Biden se desdice e indulta a su hijo Hunter
El presidente cree que el pueblo lo entenderá porque el caso se impulsó sólo para dolerle a él
BarcelonaAhora que ya han pasado las elecciones, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se ha desdicho de su promesa de no utilizar su poder presidencial para perdonar a su hijo, Hunter Biden, que había sido condenado en dos casos judiciales . Uno por haber comprado declarado culpable de haber comprado ilegalmente una pistola y haber ocultado su adicción a las drogas para obtenerla, y el otro para evadir más de un millón de dólares en impuestos federales entre 2016 y 2019. En un comunicado publicado este domingo por la Casa Blanca, el presidente argumenta que las acusaciones contra Hunter tuvieron motivaciones políticas y que su único objetivo era perseguirle a él.
"Ninguna persona razonable que mire los hechos en los casos de Hunter puede llegar a otra conclusión que no sea que Hunter se puso en el punto de mira porque era mi hijo y eso está mal", ha dicho Biden. A su juicio, su hijo fue "imputado de forma selectiva e injusta". La sentencia de la pena por la compra de la pistola debía publicarse el próximo 12 de diciembre, y la del caso de evasión fiscal el 16.
En el primer juicio por la compra ilegal de una pistola , se le consideró culpable de haber mentido en un formulario para obtener un arma de fuego en el estado de Delaware, cuando dijo que no era consumidor de drogas. En su comunicado, Biden destaca que su hijo poseyó esa arma durante 11 días y no la utilizó para ningún delito, y que, por tanto, unos hechos así "casi nunca se llevan a juicio con cargos penales". En ese caso, su hijo se enfrentaba a una potencial pena de prisión de hasta 25 años de cárcel. En el caso de Los Ángeles, donde se declaró culpable de los nuevos delitos fiscales que se le imputaban, la pena máxima era de hasta 15 años de cárcel o una multa de hasta un millón de dólares.
"Los cargos sólo surgieron después de que varios de mis oponentes políticos en el Congreso instigaran ataques en mi contra y en oposición a mi elección" como presidente, ha señalado Biden. "Fue un intento de romper el Hunter, que lleva cinco años y medio sobrio, y que ha tenido que enfrentarse a ataques sin descanso ya una persecución selectiva. Al intentar romper en el Hunter también intentaban romperme a mí", añadía el presidente.
Acusaciones mutuas de persecución política
El cambio de postura de Biden coincide con el ocaso de su vida política y a menos de dos meses de que Donald Trump tome posesión. El republicano ha prometido perseguir a sus enemigos políticos y entre ellos, estaría el hijo del propio presidente. El sábado, antes de que Biden anunciara el perdón para Hunter, sus abogados presentaron una defensa pública titulada "La persecución política de Hunter Biden". Los letrados criticaban que su cliente había sido perseguido por crímenes que a otro ciudadano normal no se le habrían imputado y remarcaban que era muy probable que una vez Trump llegara al poder, Hunter afrontara nuevas amenazas "injustas". "Con las elecciones decididas, la amenaza contra Hunter es real".
El argumento de la persecución política es el mismo que Trump ha estado utilizando durante este tiempo por los cuatro casos penales que tenía abiertos, que ahora ya han quedado en vía muerta tras ganar las elecciones. El juez del caso Stormy Daniels, el único juicio que llegó a puerto y en el que Trump fue declarado culpable, ha pospuesto indefinidamente la publicación de la pena. Paralelamente, el fiscal especial Jack Smith ha retirado ambas acusaciones por ambos casos federales y el juicio estatal de Georgia sigue congelado. Trump no sólo contará con la inmunidad del cargo, sino que ya ha nombrado a una seguidora fiel, Pam Bondi, para que sea la nueva fiscal general.
La reacción del presidente electo no se ha hecho esperar, aunque mismo Trump también utilizó este período de su primera presidencia, cuando ya había perdido las elecciones, pero todavía era presidente, por conceder varios perdones, en ese caso a colaboradores suyos como Steve Bannon. Ahora ha aprovechado la decisión de Biden para defender un perdón que él mismo ha anunciado en campaña y que piensa otorgar en cuanto llegue a la Casa Blanca: el perdón a los acusados del Asalto al Capitolio del 6 de enero del 2021.