco.
Pero, ¿de dónde viene este problema con la valoración del patrimonio de Michael Jackson, que 15 años después aún no se ha solucionado? Pues como ocurre siempre con los grandes millonarios: de sus problemas con el erario público. Cuando murió, el IRS –que en la práctica sería el fisco de EE.UU.– auditó la herencia del artista y consideró que se habían infravalorado sus activos a la hora de hacer inventario y que, por éste motivo, deberían pagarse unos 700 millones de dólares extra entre impuestos y multas pendientes. Evidentemente, sus herederos lo recurrieron a los tribunales porque esa cantidad era lo suficientemente grande para dejarse la piel si hiciera falta. En el 2021, afortunadamente para ellos y no para el resto de contribuyentes, un juzgado les dio la razón. Sin embargo, sus abogados también presentaron una petición de reconsideración del valor del catálogo musical de Jackson, que vendría a ser la madre de los huevos de su testamento. La reevaluación de aquello, por suerte o por desgracia para ellos, sigue todavía en marcha y lo mantiene todo paralizado.
Como la espera se les está haciendo larga y vivir del propio trabajo ya sabemos todos que es muy pesado, los tres hijos y la madre del artista han dicho que mientras esperan les haría ilusión recibir algunos dólares más por poder seguir viviendo de vacaciones permanentes. Pero he aquí un nuevo problema: los dos albaceas del legado de Jackson han dicho que no. Según ha trascendido a dicho medio, John Branca y John McClain consideran que no saben qué cantidad se les podría dar de forma segura. Es decir, qué cantidad se les podría asignar sin que después pudiera ser reclamada por las autoridades, porque, evidentemente, ellos no la podrían devolver porque ya se la habrían dilapidado. Sin embargo, éste sería sólo un motivo. Pero hay otro: el 20% de la herencia encallada y no cuantificada también debe repartirse entre organizaciones benéficas, tal y como dejó escrito Jackson, que parece que quería pasar a la historia como un buen samaritano. Si supiera la imagen que ha...
Cuando esto se desatasque es cuando se transferirá más dinero a los fideicomisos de cada uno de los tres hijos y de la madre, cada uno el suyo, ya que según las últimas voluntades del cantante de Smooth criminal no quería que sus hijos lo recibieran todo hasta que cumplieran 35 años. Es decir, cuando consigan que lo de heredar se desatasque, aún tendrán que esperar bastante para cobrarlo todo, ya que el mayor, Prince Michael Jr., tiene sólo 27 años. A continuación, viene su única hija, Paris-Michael, que tiene 26 –y que este jueves vino a Barcelona a celebrar los 40 años de Desigual–, y por último está Prince Michael Blanket Jackson II, que tiene 22 y que actualmente se hace llamar Bigi porque imaginamos que no le hizo ninguna gracia que su padre le pusiera manta –en inglés, blanket– de nombre. A su madre, Katherine Jackson, el cantante no le legó una entrega por fascículos de la herencia. Sin embargo, al paso que va todo, vete a saber cómo acabará el reparto de su parte de la herencia cuando ella falte, ya que tiene 94 años y no sabemos si está por muchas esperas judiciales más. No puedo imaginar qué harán los hermanos del Rey del Pop cuando tengan que luchar –sueño 8...– por su parte del pastel de la parte del pastel de su madre...
Nonagenaria (y adicta a los pleitos)
A estas alturas, la señora Katherine Jackson, a pesar de su provecta edad, tiene suficiente empuje para luchar para obtener el máximo provecho posible de la herencia de su hijo y hacerlo lo antes posible, cosa que entendemos, porque con 94 años es mejor no entretenerse demasiado. Con este propósito, la madre del cantante si hace falta se enfrenta a sus nietos huérfanos. Tanto es así que el pobre Bigi –antiguo Manta– y ella han mantenido trifurcas judiciales porque el joven opina que no está bien que su abuela pueda utilizar dinero de la herencia para pagar abogados, ya que esto acaba provocando un alargamiento insoportable del proceso que pone todo el imperio Jackson y sus herederos a las puertas del colapso. En las declaraciones de la señora en este pleito que han trascendido, ella soltó dos perlas maravillosas que se pueden resumir en que considera unos tacaños los albaceas y que opina que las donaciones benéficas ya se harán más adelante. Básicamente, cuando ella ya no esté. Y, si no se pueden hacer porque ya no hay dinero, que Dios se lo perdone...
En febrero de este año se produjo una venta por parte de los albaceas de la mitad del catálogo de Michael Jackson, cosa que la matriarca también recorrió. Según el New York Times, la transacción era de unos 600 millones de dólares. Pero ella lo recorrió y una sala le denegó las objeciones. Como ella apeló el pronunciamiento judicial de nuevo, el caso está aún parado. El acuerdo comercial dejaba en manos de los herederos la mitad del catálogo, cosa nada menor... Pero ella quiere más. Michael Jackson genera anualmente, según el medio estadounidense, unos 70 millones de dólares. Imagínense cuánta guerra nos queda por ver entre esta exótica estirpe. Espero que los hijos de Michael Jackson hayan heredado el gusto por los juicios de su abuela. Es evidente que les será mucho más útil que el talento artístico de su padre.