Putin avisa a Trump de que responderá a los últimos ataques de Ucrania
El presidente estadounidense no ha dicho si ha intentado disuadir al ruso en su represalia
WashingtonDonald Trump ha vuelto a hablar con Vladimir Putin y asegura que el presidente ruso le ha advertido que tendrá que responder a los últimos ataques de Ucrania. "El presidente Putin ha dicho, con bastante contundencia, que deberá responder al ataque reciente a los aeródromos", ha escrito el mandatario estadounidense en una publicación en Truth Social este miércoles. Pocos minutos después, el republicano ha eliminado la publicación para después republicarla. El contenido era exactamente el mismo.
Trump no ha dicho si ha intentado disuadir a Putin de tomar represalias contra Kiiv, y ha destacado cómo Moscú se ha ofrecido a participar en las conversaciones con Irán sobre las armas nucleares. "Le he expresado al presidente Putin que Irán no puede tener un arma nuclear y, en eso, creo que estábamos de acuerdo. El presidente Putin ha sugerido que participará en las conversaciones con Irán y que quizás podría ayudar a llegar a una conclusión rápida", ha escrito.
La aparente confianza que ha mostrado hacia Moscú por las negociaciones con Teherán contrasta con las críticas de los últimos días contra Putin. A finales de mayo, Trump afirmó que el ruso se había "vuelto completamente loco" después de que lanzara unos setenta misiles y unos trescientos drones contra Ucrania. El tono del presidente se contradecía con el tono de hace unas semanas y pretendía impostar imparcialidad ante la situación como si ahora una respuesta rusa a los ataques ucranianos fuera legítima. "Hemos hablado sobre el ataque de Ucrania a los aviones rusos atacados, así como de otros ataques que se han producido por parte de los dos bandos [...] El presidente Putin ha dicho, con bastante contundencia, que deberá responder al ataque reciente a los aeródromos", ha escrito.
Paralelamente, el asesor del Kremlin por asuntos internacionales, Yuri Ushakov, ha dicho en rueda de prensa que Trump ha "confirmado de nuevo que los estadounidenses no habían sido informantes con antelación" sobre los últimos ataques ucranianos.
El republicano ha descrito la llamada como "una buena conversación, pero no una que lleve a una paz inmediata". La afirmación confirma el cambio de tono, o al menos la intención de mostrar cierto cansancio por parte de Washington respecto al papel de mediador. Aun así, Trump sigue tratando y señalando a Volodímir Zelenski como el principal responsable de la guerra iniciada cuando Rusia invadió su país.
Las conversaciones de paz, atascadas
Kiiv hace tiempo que aceptó la propuesta de un alto el fuego de 30 días mientras que Moscú sigue negándose. Ese mismo miércoles, horas antes de la llamada con Trump, Putin volvía a reiterarlo en una reunión televisada con los oficiales del gobierno. El presidente ruso calificaba la ofensiva ucraniana de "ataques terroristas" y decía que estas acciones están destinadas a romper las conversaciones de paz que ahora mismo existe entre Kiiv y Moscú.
Este martes, Ucrania atacó el puente que une la península de Crimea con la de Tamán, en Rusia, y que constituye un punto simbólico de la ocupación rusa. La ofensiva obligó a cerrar el puente de Kertx durante horas. Dos días antes, Kiiv había lanzado el mayor y profundo ataque contra la aviación estratégica rusaen una audaz operación encubierta.
Se trata de la cuarta vez que Trump y Putin se llaman desde que el republicano fue investido presidente en enero. En las primeras conversaciones, el presidente estadounidense sólo logró un pacto de mínimos para evitar ataques a las infraestructuras energéticas que rápidamente Moscú rompió. Sin embargo, Trump no ha parado de hacer concesiones a Rusia y de intentar doblegar la voluntad de Ucrania con la suspensión temporal de la ayuda militar y económica.
Últimamente, después de que Putin haya continuado tirando por el derecho y dejando en evidencia al republicano, la Casa Blanca ha empezado a enviar señales de cansancio respecto al papel de mediador que decidió adoptar. El hartazgo –que sigue poniendo el foco en Zelenski y no en Putin– también coincide cuando Washington ya ha logrado firmar un acuerdo con Kiiv para explotar los recursos naturales del país, entre ellos minerales clave para la fabricación de chips y gas.