"Vallviva siempre será el festival de mi padre"
Mireia Morera se ha puesto al frente de este festival solidario de la Garrotxa
Las PresasQuinta edición del festival Vallviva y primera sin la presencia física de Eudald Morera, que traspasó el pasado noviembre a la edad de 59 años. El promotor decidió organizar el festival después de la diagnosis de un cáncer en estado avanzado. "Es un festival que nace del corazón y del agradecimiento. Quería agradecer a la vida ya las personas haber sido un privilegiado por haber nacido en el que nací y vivido donde vivo. El festival me ha dado vida", dijo al ARA en junio de hace dos años. Lo sacó adelante en contra de la opinión de su familia, que creía que lo que tenía que hacer entonces era preocuparse por su salud. Pero cuando la familia entendió su determinación absoluta a sacar adelante el festival a los dos meses, desde el primer momento tuvo incondicionalmente a su hija mayor a su lado, Mireia –así como el resto de la familia–, y ahora es ella quien, con 27 años, sigue su estela.
"Seguir apostando por el festival era un reto para toda la fundación porque no teníamos claro cómo iría. El alma, lo que llevaba a cabo el festival y lideraba este proyecto, era mi padre y nosotros éramos complementos. Y ahora hemos dicho: «Venga va, ahora nos toca a nosotros sacarlo adelante». –explica Mireia Morera– . podíamos hacerlo de otra forma que seguir llevando a cabo este festival y haciendo que esta quinta edición fuera posible". Y lo harán con un cartel de lujo, empezando por la actuación del pianista canadiense Tony Ann, conjuntamente con el dúo estadounidense Arkai, dos virtuosos del violonchelo, el día de la inauguración, que será el del homenaje a Eudald Morera.
"Teníamos ganas de programar a un artista internacional que llegara y tocara la fibra a los asistentes. Era la gran idea y el sueño de mi padre, poder tener un artista internacional, y será el día que tendremos todas las autoridades, que ya nos han confirmado que vendrán. Será un día más de homenaje a mi padre que no de festival", dice Mireia More
Cada vez más empresas colaboradoras
Una de las cosas de las que está más satisfecha es que el número de empresas que se añaden a colaborar con el festival cada edición son más. "Hemos llegado a las doscientas cincuenta, que son más que en la pasada edición. Empresas que aportan su granito de arena en la medida de lo que pueden para colaborar y formar parte de este proyecto. Esto está siendo un boca a boca porque no tenemos a nadie que comercialice el festival y estamos muy contentos porque nos entran peticiones de nuevas empresas. packs empresariales hasta el día que comience el festival, pero está siendo un éxito", señala Morera.
"De la primera a la segunda edición hubo un salto importante en el número de empresas que apostaban por el festival. Y si lo miramos desde la primera edición hasta ahora, el salto es mucho mayor. Hemos ido creciendo, pero sobre todo hemos ido consolidando a todas estas empresas que confiaron en el proyecto. Al principio la gente era un poco más reacia porque no sabía exactamente lo que sería, y ahora que la gente ya lo conoce más es más fácil que la gente confíe más en el proyecto", añade.
Buen ritmo en la venta de entradas
Las entradas para algunas actuaciones ya están agotadas y para otras casi. Luz Casal, que realizará su única actuación en Catalunya este verano, ya ha vendido cerca del 85% del aforo. "Por ahora, este año hemos vendido más o menos lo mismo que el año pasado, quizás un poco más. Para nosotros era un gran reto, ver si la gente seguiría apostando por el festival sin mi padre, y vemos que así es. Lo sentiremos igual de cerca y él seguirá estando, pero de otro modo", dice Mireia Morera.
Prueba del crecimiento del festival es el presupuesto. "La primera edición tuvimos un presupuesto de 300.000 o 400.000 €. Fue un festival de dos días y los artistas que llevábamos eran los que podíamos llevar en ese momento. El año pasado llegamos a un millón de euros y este año lo superamos", dice Mireia Morera. Asimismo, la oferta gastronómica de calidad y de cocina de autor también sigue creciendo y para algunas cenas ya se han vendido todos los tiques.
"Hasta ahora yo era la mano derecha de mi padre y era quien llevaba un poco el día a día del proyecto y quien lo encabezaba en el sentido de la parte organizativa. Pero él era quien acababa decidiendo y liderándolo, era la cara visible. Este proyecto siempre será de mi padre", añade Morera. "Ahora me falta mi mano derecha, pero siempre he tenido el apoyo de mi familia y ahora me toca a mí coger este rol, pero me cojo mucho a Quim, el hermano de mi padre, que me está dando muchísimo apoyo, y eso hace que sea más fácil. A nivel emocional es complicado, evidentemente hay momentos muy bonitos y también hay momentos muy bonitos y hay más. Quim es quien me pone el terreno un poco más plano, junto con todo el equipo y con todo el mundo que lo hace posible", concluye Mireia Morera.