Gaza vuelve a pasar hambre: "Israel ha cortado la ayuda humanitaria y el precio de la harina se ha duplicado"
Un muerto y cuatro heridos en un apuñalamiento múltiple en Haifa (Israel)
BarcelonaLa decisión del domingo del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de volver a cortar la entrada de ayuda humanitaria en Gaza ya se hace notar en la calle: los precios de los alimentos se han disparado y la gente teme que vuelvan los bombardeos indiscriminados después de seis semanas de alto el fuego.
"En cuestión de horas hemos visto cómo el precio de los alimentos se disparaba: el precio de la harina o de los huevos se ha duplicado. Y la gente está muy angustiada porque teme volver a quedarse sin comida", explica en el ARA desde Al-Mawasi, en el sur de Gaza, Caroline. Un comerciante de Khan Yunis, una localidad en el sur de la Franja, lo ratifica: con los estantes de los comercios vacíos, el precio de un saco de harina ha pasado de 40 a 100 chequeles, casi 30 euros.
Los precios del aceite y las verduras, así como el del combustible, también se han duplicado o triplicado. "La gente tiene mucho miedo a que la guerra vuelva a empezar", añade Seguin. MSF también duda de si podrá continuar su actividad: "Depende de lo que dure el cierre, tenemos muy poco material y medicinas almacenados".
Las autoridades de Gaza, controladas por Hamás, han tratado de calmar a la gente, les han asegurado que controlarán a los comerciantes para no subir los precios y han dicho que tienen reservas para dos semanas, pero la gente se prepara para lo peor. Después de 15 meses de bombardeos indiscriminados y falta de todo lo necesario para la vida, los mensajes que vienen de Washington y de Tel Aviv no son esperanzadores: insisten en vaciar la Franja de palestinos, en una apelación sin tapujos a la limpieza étnica.
Presencia de tropas
Ahmed al Shufi, alcalde de Rafah, explica al ARA que durante la tregua, Israel no ha permitido la entrada de suministros vitales como generadores para los hospitales y maquinaria pesada para el desescombro y recuperación de los cuerpos aplastados bajo los escombros. El otro tema pendiente es la retirada de las tropas israelíes de la Franja, que debería completarse con la segunda fase del alto el fuego. "Los soldados israelíes siguen ocupando a Rafah y los francotiradores y los tanques no paran de disparar contra la gente –dice el alcalde–. La comunidad internacional debería presionar a Netanyahu a continuar con la segunda fase del alto el fuego para detener el baño de sangre y que los palestinos podamos vivir en paz en nuestra tierra".
Drones israelíes han matado este lunes por la mañana a dos civiles en Rafah y han herido a otros tres. Medios palestinos aseguran que el ataque ha comenzado con el lanzamiento de dos misiles desde aviones israelíes y de disparos desde helicópteros contra la localidad palestina. También se han registrado ataques de artillería en Jabalia, en el norte de la Franja. La agencia de noticias palestina Wafa informó de que los barcos militares israelíes abrieron fuego frente a la costa de Khan Yunis, en una zona clasificada como humanitaria donde se agolpan miles de desplazados internos.
El sábado expiró la primera fase del alto el fuego que había comenzado el 19 de enero y que preveía, además de los intercambios de rehenes israelíes por prisioneros palestinos, la entrada de 600 camiones diarios de ayuda humanitaria de media. Esto debería haber continuado durante la segunda y tercera fase del acuerdo. Sin embargo, Hamás ha denunciado que Israel ha incumplido el acuerdo y que no han llegado a Gaza ni la mitad del combustible ni los generadores acordados y también ha dicho que la parte más estratégica de la ayuda, el ganado vivo, no ha recibido la autorización de Israel.
Las conversaciones entre Israel y Hamás para implementar la segunda parte de la tregua pactada el pasado mes de enero siguen bloqueadas. "Vamos a tomar medidas si Hamás sigue reteniendo a los rehenes. Y en todo esto, Israel sabe que Estados Unidos y el presidente Trump nos cubren los hombros", ha dicho Netanyahu en un videocomunicado este domingo por la noche. Netanyahu y Estados Unidos quieren que Hamás acepte continuar los intercambios hasta liberar a los 59 rehenes que permanecen en la Franja –35 de los cuales han sido declarados muertos– sin el compromiso de la retirada de tropas israelíes establecido en el alto el fuego. Hamás lo consideró un intento de "volver a la casilla de salida".
Todo está a la espera de que los países árabes presenten este martes su plan en respuesta a las amenazas de Trump de convertir Gaza en un complejo turístico sin palestinos. Los gobernantes de la región se reúnen en El Cairo y deben explicar su propuesta para la reconstrucción de la Franja. Pero el tema clave es quien gobernará el enclave palestino: Netanyahu y Trump quieren borrar a Hamás del mapa, pero es la única fuerza con capacidad de gobierno hoy por hoy.
Ataque a la ciudad israelí de Haifa
Paralelamente, este lunes un hombre de 70 años ha muerto y otras cuatro personas han resultado heridas en un ataque con cuchillo en la estación central de autobuses de la ciudad israelí de Haifa. La policía ha abatido al atacante, un ciudadano israelí de la minoría drusa que había vuelto a vivir en un pueblo cercano a Haifa procedente de Alemania.