"La mayoría de ucranianos no aceptan una cesión de territorio a Putin"
Francesc Millan, jefe de Internacional del diario, explica en un encuentro con suscriptores su experiencia en los distintos viajes a Ucrania
BarcelonaEl ARA siempre ha apostado por destinar esfuerzos para estar allí donde suceden los hechos que marcan la actualidad del mundo. "Es vital para el periodismo internacional poder viajar y contar las cosas desde el terreno". Lo recordó ayer el jefe de Internacional del diario, Francesc Millan, en un encuentro con suscriptores que tuvo lugar en la sede del diario. Francesc Millan es jefe de Internacional del ARA, y en los últimos meses ha estado en Siria, en Israel y en Ucrania, tres puntos que han marcado la agenda informativa de este 2025. En el encuentro con suscritpores, el tema central fue Ucrania, donde Millan ha viajado varias veces desde el inicio de la invasión. "Después de tres años y medio de guerra, la fatiga se nota cada vez más. También he visto un cambio respecto a la última vez: Kiiv es ahora el objetivo prioritario de la guerra psicológica de Putin. La capital es bombardeada a menudo y las defensas antiaéreas ya no son tan efectivas como antes para detener a los proyectiles rusos".
El encuentro fue muy participativo y generó debate entre los asistentes. La gran pregunta vinculada a la actualidad era hasta qué punto son creíbles las negociaciones para un alto el fuego lideradas por Donald Trump. Millan explicó que la mayoría de ucranianos con los que él ha podido hablar en el último viaje, hace unas semanas, eran totalmente escépticos. "No se creen ni Trump ni mucho menos Putin. La mayoría piensan que la guerra será aún más larga y que si hay un acuerdo perjudicará a los intereses de Kiiv", apuntó Millan.
El jefe de Internacional del ARA también aseguró que según su experiencia sobre el terreno, "la mayoría de ucranianos no quieren aceptar una cesión de territorios porque creen que, si esto ocurre, en un futuro Rusia se aprovechará de estos territorios para intentar volver a invadir Ucrania entera". Sin embargo, Millan insistió en que es difícil generalizar y, como es debido, hay matices a tener en cuenta.
También destacó el papel que juegan los drones. Estos aparatos se han convertido en esenciales para ambos ejércitos. El perfeccionamiento de su uso los convierte en el arma estrella en la frente ucraniana, hasta el punto de que la gran mayoría de bajas que tienen ambos bandos es por culpa de drones. Soldados de ambos ejércitos han decidido empezar a desplazarse por el frente en motocicletas porque en caso de ataque de dron las bajas son menos contundentes que si se viaja con vehículos donde se concentran mayor afluencia de tropas.
En este sentido, y aprovechando que Millan estuvo la semana pasada en Estrasburgo coincidiendo con el discurso sobre el estado de la Unión de Von der Leyen, se habló especialmente sobre el papel de Europa en esta guerra. "La guerra de Ucrania ha destapado una gran debilidad de la UE: sus dependencias", afirmaba Millan. Y ahora, según el periodista, la dependencia que más preocupa es la de Estados Unidos de Donald Trump, que sigue garantizando la protección y la seguridad en Europa. "Se habla mucho de autonomía estratégica en la UE, pero da la sensación de que esta autonomía estratégica todavía está lejos y que, mientras tanto, habrá que seguir haciendo el balón en la Casa Blanca", explicitó. En esa línea, también se debatió qué consecuencias tendría para ambos actores la entrada de Ucrania, convertida ahora en una potencia militar, en la Unión Europea.
Millan también explicó qué supone ser periodista en zonas de conflicto. "Hay que asumir y conocer bien los riesgos, por supuesto". Y puso en valor la apuesta que hace el ARA por la sección de Internacional, y especialmente por enviar a sus periodistas a los lugares del mundo que están decidiendo nuestro futuro. "Creo que podemos estar orgullosos de la presencia que tiene el ARA en estas zonas. Es de valorar y también es de agradecer a vosotros, suscritpores, porque sin su apoyo no sería posible realizar estos viajes", concluyó.
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