Israel y Palestina: siete décadas de guerra y treguas rotas

LondresEl alto el fuego que ha entrado en vigor este viernes en la Franja de Gaza es el tercero de la actual guerra, iniciada el 7 de octubre de 2023, a raíz de los ataques de Hamás sobre Israel. Hubo uno entre el 24 de noviembre y el 1 de diciembre del 2023; y un segundo, más largo, entre el 15 de enero y el 18 de marzo de ese mismo año. ¿Puede ser ahora distinto y conducir a un proceso de paz definitivo? Los retos son enormes, el plan de Trump es muy genérico y poco sistemático y el riesgo de caer en la maldición de una historia de violencia y muerte es muy alto. El peso del pasado atrae a la región hacia el abismo sistemáticamente.

Pero más que hablar de inicio –de la actual guerra– habría que hablar de la reanudación de una guerra, tan interminable como permanente. Porque, en realidad, desde la creación del Estado de Israel, en mayo de 1948, el conflicto con el pueblo palestino y con los países árabes vecinos ha pasado por sucesivos ciclos de guerra, levantamientos de la población palestina y treguas muy frágiles. Pero contar guerras y treguas o altos el fuego entre los dos bandos depende un poco de lo que se considere una guerra (¿las más importantes, intifadas, operaciones militares puntuales...?) y de lo que se considere una tregua (¿altos el fuego formales, armisticios, pausas…?). A continuación les ofrecemos un sumario de los episodios más significativos de la convulsa historia reciente de Oriente Próximo.

1948-49

Guerra árabe-israelí, Guerra de Independencia para los israelíes, Nakba (desastre, en catalán) para los palestinos. La primera guerra estalló inmediatamente después de la declaración de independencia. El nuevo estado combatió contra los ejércitos de Egipto, Jordania, Siria y Líbano, mientras cientos de miles de palestinos (se calcula que unos 750.000) huían o eran expulsados ​​de su casa –la Nakba–. El conflicto terminó con los Acuerdos de Armisticio de 1949, que fijaron la línea verde y dejaron a Cisjordania bajo control jordano y Gaza bajo administración egipcia.

1956

Crisis de Suez. En los años siguientes al armisticio de 1949, los ataques transfronterizos de los fedainos palestinos y las represalias israelíes crearon un patrón de violencia continuado en la zona. Israel, aliado con Francia y Reino Unido, invadieron territorio egipcio para intentar el control del Canal, pero la falta de apoyo y la presión de Estados Unidos y Naciones Unidas provocaron su retirada.

1967

Este año marcó un punto de inflexión en la historia del conflicto. La guerra de los Seis Días alteró el mapa de la región hasta ahora: Israel derrotó a los ejércitos árabes, ocupó Cisjordania, Jerusalén Este y Gaza, y tomó el control de territorios que siguen siendo hoy el epicentro del conflicto. Desde entonces, la ocupación militar y la política de colonias se han convertido en el núcleo de la disputa. La violación de los derechos humanos es sistemática en la Cisjordania ocupada.

1969-1970

La guerra de Attrition enfrentó a Israel y Egipto entre marzo de 1969 y agosto de 1970, como continuación de la guerra de los Seis Días. Impulsada por Nasser, Egipto quería desgastar a Israel con ataques constantes en el canal de Suez. El conflicto terminó el 7 de agosto de 1970 con un alto el fuego negociado por Estados Unidos mediante el plan establecido por Williams Rogers, entonces secretario de Estado, que establecía el fin de las hostilidades y abría la puerta a nuevas conversaciones de paz bajo el amparo de la ONU. Aunque el plan tuvo un éxito limitado, va por posible un alto el fuego que acabó efectivamente con la guerra de desgaste, y sentó las bases para la posterior diplomacia liderada por Estados Unidos en Oriente Medio.

1973

Guerra de Yom Kippur. Egipto y Siria atacaron a Israel por sorpresa para recuperar el territorio perdido. Aunque fue una guerra regional, sus consecuencias afectaron profundamente a los palestinos, que vieron cómo sus aspiraciones nacionales quedaban subordinadas a la diplomacia interárabe. En los años posteriores llevaron el ascenso de la Organización para la Liberación de Palestina (OAP) y el crecimiento del reconocimiento internacional de su causa.

1987

Dentro de los territorios ocupados, una nueva etapa comenzó en diciembre de ese año, con la Primera Intifada, una revuelta popular contra el dominio israelí en Cisjordania y Gaza. La revuelta, que combinaba desobediencia civil y enfrentamientos violentos, duró seis años y desembocó en el proceso de paz de Oslo, ahora desmantelado. Los acuerdos de 1993 crearon la Autoridad Nacional Palestina y establecieron el principio de ambos estados, pero tampoco trajeron una paz duradera.

2000-2005

La Segunda Intifada, mucho más violenta, estalló a raíz de la visita de Ariel Sharon a la explanada de las Mezquitas y provocó miles de muertos. El conflicto se dio por terminado en febrero del 2005, con un alto el fuego acordado entre Mahmud Abbas y Ariel Sharon en Sharm el-Sheij, el mismo escenario que ahora, pero sin que se alcanzara una paz duradera.

2007

La toma de poder de Hamás en la Franja de Gaza abrió una nueva serie de guerras cortas y devastadoras. Operation Cast Lead (2008–09), Pillar of Defense (2012) y Protective Edge siguieron un patrón similar: lanzamiento de cohetes desde Gaza, bombardeos masivos de Israel, cientos de civiles palestinos muertos y treguas negociadas por Egipto, Qatar o Estados Unidos. Cada alto el fuego restablecía una calma precaria sin abordar las causas de fondo: el bloqueo, la ocupación de Cisjordania y la carencia de un horizonte político para el pueblo palestino.

2021

En mayo un nuevo enfrentamiento de sólo once días volvió a devastar a Gaza y acabó con otra tregua egipcia. Elstatu quo se mantuvo hasta el 7 de octubre del 2023. Si se cuenta cada ronda de violencia como una guerra, los historiadores registran entre diez y quince desde 1948, según se incluyan o no los conflictos regionales árabes. En cualquier caso, el número de treguas, en cambio, es incalculable: desde los armisticios de 1949 hasta las decenas de altos el fuego acordados en Gaza, casi cada episodio armado, más o menos grave, o genocida, como el presente, ha terminado igual, con un acuerdo que pone en pausa los combates pero que no resuelve el conflicto.