Familia real británica

"Clínicamente deprimido": el hermano menor de Kate Middleton publica un libro con reproches familiares

El pequeño de los Middleton explica el papel vital que tuvo su perrita Ella cuando intentó quitarse la vida en el 2017

James Middleton junto a su madre Carole Middleton el día de la boda de su hija Pippa
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BarcelonaSer el hermano menor de dos hijas que sobresalen en los estudios, tienen la mano rota en las competiciones deportivas y, además, una de ellas está destinada a ser la reina del Reino Unido te deja, al menos, en uno clara desventaja. Ésta ha sido la historia de autosuperación que James Middleton –el hermano pequeño de Kate Middleton– cuenta en el libro Meet Ella: the dog who saved my life[Conoce a Ella: la perra que me salvó la vida], que saldrá a la venta este jueves, 26 de septiembre. El título ya es bastante esclarecedor sobre cuáles son los dos sujetos del libro –aparte de sí mismo–. Por un lado, el papel de su perra como casi el único ser que le dio apoyo emocional incondicional y, por otro, su camino para superar una depresión severa y la incomprensión familiar sobre cómo tratar la salud mental.

La monarquía británica no gana para libros que exponen detalles privados de los integrantes de la familia real. Tras las numerosas y recientes publicaciones de Harry y Meghan –en forma de libro, podcast y serie– para malhablar de los entramados del interior de Buckingham, llegan ahora las críticas de la familia política de los reyes de Inglaterra. James Middleton publicará esta semana Meet Ella: the dog who saved my life, en el que el rol de su hermana en esta recuperación brilla por su ausencia, mientras que la perra Ella sí obtiene un gran reconocimiento. Ya desde la contraportada, el autor relata su estrecha relación con el animalito, especialmente en uno de sus momentos más oscuros, en el 2017. En noviembre de ese año James Middleton llegó a subir a lo más alto del tejado de su casa para quitarse la vida saltando al vacío. "Me siento incomprendido; un completo fracasado. No le desearía a nadie esa sensación de inutilidad y desesperación, el aislamiento y la soledad, ni a mi peor enemigo", escribe en el libro. Pero la mirada "imploradora" de la perra le hizo repensar la acción que estaba a punto de cometer.

La incomprensión de los padres y el apoyo distante de las hermanas

Para James Middleton los perros de la raza Spaniel, y en especial Ella –que murió en el 2023 por una enfermedad–, han sido el gran apoyo emocional de su vida. "Los perros nunca me han juzgado", dice en un fragmento del libro bastante revelador. Tal y como explica, quien sí lo hizo fueron sus padres: "Les resultaba difícil hablar conmigo sobre la salud mental, porque creían que me conocían mejor que yo mismo. Sus intenciones eran buenas y me apoyaron mucho. , pero se resistían a la terapia y su gran preocupación era que me volviera dependiente de los antidepresivos".

Por último, el pequeño de los tres hermanos buscó ayuda profesional para tratar de solucionar los problemas de salud mental a los que tuvo que hacer frente durante parte de su vida. Tras diferentes visitas le diagnosticaron que estaba "clínicamente deprimido" y tenía TDAH (trastorno por déficit de atención con hiperactividad). El diagnóstico le aligeró, ya que parecía encontrar explicación a sus malas notas de bachillerato, que hicieron llorar a su madre y empujaron a su padre a afirmar que su educación "era una pérdida de dinero". Pero lejos de ser el inicio de la solución de sus problemas, sus padres recibieron el diagnóstico como algo "incómodo". Aun así, James reconoce que Kate y Pippa le apoyaron en la causa.

Pero ese apoyo de sus dos hermanas fue, como mínimo, distante. De hecho, fue la Spaniel negra quien le acompañó a terapia. También estuvo a su lado cuando practicaba para pronunciar el discurso en la abadía de Westminster para la boda de Kate y Guillermo de Inglaterra, un momento que vivió con mucha tensión, agravado por sus problemas de dislexia.

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