Netanyahu ordena bombardear Líbano como respuesta a un ataque contra Israel

BeirutLa frontera entre Israel y Líbano ha vuelto a ser escenario de un grave repunte de la violencia. Por primera vez en tres meses se lanzaron cohetes desde territorio libanés hacia el norte de Israel, que impactaron en una zona residencial. La respuesta de Israel no se hizo esperar. Tras interceptar los cohetes que se dirigían hacia la localidad de Metula, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ordenó a las fuerzas armadas que respondieran de forma contundente. El gobierno de Tel-Aviv ha advertido de que el futuro de Metula ya no es distinto al de Beirut, lo que insinúa una amenaza directa sobre la capital libanesa. Mientras, el jefe del estado mayor israelí, Eyal Zamir, ha anunciado que el ejército evaluará los próximos pasos en la escalada militar.

La artillería israelí ha llevado a cabo 18 ataques aéreos dispersos en el sur del Líbano con más de 25 misiles en contra de varias localidades. El ministerio de Sanidad libanés informó de la muerte de dos personas, incluida una niña, y de ocho heridos, entre ellos dos niños. A los bombardeos se sumaron acciones de los soldados israelíes que siguen desplegados en cinco puntos en la frontera. Estos dispararon con ametralladoras y artillería contra localidades como Hula y Markaba, así como Kafr Kila en el distrito de Marjayoun.

En un contexto de violencia creciente, el presidente libanés, Joseph Aoun, hizo un llamamiento a la calma y condenó los ataques israelíes, que describió como intentos de arrastrar a Líbano a un nuevo conflicto. Aoun ha señalado que estas violaciones del alto el fuego desde el pasado 18 de febrero están socavando los esfuerzos de recuperación nacional. En la misma línea, el primer ministro Nawaf Salam llamó a la calma en la frontera y solicitó la colaboración del ministerio de Defensa y de la ONU para contener la situación, y también pidió que se ejerza presión sobre Israel para que se retire de los territorios libaneses ocupados, recordando las violaciones a la Resolución 1701 de la Resolución 1701.

Más allá de las palabras, el ejército libanés dice haber descubierto "tres lanzacohetes improvisados" en el norte del río Litani que fueron desmantelados en un esfuerzo por controlar la situación. Las autoridades aseguran que están tomando medidas para contener la situación y evitar una mayor escalada. Pese a una aparente calma relativa al sur de Líbano, fuentes de seguridad mencionaron que Israel no completó su respuesta a los lanzamientos de cohetes.

Hezbollah niega que esté implicado

En este contexto Hezbollah ha negado cualquier implicación en los últimos lanzamientos de cohetes y ha calificado a las acusaciones israelíes como un pretexto para continuar con su agresión contra el Líbano. El grupo chií reafirmó su compromiso con el alto el fuego y expresó el apoyo al gobierno libanés ante lo que describió como "una peligrosa escalada sionista".

La frontera entre Israel y Líbano vuelve a ser escenario de fuego cruzado, amenazas y represalias. Con la tregua debilitada, la región se enfrenta al riesgo de una nueva escalada que podría tener consecuencias imprevisibles para ambos países y por la estabilidad herida de Oriente Medio.