Long Li Xue: "Para atraer a los jóvenes a la televisión en catalán no se tendrían que crear referentes, sino contenidos"

Laura Minguella
y Laura Minguella

BarcelonaLong Li Xue es uno de los creadores de contenido en catalán más populares. Con 16 años empezó a colgar vídeos a Instagram y ahora, con 21 años, acumula más de 30.000 seguidores en esta plataforma. Su sentido del humor, la capacidad de reírse de él mismo y su desparpajo ante la cámara lo hacen destacar y le han abierto las puertas a proyectos fuera de las redes, como ser uno de los integrantes de Adolescentes iCat,presentar la Nit de Santa Llúcia, organizada por Òmnium Cultural, o participar en Canvi de xip El got d'aigua, de TV3. Actualmente, es el presentador del canal de Twitch de Eufòria, el nuevo talent show de TV3.

¿Por qué empezaste a colgar vídeos en las redes sociales?

— Empecé haciendo vídeos porque era lo que me gustaba. Yo sufrí ciberacoso y lo combatí riéndome de mí mismo. Hacía bromas de chinos porque así cuando los otros lo hacían no me ofendía, porque yo era el primero en decírmelo. Para mí, hacer vídeos en catalán no fue una decisión. Sí que pensé en hacerlo en castellano para llegar a más gente, pero yo hablo catalán en gran parte de mi vida y me parecía absurdo cambiar de lengua en las redes, además que tampoco me sentiría cómodo. Con el paso de los años sí que he ido descubriendo que hacer contenido en catalán en internet tiene un peso y una responsabilidad lingüística muy importante.

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¿Cómo ves el estado actual del catalán en TikTok ahora que hay más creadores de contenido en esta lengua?

— Me alegra mucho de que se haya creado una comunidad catalana en TikTok porque durante la cuarentena, que es cuando yo entré en la aplicación, no había nadie que hiciera contenido en catalán y, por lo tanto, era una lengua muerta en una red social en tendencia. Esto quiere decir que la gente que pasaba cuatro o cinco horas diarias consumiendo tiktoks no encontraba ningún contenido en catalán y ya era un ámbito de uso menos donde se hablaba. De hecho, fue en aquella época que decidimos crear el hashtag #estiktokat para unificar los contenidos en catalán y es gracias a esto que hemos podido crear una comunidad catalana en TikTok y conseguir que el catalán sea una lengua con presencia en la app.

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¿Cómo surgió la idea del hashtag #estiktokat?

— Éramos un grupo de gente que hacíamos contenido en catalán y vimos que hacían falta referentes en esta lengua. Si nosotros no los creábamos y demostrábamos que se podía hacer contenido en catalán y, además, hacerlo bien, la gente no se animaría a hacerlo también porque todos sus referentes hablarían castellano. Decidimos unificar todos nuestros contenidos en un hashtag y funcionó muy bien, puesto que, cuando nuestros vídeos empezaron a usar #estiktokat, la gente se fue sumando. Estoy superorgulloso porque, con más de medio millón de vídeos, es el hashtag en catalán con más reproducciones de todo TikTok.

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¿Crees que en la televisión hay una falta de referentes en catalán?

— Creo que para contar con los jóvenes no se tendrían que crear referentes, sino contenidos que los atraigan, independientemente de si esto genera o no referentes. Los jóvenes nos hemos alejado de la tele porque no cubre nuestras necesidades y los contenidos que hay no nos llegan. Cuando hemos encontrado una cosa que nos ha atraído, como por ejemplo Crims, la gente que no lo podía ver el lunes lo buscaba y lo miraba en TV3 a la carta porque era un contenido que les interesaba y les llegaba. Ahora siento que con Eufòria pasará lo mismo, y eso vale mucho, porque quiere decir que se ha hecho una cosa a sabiendas de que el target son los jóvenes.

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¿Piensas que el formato multiplataforma de Eufòria se tendría que implantar en más proyectos televisivos?

— Sí, pero no solo en la televisión, sino en todos los ámbitos. Como creador de contenidos he chocado en muchas ocasiones con gente mayor haciendo cosas para jóvenes y esto no funciona. Estoy harto del discurso de querer hacer cosas para la juventud, en las redes sociales, para conectar con nuestra generación y que los jóvenes no podamos hacer propuestas porque desde arriba ya tienen pensado cómo quieren hacerlo según lo que creen que nos puede llegar. Me sabe mal, pero así no conectaréis con nosotros. Creo que falta que los jóvenes podamos tener más responsabilidad. 

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¿Cómo piensas que los jóvenes pueden conseguirlo?

— Yo pienso que tiene que haber un cambio de paradigma, pero exactamente no sabría explicar cómo. Los jóvenes no pedimos mucho, solo que nos cubráis las necesidades básicas. Realmente muchísima gente podría hacer, por mil y pocos euros, de community manager de un programa y crear contenido para las redes sociales, y sabría conectar con la audiencia joven porque sería un joven. Por lo tanto, quizás lo que hace falta es apostar por la multiplataforma y crear nuevos puestos de trabajo adaptados a las necesidades de los jóvenes.  

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¿La acogida de tus contenidos es diferente en Instagram y en TikTok?

— Totalmente. TikTok es un paradigma muy diferente de Instagram, donde la gente que me ve es mayoritariamente la que me sigue y ya sabe qué se espera. En cambio, en TikTok está el Para ti, que te muestra vídeos basándose en aquello que te gusta y en los virales. Por lo tanto, mis vídeos llegan a gente que no me conoce y gano más odio, porque la gente piensa: "Dejo este insulto a este tío que no sé quién es y me piro". Cero responsabilidades, es así. TikTok invita más al hate porque es una red social más polarizada.

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¿Cómo gestionas todo el odio que recibes?

— Yendo al psicólogo [ríe]. No, pero de verdad cuidando la salud mental, porque muchas veces no nos damos cuenta del daño que hacemos y de que detrás de las pantallas hay personas. Sí que es cierto que puedes estar más o menos acostumbrado, las cosas como son. Y yo estoy más acostumbrado, pero cuando tengo un día malo todo esto me cae como un cubo de agua fría. Además, a mí me insultan por ser chino y hablar catalán, pero también por ser coleccionista de zapatillas o gustarme la moda. Es bien bien que, hagas lo que hagas, la gente encontrará un motivo para insultarte. 

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¿Y justamente por eso nunca te has planteado dejar las redes sociales?

— Lo he dejado temporadas y he pensado muchas veces en desaparecer de internet. Al fin y al cabo, estoy viviendo de lo que me gusta y estoy disfrutando muchísimo del trabajo que hago, pero todas las cosas tienen su parte mala. Yo me siento muy afortunado, pero estar tan sobreexpuesto acaba pasando factura tarde o temprano.

¿Cómo te ves en un futuro?

El mundo de la comunicación es lo que me gusta, me apasiona y a lo que me quiero dedicar. Me veo haciendo charlas, que es una cosa que me gusta mucho, pero sobre todo me veo un futuro bastante mediático que, si no está en las redes, estará en el mundo del entretenimiento, que es mucho y muy guai.