Con ganas de apocalipsis

Incluso los diarios habitualmente hostiles al sanchismo han firmado –aunque sea por un día– a los perros de la crítica despiadada. Al día siguiente de todo, las portadas eran a menudo meramente enunciativas y esto permitía que dos rotativos antagónicos como elAbc y El País titularan de manera idéntica: "El gran apagón". Es una formulación que tiende a exculpar a Sánchez, puesto que sitúa el sidral bajo el amplio paraguas de las eventualidades imprevistas. No cuesta mucho imaginar que en los próximos días se afilarán más las plumas, en los periódicos de derechas. Ahora bien, había uno que cargaba las tintas. Y lo hacía literalmente, porque la portada no tenía foto: era toda negra –el calamaricidio ha sido importante– salvo dos palabras en blanco: "Caos total".

A ver, hablemos de ello. Evidentemente, para los que quedaron atrapados doce horas en un tren o tuvieron que dormir en un polideportivo el estorbo fue importante. cotidianas de gente aprovechando la desconexión estaban a sólo pocas horas de distancia de hordas entrando en los supermercados a golpe de béisbol, porque la membrana que mantiene el equilibrio social es más delgada de lo que queremos pensar. ¿cómo habrían titulado si la cosa se hubiera empantanado pongamos por caso dos o tres días más? Sin negar las afectaciones, que fueron severas y piden reflexión, era necesario titular con una cierta proporción.