Ucrania: la primera guerra con centrales nucleares tomadas como rehén
El ataque con fuego de artillería ruso sobre la planta antes de la ocupación hacía temer una catástrofe
Enviada especial a Odessa (Ucrania)Las tropas rusas han ocupado la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa, después de apoderarse hace una semana de la de Chernóbil, sellada con una cúpula desde el accidente de 1986. El ataque ha extendido el pánico por un desastre nuclear, pero las agencias internacionales han confirmado que no se ha detectado ninguna fuga radiactiva de la planta. La de Ucrania se ha convertido en la primera guerra en la que las centrales nucleares están dentro del campo de batalla y Rusia las ha tomado como rehenes para amenazar el gobierno de Kiev y Europa.
En Zaporiyia, que cuenta con 6 reactores nucleares de los 15 de los que dispone Ucrania, ha habido un intenso combate esta noche en que, según las autoridades ucranianas, los tanques rusos han disparado fuego de artillería y han provocado un incendio en un centro de formación y un laboratorio. Según las imágenes satélite analizadas por The New York Times, la artillería rusa ha impactado a menos de 500 metros de los reactores. De entrada los ocupantes no habrían permitido el acceso a los equipos de emergencia, pero finalmente el fuego ha sido extinguido a las 6.20 de la mañana. La embajada de Estados Unidos en Ucrania ha calificado el ataque de crimen de guerra.
Miedo por la seguridad de la planta con los militares
En la reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU, el embajador ruso, Vassili Nebénzia, ha negado que las tropas rusas atacaran deliberadamente la planta y ha asegurado que se habían refugiado de un ataque ucraniano dentro del centro de formación. Ha atribuido el incendio a los soldados ucranianos. El director general de la Agencia Internacional de la Energía Atómica, Rafael Grossi, ha dicho que todas las instalaciones nucleares de Ucrania están en peligro de accidente o ataque y se ha ofrecido a viajar a Chernóbil y Zaporiyia para inspeccionarlas y establecer un "marco seguro". Ha alertado de que "la situación no estará normalizada mientras haya fuerzas militares al cargo" de las plantas.
De madrugada, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, denunciaba el ataque a la central nuclear con un vídeo, en un emotivo discurso que buscaba la respuesta de los gobiernos europeos y la opinión pública, rememorando el desastre de Chernóbil, y dibujaba un escenario apocalíptico. "La central nuclear más grande de Europa está en llamas. Ahora mismo, los tanques rusos están disparando contra unidades nucleares. Son tanques con visión térmica: saben dónde están bombardeando y se han preparado para ello. Me dirijo a todos los ucranianos y a todos los europeos, a todas las personas que conocen la palabra Chernóbil, que saben el sufrimiento y las víctimas que causó la explosión en la central nuclear. Fue un desastre global", ha dicho Zelenski. "Por primera vez en la historia de la humanidad, un estado terrorista comete terrorismo nuclear", ha añadido, para reclamar a Europa que "se despierte".
Zelenski ha explicado que ha hablado por teléfono con varios líderes mundiales, entre los que se encuentran el presidente de los EE. UU., Joe Biden; el canciller alemán, Olaf Scholz, y el primer ministro británico, Boris Johnson. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha anunciado que propondrá medidas para garantizar la seguridad de las cinco principales centrales nucleares de Ucrania.
“Las operaciones militares alrededor de instalaciones nucleares y otras infraestructuras civiles no son solo inaceptables, sino también altamente irresponsables”, ha afirmado la jefa de Asuntos Políticos de la ONU, Rosemary DiCarlo, que ha subrayado que los ataques contra centrales nucleares violan el derecho internacional.
Adelantos en el frente sur y pánico en Kiev
Zaporiyia se encuentra en el frente del sur, entre la ciudad de Jersón, que cayó el miércoles, y la de Mariúpol, más al este, que está totalmente asediada por las fuerzas rusas y donde, según ha dicho el alcalde en un discurso televisado, no hay ni agua, ni calefacción ni electricidad y ya empieza a faltar la comida después de cinco días de combate ininterrumpido. El alcalde de Jersón, la primera gran ciudad ucraniana que las tropas rusas han podido ocupar, se ha reunido con el comandante ruso que quiere poner la ciudad bajo administración militar y ha pedido que se abra un corredor humanitario para la población que quiera huir ante un desastre humanitario inminente. Hasta ahora, sin embargo, no se han materializado los corredores humanitarios a los que Rusia se comprometió en la última ronda de negociaciones de este jueves.
En Mykolaiv, más al oeste, el Ayuntamiento ha anunciado la caída de la ciudad, pero las autoridades centrales lo han desmentido. La ofensiva de Moscú por el sur tiene como objetivo controlar toda la salida al mar de Ucrania. En un signo claro de que el avance ruso se acelera, la marina ucraniana ha hundido el barco insignia de su flota al mar Negro para evitar que cayera en un ataque naval ruso.
En cuanto al frente del norte, en un pueblo de la periferia de Kiev, siete personas, incluidas dos criaturas, han muerto en un bombardeo aéreo ruso, según fuentes de la policía ucraniana. Las imágenes, de las afueras de Kiev, en Xaika (oeste), a solo 20 kilómetros del centro de la capital de Ucrania, mostraban una vez más el horror que se ha desatado en el país y que en ocho días de guerra ha roto la vida de millones de personas y ha causado una destrucción solo comparable a la causada en Alepo, Grozni, Irak, Afganistán y tantos otros rincones del planeta. Después de más de una semana de ataques, se han visto escenas de pánico en la estación de trenes de Kiev, con mucha gente, sobre todo mujeres y criaturas, intentando huir de la capital antes de quedar asediada.