Ikea denunciará a la ultraderecha por haber utilizado su imagen en propaganda antiinmigración en Bélgica
La compañía sueca considera que se le han vulnerado los derechos "como marca e imagen corporativa"
BruselasEl partido de extrema derecha flamenco Vlaams Belang ha utilizado la imagen corporativa de la famosa marca de muebles sueca Ikea para hacer una campaña de propaganda política contra la inmigración y los refugiados que llegan a Bélgica. Ha bautizado su plan contra la entrada de recién llegados con la sigla IKEA ("la inmigración puede ser realmente diferente", traducido del flamenco), usa los colores corporativos de la compañía –que coinciden con los de la formación– y su logotipo.
La compañía sueca ya ha salido a dejar claro que no tiene nada que ver con ello y ha anunciado que presentará acciones legales contra el partido antiinmigración por haber usado su imagen como reclamo. "Estamos molestos porque se han violado nuestros derechos, como marca y como identidad corporativa", dice Ikea en un comunicado. Aún así, la empresa sueca ha evitado condenar las propuestas de Vlaams Belang y posicionarse políticamente. "Estamos intentando ser políticamente neutrales y no queremos que nuestra marca se use de este modo y que la gente pueda pensar que estamos detrás de eso, cuando no tenemos nada que ver", añade.
Esta campaña también quiere ser un guiño al nuevo gobierno formado en Suecia. A pesar de que el partido de extrema derecha antiinmigración Demócratas de Suecia (SD) se haya quedado sin ministerios, apoya al ejecutivo conservador y ha conseguido tener influencia política al más alto nivel por primera vez. De hecho, Vlaams Belang celebró los buenos resultados del SD y más de una vez ha señalado como ejemplo a seguir las políticas que quiere aplicar la formación ultra sueca, que también se basan en querer prohibir la entrada de refugiados e inmigrantes.
En la misma línea, el "programa IKEA" que ha presentado Vlaams Belang consta de cinco medidas antiinmigración para que "tengan un efecto disuasorio" para los migrantes que tienen la intención de ir a trabajar y a vivir a Flandes. Algunas de las iniciativas que querría poner en marcha el partido de extrema derecha flamenco son restricciones al permiso de reagrupación familiar, sobre todo en cuanto a la pareja y a los hijos menores, una prueba obligatoria para acceder a la ciudadanía o complicarles, todavía más, el acceso a ayudas sociales.