Samsung ahora también adelgaza los plegables
El Fold 7, con 16 GB de RAM y 1 TB de almacenamiento, supera por primera vez el logro de los 2.500 euros de precio
BarcelonaEl Galaxy Z Fold del año 2019, el primer teléfono plegable de Samsung, medía 17,1 milímetros de grosor y pesaba 276 gramos. El Z Fold 7 que la marca ha presentado esta semana mide sólo 8,9 mm (menos de la mitad que el original) y pesa 215 gramos (un 22% menos), a pesar de llevar un chip más potente, pantallas más grandes y funciones de IA. Todo un hito tecnológico que, por supuesto, tiene un precio: a partir de 2.109 euros.
Tal y como nos tiene acostumbrados, Samsung ha presentado un Z Fold 7 que se abre horizontalmente y un Z Flip 7 que se abre verticalmente. También añade un Z Flip 7 SE que viene a ser Z Flip 6 a un precio más asequible, y nuevos relojes conectados. Dentro de este esquema, el Z Fold 7 es incluso más pequeño que su predecesor: 8,9 mm plegado y 4,2 mm desplegado, una reducción aproximada del 20%. Parece imposible adelgazarlo más: el conector USB marca el grosor mínimo. Para compararlo con un móvil convencional, el Galaxy S25 Ultra mide 8,2 mm de espesor. Pesa 215 gramos, menos que los 218 gramos del S25 Ultra a pesar de incorporar dos pantallas y una bisagra rediseñada que reduce la visibilidad del pliegue. La pantalla interior alcanza las 8 pulgadas, un 11% más de superficie que el Z Fold 6.
La cámara principal del Z Fold 7 es de 200 megapíxeles con estabilización óptica. Incluye también una ultragrande angular de 12 mpx (56% más luminosa) y un teleobjetivo de 10 mpx con zoom óptico 3X. Incorpora mejoras en el procesamiento de imágenes en condiciones de poca luz y HDR de 10 bits. La batería tiene 4400 mAh de capacidad. El teléfono monta el procesador Qualcomm Snapdragon 8 Elite for Galaxy de 3 nanómetros (nm), que según Samsung ofrece aumentos del 41% en NPU, 38% en CPU y 26% en GPU respecto a la generación anterior.
Pasando al Z Flip 7, la pantalla exterior es ahora de 4,1 pulgadas, ampliando las 3,4 del modelo anterior. El interior pasa de 6,7 a 6,9 pulgadas. El teléfono plegado mide 13,7 mm de espesor y pesa 188 gramos. La batería ha aumentado de 3.700 a 4.300 mAh. El sistema de cámaras consta de una ultragrande angular de 12 mpx y una gran angular de 50 mpx con zoom 2X. A diferencia del Fold 7 con chip de Qualcomm, el Flip 7 utiliza el procesador Exynos 2500 de Samsung, también de 3 nanómetros, como estrategia para diversificar proveedores.
Y, por último, el Galaxy Z Flip 7 FE es el primer plegable de Samsung en edición FE (siglas de Fan Edition). Sigue la misma estrategia comercial que Apple: ofrecer el modelo más popular de la generación anterior a menor precio. En ese caso, esencialmente un Z Flip 6 con el software más actualizado.
Funciones de software e IA
Los modelos salen con el sistema operativo Android 16; es la primera vez que unos teléfonos salen al mercado con esa versión. Samsung añade la capa de interfaz One UI 8, adaptada para pantallas plegables. Z Flip 7 incorpora Samsung DeX, que permite conectar el teléfono a un monitor externo para trabajar con una interfaz similar a la de escritorio. La marca sigue ampliando Galaxy AI, su plataforma de inteligencia artificial basada en los modelos Gemini de Google. Entre las nuevas funciones destacan Gemini Live con capacidades multimodales y contexto de pantalla; Circle to Search en los videojuegos para buscar en internet trucos de personajes específicos, y mejoras en el asistente fotográfico.
En este sentido, Gemini está optimizado para pantallas grandes en el Z Fold: ahora muestra los resultados de la IA en ventanas independientes o flotantes, manteniendo visible el contenido original. El usuario puede arrastrar el contenido generado por IA directamente a otras aplicaciones como Samsung Notes. El editor de imágenes ahora sugiere automáticamente objetos para borrar, mientras que el borrador de ruidos de audio está disponible en más aplicaciones. En el Z Flip 7 se ha añadido edición básica de fotos directamente a la pantalla exterior, con aplicación de filtros en tiempo real.
Como es habitual, varias funciones de la IA, como la transcripción de llamadas y algunas capacidades de procesamiento de lenguaje, no están disponibles para los usuarios catalanohablantes.
Precios al alza
Los nuevos modelos presentan notables incrementos de precio. La configuración más completa del Fold 7, con 16 GB de RAM y 1 TB de almacenamiento, supera los 2.500 euros, 160 más que el Fold 6 equivalente. Es el primero smartphone de Samsung que alcanza esa cifra. El Flip 7 comienza en 969 euros para la versión de 256 GB, 200 euros más que el modelo equivalente anterior. La versión de 512 GB cuesta 1.069 euros. El Flip 7 FE, en adelante el plegable más asequible de Samsung, tiene un precio inicial de 699 euros.
En el caso del Z Fold 7, la política de precios sigue la línea del Galaxy S25 Edge, donde Samsung utiliza la reducción de grosor para justificar incrementos del 20% respecto a los modelos equivalentes. La marca cree que los consumidores aceptarán precios más altos por diseños más delgados, una hipótesis que el mercado tendrá que validar.
Nuevos relojes
Los nuevos Galaxy Watch 8 adoptan el diseño del Watch Ultra: esfera redonda enmarcada en una caja cuadrada. El modelo estándar tiene variantes de 44 mm y 40 mm, mientras que el Classic con bisel giratorio mide 46 mm. El nuevo reloj también pierde grosor: es un 11% más delgado que el Watch 7 y promete un 8% más de autonomía y un 50% más de brillo con un máximo de 3.000 noches.
Samsung ha añadido al reloj funciones relacionadas de salud como el índice de antioxidantes en la piel, que mide los niveles de carotenoides en cinco segundos. Las indicaciones para acostarse analizan el ritmo circadiano durante tres días para sugerir horarios óptimos de sueño. El asistente de carrera analiza las constantes del usuario durante una carrera de 12 minutos, estima su forma física y le propone un plan de entrenamiento personalizado.
Todo ello se enmarca en la estrategia de Samsung de expandirse en el ámbito de la salud. Precisamente esta semana ha comprado Xealth, empresa estadounidense que integra los datos de dispositivos personales en sistemas de información hospitalarios.
Retos a afrontar
La reducción del grosor se consolida como uno de los argumentos de Samsung para diferenciarse en un mercado saturado. La compañía confía en que los consumidores aceptarán incrementos de precio por estos avances en ingeniería. Cabe decir que esta estrategia coincide con un momento de madurez del mercado de los smartphones, en el que los usuarios los conservan durante más tiempo y las mejoras entre generaciones son menos perceptibles.
Para poner en perspectiva el precio del Z Fold 7, la posibilidad de desplegar el teléfono para transformarlo en una tableta cuesta unos 1.000 euros adicionales si comparamos su precio de salida con el precio actual del S25 Ultra. Personalmente, nunca me gastaría más de 2.000 euros en un teléfono –ni siquiera en un teléfono más una tableta–, pero si dispone de ese dinero, tiene la necesidad de disponer de dos aparatos en uno solo y quiere estar a la última, el Z Fold 7 es sin duda uno de los mejores dispositivos del año.