El éxito del primer intercambio estabiliza el alto el fuego en Gaza

El CairoA pesar de las dilatorias maniobras del gobierno israelí y el retraso inicial de la entrada en vigor del alto el fuego entre Hamás e Israel, las críticas dos primeras jornadas de tregua se han sucedido sin grandes incidentes en Gaza. Después del primer intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos, este lunes transcurre con una relativa calma en la Franja. La ayuda humanitaria también ha empezado a aumentar, un paso vital para paliar la catastrófica crisis humanitaria después de quince meses de guerra.

Tras una larga y tensa espera, 90 prisioneros palestinos –mujeres y menores de edad– fueron liberados la madrugada del lunes a cambio de las tres rehenes israelíes entregadas horas antes por Hamás en el marco del acuerdo con Israel. Las mujeres palestinas y los menores salieron de la cárcel de Offer en Ramallah, en la Cisjordania ocupada, y fueron trasladadas con dos autobuses de Cruz Roja hasta una plaza de la ciudad donde fueron recibidas en medio de escenas de alegría por una multitud de familiares y amigos.

Este primer grupo de prisioneros estaba formado por 69 mujeres y 21 adolescentes –el menor de 12 años– de Cisjordania y Jerusalén Este, y muchos se encontraban en detención administrativa, una figura legal en Israel que permite el encarcelamiento sin cargos y prorrogable. La prisionera liberada más conocida era Khalida Jarrar, de 62 años, una diputada del Frente Popular para la Liberación de Palestina que había pasado más de seis meses en una celda de aislamiento. Como Jarrar, algunos palestinos liberados se encontraban en un frágil estado de salud y describieron las duras condiciones que habían tenido que aguantar en prisión.

Las tres rehenes israelíes liberadas por Hamás el domingo, a su vez, se encuentran en un "estado estable", según declaró a medios locales el subdirector del hospital cerca de Tel Aviv al que fueron trasladadas, aunque precisó que necesitarán días para completar todos los exámenes médicos. La madre de una de las rehenes, Mandy Damari, también aseguró el lunes en un comunicado que su hija, que perdió dos dedos durante los ataques del 7 de octubre del 2023, "se encuentra mucho mejor de lo que cualquiera de nosotros podía haber previsto".

Una operación "compleja"

Cruz Roja, que ha facilitado la operación de intercambio, admitió el lunes que fue "compleja", pero su presidenta, Mirjana Spoljaric, declaró que "más familias esperan ansiosas a que sus seres queridos vuelvan a casa". Durante la primera fase del acuerdo de alto el fuego, que debe durar seis semanas, está previsto que Hamás libere a 33 rehenes y que Israel deje en libertad a más de 1.900 presos.

Otro aspecto clave del acuerdo entre Hamás e Israel es el compromiso de las autoridades israelíes de permitir un substancial aumento de la ayuda humanitaria a Gaza. El domingo, durante la primera jornada de tregua, más de 630 camiones con suministros básicos entraron en la Franja, según informó la agencia de la ONU de asuntos humanitarios (OCHA). Al menos 300 se dirigieron al norte, la zona más castigada y arrasada por el ejército israelí. Está previsto que en esta primera fase de la tregua puedan entrar en Gaza unos 600 camiones de media al día.

Buena parte de estos cargamentos provienen de Egipto, que entre el domingo y el lunes ha enviado a más de 600 camiones. Pero los convoyes egipcios no entran en Gaza directamente, aunque es la ruta más corta, por los requerimientos de inspección de las autoridades israelíes y la destrucción de la banda palestina del paso de Rafah, que conecta a Egipto con la Franja y fue ocupada y destruida el pasado mayo por tropas israelíes. Por estos motivos, los camiones egipcios deben desviarse hasta el paso de Al Auja, entre Egipto e Israel, y después por el de Karam Abu Salem, entre Israel y la Franja, lo que está ralentizando el proceso y limitando el envío de ayuda, según pudo constatar el ARA desde el paso de Rafah el domingo.

Regreso al norte

Dentro de Gaza, la continuidad del alto el fuego ha traído cierta calma y muchas familias han empezado a regresar a sus ciudades para evaluar la magnitud de los daños causados ​​por el ejército israelí e intentar localizar a familiares bajo los escombros. Las tropas israelíes, a su vez, se han ido retirando desde el domingo de zonas densamente pobladas, aunque todavía están desplegadas en una zona almohada alrededor de la Franja donde la población no puede regresar.

Donde sí ha estallado la tensión ha estado en Cisjordania. Durante la noche del domingo al lunes, decenas de colonos atacaron a varios pueblos palestinos e incendiaron casas y vehículos, según documentó el grupo de derechos humanos israelí Yesh Din. Asimismo, un soldado israelí murió en la detonación de un artefacto explosivo en una localidad del norte de Cisjordania y el jefe del estado mayor del ejército, Herzi Halevi, declaró que se están preparando para llevar a cabo operaciones significativas" en la región.