Certificado de defunción

Se hacen públicas las causas de la muerte de Sinéad O'Connor un año después de su fallecimiento

Una infección respiratoria agravada por el asma que sufría fueron las causas de la muerte de la cantante

BarcelonaEl 27 de julio de hace un año se conoció la repentina muerte de Sinéad O'Connor, la cantante irlandesa que incomodaba al sector conservador de los años noventa con declaraciones sobre religión, sexualidad o, sencillamente, su vida. El artista, de 54 años, fue hallada muerta por la policía el día anterior en su domicilio de Londres, a donde se había trasladado hacía un mes. Entonces el ente judicial descartó que hubiera indicios de una muerte violenta y tampoco pudo señalar ninguna causa médica que pudiera explicar el fallecimiento a tan corta edad. Un año después de encargar la autopsia del cuerpo de la cantante, el diario irlandés The Independent ha hecho público el certificado de defunción de O'Connor.

"Una complicación de su enfermedad pulmonar obstructiva crónica y del asma bronquial, además de una infección de bajo grado de las vías respiratorias inferiores", son las palabras con las que el médico forense Julian Morris recoge la causa de muerte de la cantante irlandesa. Según el diario Daily Mail, fue Jake –el hijo que la cantante de Drink before the war tuvo con su primer marido, John Reynolds– quien el pasado miércoles registró formalmente la muerte de su madre.

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Una vida llena de momentos delicados hizo que algunas personas se atrevieran a apuntar que la muerte de O'Connor había sido un suicidio. De hecho, a finales de 2015 ingresó en un hospital por tendencias autolesivas; fue el mismo año en que suspendió la gira para cuidar a uno de sus hijos, gravemente enfermo. Por otra parte, la cantante tuvo que entrar en quirófano para someterse a una histerectomía y más tarde le retiraron la custodia de sus cuatro hijos –uno de ellos muerto por suicidio en el 2022.

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A lo largo de su vida , O'Connor sufrió muchos problemas de salud mental, que inicialmente fueron atribuidos a un diagnóstico erróneo de trastorno bipolar. Después de años medicándose incorrectamente y de varios intentos de suicidio, le volvieron a diagnosticar un trastorno de estrés postraumático y un trastorno límite de la personalidad causados ​​por los abusos físicos que sufrió de su madre durante la infancia.